Fotografía

Parte Única

Notas: no sé qué ha pasao.

Esto es un fic ZhuLiuHai y me volví verga asjdahskd no suelo shippear actores pero joder, amo con fuerza a estos dos. Es justo y necesario darles amor (?).

Este fic va dedicado con todo mi cochino amor a @Kbeautylie ella me hundió en esta ship y ahora no hay escapatoria.

Fotografía

El amor entre ellos es como una suave brisa en primavera: lento, acompasado, danza con parsimonia y transporta las verdes hojas, conduciéndolas a la siguiente estación.

En un mundo donde se ven obligados a ocultar la pasión tras sonrisas llenas de tensión y miradas que profesan más que mil palabras, buscan la forma de emitir calidez entre frases intrínsecas, esas que sólo ellos comprenden.

La calidez de las reuniones, los besos que se otorgan sin necesidad de unir sus labios, las palabras susurradas sin necesidad de profesarlas; han creado un nuevo idioma incomprendido, transformando la furtividad en una nueva expectación a explorar.

Sus labios se abren en un suspiro incoherente que perece cuando la lengua de su amado se interna en su cavidad lamiendo cada sección, sumergiendo su húmedo apéndice, obligándolo a bailar con el suyo en un vaivén sinuoso, apasionado.

Hay unas manos que tantean su cuerpo lechoso, delgado, sutilmente marcado. Con sus dedos dibuja surcos sobre su piel, esboza un astro invisible que transmite el sentir latente de su pasión por él. Cada plasmo deja una estela de caricias que se transforman en constelaciones carmesíes, manchando el lienzo de su cuerpo con delineaciones rosáceas, producto del afecto disoluto.

El avance es lento, tortuoso, Liu Hai Kuan es implacable, parsimonioso en su actuar. Se burla de su necesidad, manteniéndolo al borde de la desesperación, ansiando más contacto, y cuando Zhu Zan Jin cree obtener pronto más que simples caricias, él se aparta, dejándolo ávido, anhelante.

Un jadeo emerge de sus labios, Liu Hai Kuan lo atrapa en los suyos, saboreando la excitación latente. Abre los ojos, encontrándose con unos orbes oscuros que lo contemplan con lasciva apenas contenida.

—¿Lo quieres? —pregunta en voz baja, su amable modular no supone un aliciente cuando la burla se filtra en cada letra profesada.

Ansioso, asiente varias veces. En algunos momentos, se halla a sí mismo odiándose por ser tan endeble y necesitado, pero se recuerda que cada nimia acción profesada por su pareja, sólo es una demostración de cuán diferente es su trato con el resto, al suyo; de cómo a los demás, la fría deferencia los aparta, pero la forma burlesca de Liu Hai Kuan en tratarlo sólo demuestra que sus intimidades dirigidas en público, son para él.

Un extraño lenguaje donde expandir su afecto sin que se considere incorrecto.

Y entonces, comprende que sólo obtendrá de Liu Hai Kuan devoto amor y burlas afectuosas que él ya ha aprendido a aceptar como muestras de cariño a su persona.

Un gemido ahogado e incontenible emerge de sus labios cuando percibe a Liu Hai Kan abrirse paso a través de sus muslos, internándose con tortuosa lentitud en los pliegues de su interior, quebrantándolo con el doloroso placer de una acometida.

Las embestidas no se hacen esperar. Apasionado en su actuar, no tarda en comenzar los bamboleos estableciendo un ritmo donde sus cuerpos chocan repetidamente en una sucesión de profundos chapoteos que le arrancan jadeos temblorosos y suspiros necesitados.

El cabello está hecho un desastre, su cuerpo yace húmedo por el sudor, por el esfuerzo cuantioso que supone el contener los gemidos para así evitar que la burla se dibuje en cada lasciva expresión.

