Lo mejor que ha pasado ~ Marco Asensio ~

Capítulo 44

Ya hemos llegado a Madrid, estuvimos 2 días más al final en Mallorca porque Marco decía que había estado muy poco tiempo y como tenía días libres pues los utilizó para estar con sus amigos y su padre.
Ahora mismo estoy vistiendo a Adara, o intentándolo, porque no para quieta y no me deja vestirla agusto. La he dicho que íbamos a ir a ver a papi jugar al fútbol y esta como loca. Se que no voy a ver el partido agusto, ni yo, ni los que este en la misma sala con nosotras porque desde que a aprendido a andar no para de un lado a otro y las lía mucho y claro tengo que estar atenta de ella.

- Adara, para quieta, por favor. ¿Tu quieres ir a ver a papi jugar?
- Si.
- Pues para quieta que sino vamos a llegar tarde y no le vamos a ver jugar.
Si lo sé te lo digo antes - digo cuando veo que se queda quieta de repente al decirla eso.

El amor que le tiene a Marco no es normal, ni el de Marco a ella. Se quieren muchísimo los dos mutuamente, cosa que a mí me encanta.
Les tendríais que ver a los 2 jugando, bañándose juntos, de verdad es que es...indescriptible.

- Hola - digo entrando al palco del Bernabéu.
- Hola guapa - me responde Gilberto.
- Qué solo estás, ¿no? - digo dándole 2 besos y un abrazo - Adara - digo llamándola la atención. Ya estaba pegada al cristal, como ve todos los partidos - Da un besito al yayo.
- ¡Yayito! - dice corriendo a él - ¿Has venido a ver a papi?
- Claro que si mi niña. Que guapa estas con ese traje ¿no?
- Si, es de papi, llevo su número.
- Que guay ¿no?
- Si, ¿y el titi?
- Está en casa, hoy no ha venido.

El titi es Igor, no se de donde sacará esos nombres. Yayito vale, que viene de yayo pero, ¿titi?
Cuando Marco ha salido a entrenar lo primero que ha hecho ha sido mirar hacia arriba para vernos y saludarnos, cosa que ha hecho que su hija se vuelva loca.

- Adara, tranquilizate por Dios.
- Es que papi me ha visto desde allí abajo. ¿Me bajas con él?
- Ahora no se puede, hija - digo colocándola un mechón de pelo detrás de la oreja - Luego cuando se termine el partido bajas. Cuando queden 5 minutos me avisas y vamos bajando.

- ¡Goool! - escucho que dice Adara haciendo que levante la vista del móvil y que mirase al campo - ¡Mami! ¡Papi ha metido gol!
- Hija, están entrenando todavía, ese gol no vale - digo al ver que todavía están entranando, están tirando a portería y ella se piensa que ya ha empezado el partido.
- Jo, pues luego mete otro gol ¿vale mami?
- Vale hija, a ver si mete hoy que seguro que te lo dedica.

Lo que está niña habla no es normal, los niños de su edad no suelen hablar mucho todavía, tienen poco vocabulario, pero lo de mi hija no es normal.
Marco dice que a ver si va a ser súper dotada, por supuesto que no lo es, nos lo hubiesen dicho ya, ¿no?

- ¡Papi!, ¡papi!, ¡papi!
- ¡Mi niña!
- Que bien has jugado papi.
- ¿Si?
- Si, tu siempre juegas bien - dice haciendo que Marco la coja en brazos para darle un montón de besos.
- Pero no he metido gol.
- No pasa nada papi, ya me dedicarás un gol, ya me has dedicado muchos.
- Pues otro más ¿no? Hola mi amor - dice cuando llego a su altura.
- Hola - digo dándole un beso.
- ¿Y mi padre?
- Se ha quedado arriba terminando de ver el partido. Nosotras hemos salido antes para cuando salieses verte.
- Ay madre que bonitas sois - dice dándonos un abrazo a las 2.