Capítulo 33: Marco y Polo

379 25 1
                                    

Honestamente, esperé qué después de las exclamaciones de sorpresa del público por la última declaración de Oriana, que el plató se transformara en un completo caos. Esperé que Carla comenzase a hablar a su inmensa velocidad sin que nadie le diera permiso, que los ganchos dieran sus opiniones tan sinceras como siempre y que Axel se viera rodeado por millones de comentarios que hicieran que su cabeza explotase. Pero no ocurrió nada de eso.

Se produjo un silencio muy incómodo en plató y una música de tensión comenzó a sonar. Alcé mi cabeza para mirar a la presentadora, esperando que se iniciara un debate o algo, lo que fuera, pero ella se dedicó a observar nuestras reacciones. Miré a mi izquierda y me encontré a una Carla con la mirada cabizbaja y con el labio tembloroso. A su lado estaba Oriana, intentando reprimir una sonrisa. Las asesoras del amor nos observaban atentamente a todos, al igual que todos los ganchos. Me pregunté qué cara tendría yo exactamente en esos momentos, pero en vez de pensar en ello, contemplé a Axel.

Seguía con su cara de incredibilidad, mirando a Oriana con sorpresa y con el ceño fruncido. Intenté comprender su expresión, obviamente él no se esperaba que Oriana explicase lo que hicieron en esa cita sin testigos, pero había algo más en cada gesto que hacía Axel. Y esto no me transmitía nada bueno.

-¿Alguien quiere comentar algo respecto esta nueva información?- Por fin la presentadora invitó a hablar. Melisa fue quién levantó la mano.

-A ver, yo tengo una pregunta para Oriana.- La asesora del amor se escondió un par de mechones oscuros detrás de su oreja.- ¿Por qué has confesado qué has tenido relaciones sexuales con tu tronista?

-Por qué me apetecía.- Oriana se encogió de hombros con insuficiencia.

-Ya, pero mi pregunta es ¿qué ganas con esto? ¿rabiar a tus contrincantes o cómo? Por qué normalmente somos nosotros los que nos pasamos medio programa intentando descubrir si ha pasado algo o no, y tú no has dudado ni un solo segundo en decirlo.

-Eso no es cierto.- Replicó Oriana a la defensiva.- El equipo estuvo como media hora conmigo haciéndome todo tipo de preguntas y presionándome para que explicase que había pasado.

-¡Venga ya!- Exclamó Maya.- ¿Ahora también vas a decir que te hemos apuntado con una pistola en la cabeza para qué nos dijera la verdad?

-No, pero sí que estuvieron persistentes para qué dijese la verdad.

-¿La verdad?- Axel tenía los ojos abiertos, en ese momento mi tronista parecía estar flipando.- ¿Qué estás haciendo Oriana?

-Pues decir la verdad, Axel, y ¿sabes qué? No es nada malo decirlo, no tenemos por qué disimular.

-A ver, Oriana...- Axel se removió en su trono y colocó sus codos en sus rodillas mientras se acariciaba su sien con una de sus manos.- ¿Puedes explicarme por qué estás diciendo algo qué no es cierto?

-No te entiendo, Axel.

-Pues ya somos dos.- Dijo Axel, ahora mirando a los espectadores.- Por qué yo me acabo de enterar ahora mismo que los dos nos hemos acostado en nuestra cita sin testigos.

-¿Estás desmintiendo lo qué ha dicho Oriana?- Preguntó Maya con la boca abierta y señalando con su dedo índice a mi rival.

-Por supuesto.- Axel se recostó en su trono, ahora parecía relajado e indiferente ante las declaraciones de su pretendienta.- Entre ella y yo no ha pasado más que dos besos.

-Axel, ¿pero qué dices?- La voz de Oriana estaba completamente rota.- ¿De verdad vas a dejarme como una mentirosa?

-No, lo que no voy a permitir es que vengas aquí y cuentes una historia que es incierta.

El diario de una pretendientaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora