Sweet Daddy

E P I S O D I O 6

Kim Taehyung...

Trato de pensar en todo lo que pasó ayer, simplemente lo que sé, es que estuve con Taehyung.

-ayer despues de pelear, estuve con Taehyung comiendo botanas... Pero no recuerdo más- digo triste por no saber que hacer, Jung Kook cierra sus manos en puños y oculta lo enojado que se siente.

-ese idiota, te dije que te alejaras de él- bufo, lo mire serio, no me gustaba esa actitud suya.

-no puedo creer que seas así, espero que te des cuenta de que Taehyung es mi amigo, y que simplemente no vine a rogarte y pedirte que te quedaras conmigo, sólo por que tu lo pides y por tus estúpidos celos.

-¿sabes? Tienes razón, yo soy el único malo aquí... Pero- me mira fijamente y con cierta decepción hacia mi- espero que tambien te des cuenta de lo malo que puede ser, tener a alguien que no es correspondido, sólo buscaba protegerte de ese imbécil- me dice en voz baja y suspira, se levanta y toma su chaqueta- debo ir con mis padres, estan esperándome en un restaurante... Si quieres venir, te daré la dirección y si no pues, eso sólo significa que no quieres nada conmigo- cierra la puerta y sale de casa, al igual que yo, después de él, lo abrazo por detrás y aspiro su aroma varonil.

-no quiero separarme de ti, eres la unica persona que sabe cómo me siento...-suspiro y caigo al suelo, me duelen las piernas y la espalda baja, ¿que carajos?

-¡Jimin!- se da la vuelta y me carga en brazos- ¿estás bien? Te llevare a enfermería, está cerca- me dice y me quedó callado, con lágrimas en los ojos, sintiendo su protección, su calor, su mirada en mi. Me sonríe calidamente y le correspondo.

Una vez en una camilla, me revisaron las piernas y tenía algunos moretones, al igual que en la espalda y muslos, ademas de pequeñas heridas en las muñecas.

-¿alguien te lastimó?- me mira el doctor preocupado y serio, mira a Jung Kook con sospecha.

-no... Sólo no recuerdo como pasó esto- le aseguro y miro a mi Kookie con aprecio.

-¿necesitas algo? Te traeré algo para comer- acaricia mis mejillas y besa mi frente- y se va a la tienda.

-ahora que estamos solos, usted puede decirme todo- me dice el doctor posando su mano en mi hombro ligeramente.

-no fue él- niego y sonrío.

-esta bien,te dejaré descansar y reposar, vendré a ponerte la segunda bolsa de hielo en 30 minutos- asiento y él se despide para seguir trabajando, supongo.

Me duermo al aburrirme rápidamente, Jungkook había tardado un poco en ir a la tienda.

[...]

Unas horas más tarde, desperté y froté mis ojos con mis manos levemente.

-¿Kookie?- murmuro y el mencionado me mira rápidamente y sonríe.

-hola mochi... ¿Te sientes mejor?- su mano sujeta la mía, ha estado conmigo todo este tiempo... Suspiro enamorado por su mirada.

-sí, e..estoy mejor- tartamudeo y me sonrojo.

-te traje algo de kimchi y ramen- me dice levantándose y preparando la comida.

-gracias Kookie- digo felíz

-me asegurare de llevarte a casa y prepararé una cena increíble solo para ti y para mi- dice besando mi frente, estoy más que contento y ruborizado por su dulce forma de ser, el lado que nadie conoce de mi tierno dientes de conejo

-bueno, primero come y luego te llevaré a cenar- piensa por unos momentos y me mira- ¿nos quedamos en un hotel? La verdad no podemos estar en mi casa, puede que estén mis padres, y en tu casa no, es un desorden, por ahora... No te preocupes, estarás bien conmigo, voy a cuidarte- acaricia mi cabello y besa mis labios.

Como lo más rápido que puedo y luego de la tercera bolsa de hielo en mi espalda y piernas me visto y me cuelgo en la espalda de Jungkook, su aroma es muy tranquilizante, su piel tan suave y clara, es perfecto para mis ojos... 4 años siendo el hombre que más amo.

