Maybe the G&M

MAYBE THE GYM

Era un día como cualquier otro, DongHae acababa de salir del trabajo, y como de costumbre, apenas salía de allí se dirigía al gimnasio (SJ Fit) a hacer un poco de ejercicio para, como decía el, tornear mejor sus músculos. No es que el fuera un enclenque o algo así, pero un poco más de bíceps y abdominales no le vendrían nada mal. Además, también era una oportunidad para ver a su entrenador, HyukJae, un muchacho un año mayor que el, de cabello rojizo, musculatura bien marcada y una sonrisa que hipnotizaba a cualquiera. Desde hacía algún tiempo le había comenzado a gustar, y aprovechaba todas la oportunidades que tenía para hablar con el, era el único consuelo, ya que para su desgracia, HyukJae, o como le decían en el gym “EunHyuk”, era heterosexual, así que para Hae no había ni un chance con el.

Llego al gimnasio y se dirigió al vestidor a cambiarse. Allí entró en uno de los cubículos y se puso el pantalón de su sudadera y se dejo el esqueleto que llevaba debajo de su ropa de trabajo, mientras se cambiaba oyó a alguien al lado suyo como sollozando, así que prestó más atención y lo que oyó lo dejó atónito, ese alguien que Hae escuchaba (un hombre), no estaba sollozando, sino gimiendo su nombre. DongHae no lo podía creer, había alguien que fantaseaba con el y eso le produjo cierta excitación y curiosidad. Salió lentamente de su cubículo y cerró con seguro la puerta del vestidor, para asegurarse de que nadie entrara, guardo sus cosas en uno de los casilleros que había allí, y se acercó de nuevo al cubículo del cual provenían aquellos gemidos con su nombre, con mucha cautela comenzó a abrir la puerta del cubículo, que para su fortuna no tenía seguro, y lo que vio allí, lo dejó impactado; era nada más y nada menos que EunHyuk quien se hallaba ahí fantaseando y gimiendo el nombre de Hae. El solo pudo quedarse allí en silencio, disfrutando de aquella provocadora escena. DongHae notó como su hombría comenzaba a crecer dentro de su pantalón y no pudo evitar comenzar a estimular esa zona a medida que Hyuk aumentaba el ritmo. Los gemidos de hHyuk comenzaron a subir de tono, mientras que DongHae se mordía el labio para evitar que los de él salieran, cerró sus ojos llevado por el placer que le producía oír los gemidos del pelirrojo, siguió así un rato hasta que se percató de que todo se hallaba en silencio, así que abrió sus ojos y se dio cuenta de que al frente, un EunHyuk asombrado lo miraba de arriba abajo.

-¿Pero qué diablos estás haciendo DongHae?- , preguntó Hyuk en un tono un tanto alarmado. –Lo mismo te pregunto Hyuk, hasta donde sé, eras tú el que gemía mi nombre-

-¿Qué carajos?- deja de decir idioteces Lee DongHae, dijo Hyuk alzando la voz, sabes que soy heterosexual. ¿Ah, sí? Espetó DongHae, pues no me lo pareció cuando me deseabas entre gemidos.

Hyuk comenzaba a ponerse rojo, pero no de la ira, sino de ver a Hae ahí plantado en frente suyo con el pantalón aun abajo (cosa que el pez aun no había notado, hasta que Hyuk comenzó a mirarle ahí). Hyuk comenzó a notar como su hombría comenzaba a crecer, y es que para todos él era un heterosexual declarado, pero la realidad era que las mujeres poco le gustaban, por no decir nada, solo quería mostrar esa imagen de “semental” para que no lo fueran a joder, y en cuanto a DongHae, le gustó desde el día en que lo conoció, pero aun no se atrevía a aceptarlo. DongHae se le acercó, lo abrazó por detrás y le susurró en un tono provocador–déjate llevar, sé que me quieres tanto como yo a ti- , Hyuk ahogo un pequeño gemido al escuchar eso, separó a DongHae de el un tanto brusco y le dijo, -deja de soñar niño- Salió del cubículo y se dirigió hacía las duchas, DongHae lo seguía y no dejaba de repetir –le gusto a HyukJae, le gusto a HyukJae- , EunHyuk solo lo ignoraba, entró a una de las duchas y DongHae se metió con él.

Hyuk lo empujo y lo saco, le gritó – Oye, a ti que te pasa? Hay un montón de duchas aquí, ¿por qué te metes en esta? , le cerró la puerta, se aseguró de ponerle el seguro, se quito la ropa y se comenzó a “bañar”. En realidad lo del baño era un pretexto, ya que necesitaba bajar la calentura. Hae desde afuera le decía: - acéptalo, sabes que te encanto y quieres hacerme tuyo cuanto antes, tanto como yo deseo tenerte dentro monito- . Hyuk en la ducha intentaba acallar sus gemidos, lo que decía Hae no podía estar más lejos de la verdad y esto lo hacía excitarse aun más. –Estúpido DongHae- pensaba Hyuk, ni el agua fría me ayuda a bajar el “calor”.