Los pardos oscuros de sus orbes brillan, llenos de lubricidad, muerde su labio y afianza sus muslos a su cintura delgada haciendo las penetraciones más profundas. Liu Hai Kuan ríe sin aliento y Zhu Zan Jin extiende sus brazos rodeando su cuerpo, atrayéndolo en un beso que compite con la rapidez de las embestidas descoordinadas.

El miembro erguido en medio de sus vientres se tensa, la fricción se torna insoportable y con un gemido ahogado en los labios de su pareja eyacula. Liu Hai Kuan otorga varias penetraciones más que alternan entre rápidas y lentas, pronto corriéndose, emitiendo un jadeo silencioso.

Se quedan sin aliento unos segundos y se separan un poco, sonriéndose tenuemente. Liu Hai Kuan sale de él con cuidado dándole un beso a su frente. Zhu Zan Jin lo ve incorporarse, quitándose el condón en el proceso para echarlo en el tacho de basura. Camina hasta el fondo donde está el baño, internándose. Lo ve salir al momento con dos toallitas húmedas.

Solícito, se inclina una vez más sobre su cuerpo, colocándose a su costado en la cama, limpiando sus vientres y parte de su torso. Cuando no ve ningún rastro de aquel líquido pegajoso más que el sudor presente en su piel, Liu Hai Kuan hace una bola con las dos tallitas húmedas y con destreza lo lanza al tacho de basura.

Dibuja una sonrisa tranquila, enterrando el rostro en su torso liso, níveo como el suyo.

—¿Vas a acurrucarte como un gato?

Zhu Zan Jin esboza un mohín que Liu Hai Kuan no puede ver.

—Soy un gato.

El pecho de Liu Hai Kuan vibra, está riéndose por las hilaridades que profesa. Sus brazos se ciñen a su cintura delgada tanteando la piel ligeramente enrojecida. Acaricia con cuidado, tocando los puntos donde sus dedos dejaron huellas pasionales de su amor licencioso.

Sin embargo, el momento es quebrantado cuando el celular de Liu Hai Kan suena, anunciando específicamente un tono lúgubre: es la llamada de su representante. Con un suspiro se aparta del abrazo, sentándose al borde de la cama, dándole la espalda. Zhu Zan Jin lo contempla con detenimiento, escuchando apenas sobre su participación en el siguiente proyecto.

Sabe que dentro de muy poco la burbuja de felicidad se romperá y cada uno retornará a sus deberes laborales.

Apesadumbrado, gira sobre su cuerpo buscando del otro costado de la cama en la mesa de noche su celular, encendiéndolo de inmediato. La imagen de él y Liu Hai Kuan besándose mientras cocinaban bollos de carne al vapor se esboza en su pantalla principal. Sabe que debe cambiarla tan pronto como salga del departamento. En el mundo del espectáculo nunca se puede ser demasiado paranoico, nunca demasiado descuidado.

Se queda un tiempo contemplándola, pensando en lo triste que él y muchas otras personas deban ocultar su relación de esta forma por un bien común, cuando pronto siente el mentón de Liu Hai Kuan posarse sobre el recoveco de su cuello, besando la piel desnuda.

—Debo salir al anochecer —murmura, suena verdaderamente lamentable. Probablemente esa sea la última vez en meses que puedan verse. Liu Hai Kuan sigue besándolo, y Zhu Zan Jin aún sigue con los ojos en la pantalla—. ¿Quieres otra foto?

Niega con la cabeza, esboza una sonrisa y se acuesta boca arriba para que Li Hai Kuan se cierna sobre su cuerpo. Lo atrae en un abrazo, funde sus labios con los contrarios y el celular queda olvidado. A los segundos se apartan, Zhu Zan Jin le esboza una sonrisa ligeramente picarona.

—No necesito otra foto cuando te tengo sobre mí.

Liu Hai Kuan esboza una sonrisa ladina, siente su miembro dormido rozar su muslo, despertándose con interés.

—Entonces haré que no necesites más fotos.

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Notas: no sé qué onda con esto pero así me los imagino, sorry sakjdhas

Espero que les haya gustado.