Una vez que hemos salido, Jungkook llama a un taxi con la mano y nos lleva al hotel, él paga la habitación. Se podria decir que Jungkook es de una familia adinerada, o algo así. Sus padres trabajan en empresas conocidas en algunos países y en la capital de Corea del Sur, Seúl.

Jungkook me cargo hasta la habitación y me acostó en la cama matrimonial, prendió el televisor y cerró la puerta con llave para comenzar a hacer la cena, olía muy bien. Pasaron los minutos y la cena estaba lista, admire a mi hombre usando un mantel y algo sudado.
En lo que yo acomodaba la cama, él trajo las cosas a la recámara y se sentó a mi lado, recargue mi cabeza en su hombro y sonreí ampliamente.

-mochi... Espero que te guste- me dice nervioso. Tomo una cuchara y pruebo la sopa que me ha hecho

-¡está más que deliciosa!- digo con emoción y como un poco más, él me mira aliviado y rodea mi cintura con su mano.

Una vez terminada la comida, Kookie retira los platos y los lava, mientras tanto, pongo algo de musica en la televisión y apago las luces, quedando prendidas sólo algunas lámparas con luz naranja algo rojizo. Cuando Jungkook entra, se acuesta a mi lado y se quita toda la ropa a excepción de sus boxers. Por mi parte me quedó con una camisa grande que tapa hasta mis muslos.

Nos miramos mutuamente y me sonrojo, sonrío, subo una pierna encima de la suya y me acercó más a él, me quejo del dolor y Jungkook lo nota.

-hoy no bebé... necesitas descansar- me susurra al oído y hago un puchero,  bajo mi mano hacia su entrepierna y acaricio levemente su miembro, pude sentir como lentamente éste tenía una erección -j..jimn- su voz se corta- no sigas, no quiero lastimarte...- acaricia mi cintura y me apega a él haciéndome sentir su miembro ya listo.

Me sonrojo y lo beso, su cuello y labios, mi lengua intenta jugar con la suya, a los segundos, abre un poco más su boca dando pasó a mi lengua, y así formamos un beso intenso.

-daddy, te necesito ahora- suplico por que me toque y él accede, separa lentamente mis piernas una vez que estoy debajo de él.

-trataré de no lastimarte- susurra en mi oído y besa mi cuello, acaricia mis muslos y besa lentamente mis piernas, me quita mis boxers y comienza a masturbarme, siento cómo pasa su lengua por sobre mi miembro erecto, nunca me habían hecho algo así, y se siente increíble.

-oh Dios- susurro y acaricio el cabello de Kookie tratando de separarlo, lo jalo levemente hacia mí y abro mis piernas, él me mira y me ñierdo en sus ojos marrones.

-si te lastimo mucho dime o pellizcame- susurra algo preocupado y asiento a su petición.
Simplemente se acomoda y entra en mi, suelto un leve quejido y el dolor en mi espalda vuelve, pero no digo nada, disfruto cada segundo que pasa.

-bebé... Ufff- suspira y suelta algunos jadeos, me estremezco y abro un poco más mis piernas, esta vez mordiendo mi labio inferior para no quejarme pero es muy fuerte el dolor- ¿estas bien?- me pregunta.

-Daddy, sólo tienes que ser lento y yo estaré más que satisfecho- sonrío picaramente y él ríe por lo bajo

-eres de no creer Jimin- susurra en mi oído y me da leves y algunas fuertes embestidas, mientras me susurra cuanto le gustaría en estos momentos tenerme en cuatro.

-k..kookie..- solté un leve gemido y entierro mis uñas en su espalda, preparándome para las embestidas más dolorosas de mi vida -quiero que me des como tanto te gusta- murmuró sobre sus labios, él gimió y comenzó a darme embestidas más rápidas. Sabía que eso era lo que realmente queria escuchar.

A veces me besaba y dejaba marcas rojas en mis pezones, me tomaba muy levemente del cuello y le daba algunos apretones a éste, gimiendo con la voz ronca y lleno de placer, por mi parte, mis gemidos eran agudos y dejaba besos húmedos en su cuello. Pasaron los minutos y Jungkook se corrió dentro de mí. Suspiramos y el mayor se acuesta a mi lado, rodeando mi cintura con sus brazos, dormimos profundamente, diciendonos un simple te amo y un beso en la mejilla por parte de Jungkook de buenas noches.