Mi vida era una rutina diaria; despertaba a las 6:00 A.M, salía de casa hacia el trabajo a las 7:00 A.M y llegaba de trabajar aproximadamente a las 8:00 P.M, cenaba y leía por un largo rato hasta quedar dormido. Mi hermano Raúl siempre me decía que envejecería pronto por la monotonía que vivía día tras día ya que no salía a divertirme con frecuencia, no tenía pareja y me preocupaba excesivamente por el trabajo.
Yo era de las personas que no creía en el destino y las casualidades, recuerdo que mi madre siempre me decía que todo pasa por algo pero pensaba que era una manera de hacerme sentir mejor cuando algo salía mal, pero ocurrió algo que me hizo cambiar de opinión drásticamente; aquel día mi despertador se había retrasado por lo que salí de casa con 30 minutos de retraso.
Cuando conducía de camino al trabajo otro auto me choco por detrás, inmediatamente baje de mi auto y de el otro bajo una mujer a la cual le dije bruscamente:
-fíjate lo que has hecho-
-lo siento, lo siento- contesto muy nerviosa.Pude notar que en su mano derecha tenía un celular.
-No te han dicho que no debes usar celular mientras conduces-
-ya le dije que lo siento, mire esta es mi tarjeta con número de teléfono se pone en contacto con migo y cubriré los gastos. le parece bien ?-Tome la tarjeta de sus manos y sin decir nada más que respirando profundo subí a mi auto y continúe camino al trabajo. Al llegar a mi oficina ya el enojo se me había pasado pero lo extraño era que no paraba de pensar en aquella mujer que choco mi auto, tenía una intensa mirada que a cualquier persona pondría a pensar.
A la hora de almorzar salí con mi amigo y compañero de trabajo Marcos, mientras el me estaba hablando sobre uno proyecto que se estaba llevando a cabo en la empresa yo no estaba prestando ni la mínima atención a lo que decía.
Marcos al notar lo distraído que estaba toco mi hombro y me pregunto:
-te pasa algo?--no- conteste de inmediato.
Al terminar de almorzar fuimos a concluir con la siguiente ronda de trabajo, luego fui a casa e hice lo siempre acostumbrado.
Al día siguiente salí de casa más temprano, lleve el auto al taller y de ahí me fui en taxi al trabajo.
Al llegar a mi oficina sobre mi escritorio estaba la tarjeta de Alondra la mujer que había chocado mi auto, tome mi celular y decidí llamarla.
-hola Alondra te habla Alexander-
-Alexander?- preguntó.
-perdona no me presente ayer, soy el de el auto-
-ya recuerdo. que tal estas?-
-bien, te llamo para ver si aceptarías cenar conmigo esta noche-
-si claro- contestó ella.
-bueno ya sabes este es mi número tu eliges el lugar y me mandas la dirección-
-ok-
Mi día parecía ser perfecto ya que en mañana nos reunimos con el
Jefe de la empresa Robert Gutiérrez y me dio la noticia de que había sido ascendido de puesto, sentía una gran emoción pero lo que más me hacia ilusión y no sabía el por qué era el encuentro que tendría con Alondra.A cada instante miraba el reloj esperando ansiosamente la hora.
Siendo las 9:00 P.M me encontraba esperando a Alondra donde habíamos quedado. Al llegar muy amablemente me saluda y toma asiento, luego me entrego unos papeles y me dijo:
-aquí tengo los papeles del seguro y esas cosas para resolver el problema de tu auto-
-no te cite para eso- conteste mientras sonreía.
-entonces?- pregunto algo confundida.
-sólo quiero conocerte un poco y pedirte disculpa por la manera que te trate ayer. Te parece?-
-si claro, aunque yo soy quien debería de pedirte disculpa por chocar tu auto-
Platicamos durante un largo rato, sentí que las horas pasaron como segundos.
Alondra y yo nos seguimos viendo con frecuencia.
Al conocerla me di cuenta de la maravillosa persona que era. Era una mujer dulce, sencilla, inteligente, carismática y muy hermosa físicamente pero eso no se comparaba con la belleza que había en su interior.Luego de una amistad iniciamos una relación o más bien un juego el cual consistía en fingir sentir ya que no quería hacerme a la idea de estar enamorado, en mi mente permanecía siempre una frase que dice "Existe entre nosotros algo mejor que amor: una complicidad" pero a medida que pasaba el tiempo mis sentimientos por ella fueron cambiando ya que era inevitable enamorarse de una mujer como Alondra. Al principio todo era una atracción pero sin darme cuenta me enamore perdidamente de ella, sentí que todo se acciono en mi cuando ella llego a mi vida y que el motivo por el cual sonreía, por el que respiraba y me mantenía de pie era ella, es como si durante toda mi vida fui un juguete que estuvo apagado y de repente llego esa persona que me dio cuerda y me encendió y justo ahí empece a vivir.
Ahora me siento un hombre nuevo ya que siempre vivi una vida muy agitada, siempre esperaba tanto de mi que nada me conformaba pero hoy tengo a alguien que me dice: lo hiciste bien y con tan sólo decirlo me siento satisfecho y orgulloso de mi.
Hoy mi vida tiene otro rumbo y otro sentido; el de el amor y hoy han pasado 7 años de haber conocido esa maravillosa mujer que hoy es mi esposa y madre de mi hija Alexandra y creo que todos tenemos nuestro destino previsto y que si existen las casualidades porque me pregunto:
-que habría pasado si hubiese salido de casa 30 minutos antes y sobre todo si Alondra no hubiese chocado mi auto lo cual fue MI CASUALIDAD MÁS HERMOSA.
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Mi casualidad más hermosa
RomanceMi casualidad más hermosa es un pequeño cuento que narra la historia amorosa de Alexander, un hombre muy rutinario y estricto consigo mismo y que no creía en el destino y las casualidades hasta que ocurrió algo que lo hizo cambiar de opinión al igua...