-----18 With a Children-----Sebastian Stan y Tn.

Capitulo 7

Justo estaba cubriéndome con las sabanas cuando mi madre entro a mi habitación.

– ¿Ya vas a dormir?– Preguntó cerrando la puerta detrás de ella y sentándose el borde de mi cama.

– Pensaba estudiar las partituras antes de dormir ¿Por que?–

– Quería hablarte de Chris – Respondió a lo que sonreí.– ¿Como es que antes no me habías hablado de el? – Preguntó posando su mano en mi muslo.

– Porque hasta hace poco es que comenzamos a hablar y a ser amigos– Respondí, a lo que mi madre asintió – , no miento que lo conocía de antes. – Agregué soltando una risita al recordarlo todo flacucho.

– ¿Donde lo conociste? – Preguntó mi madre, como siempre, curiosa.

– En primaria, el era el chico al que siempre defendía — Respondí mientras mi madre miraba al techo intentando recordarlo — El de los dientes de ardilla – Agregué a lo que mi mamá asintió inmediatamente y comenzó a reír.

– ¡¿En serio es el!? – Preguntó tan sorprendida como yo cuando Chris me lo dijo – Méritos al dentista que logro arreglarlo – Agregó abriendo los ojos como platos y levantando ambas cejas para luego reír. – ¿Y que los llevo a volver a revivir la amistad? – Preguntó.

– Cosas de la vida, el me dijo que siempre quiso ser mi amigo, pero que yo me aislaba demasiado desde que había comenzado a salir con Mckenzie.– Expliqué.

– Ahora que la nombras ¿Por que Mckenzie no ha venido estos días? – Suspire y mire por la ventana antes de bajar la mirada.– ¿Paso algo entre ustedes?– Sin poder evitarlo Asentí mientras comenzaba a sollozar.– Ohh calabacín ven a aquí.– Mi madre estiro sus brazos y me abrazó.

– Promete no juzgarme.– Dije alejándome de ella mientras secaba mis lágrimas.– ¿Recuerdas al tal Sebastian?– Pregunte a lo que mi madre asintió.– Pues hace unos meses Sebastian me contó un secreto muy grande.– Mi madre alzó ambas cejas.

– ¿Puedo saber el secreto?– Preguntó mi madre.

– Si, supongo– Respondí.– Yo no iba a su casa a ayudarlo con sus tareas— La expresión en el rostro de mi madre cambio totalmente apenas dije eso, obviamente ya sabía que pasaba por su mente. — No es lo que crees— Afirme – Sebastian tiene un hijo de 3 años— Mi madre parpadeo unas cuantas veces antes de mirarme sorprendida echando la cabeza hacia atrás.

– ¿Y cuantos años tiene Sebastian exactamente? – Preguntó.

– 18– Respondí.– Yo ayudaba a Sebastian con Lucas después de clases, mientras el iba a las prácticas, cuando su niñera no podía yo lo ayudaba.— Explique a lo que mi madre asintió.

– ¿Y qué pasó? — Preguntó – ¡No me digas que al niño le pasó algo estando a tu cargo! — Me interrumpió a lo que negué devolviéndole el alivio a su alma.

– Todo lo contrario, el pequeño se encariño rápido conmigo y– Hice una pausa y sonreí de medio lado– el conmigo.– Mi madre sonrió.

– ¿Donde viene el problema entonces? – Preguntó a lo que suspire, para comenzar a contarle desde los cumplidos de Sebastian hasta terminar en la mañana del lunes cuando escuche a las chicas contando lo que habían visto en la habitación de los padres de Chris.

– A todas estas lo que más me impresiona es que no me contaste esto antes.– Confesó mi madre fingiendo estar enojada.– Si sabes que puedes confiar en mi ¿Por que no me dijiste antes? – Preguntó a lo que me encogí de hombros.

– Tenía miedo que me juzgaras y comenzaras a juzgar a Sebastian por haber tenido un bebé a los 15.– Explique.

– Si supieras que con respecto a eso, y por lo que me has contado respecto al pequeño, me doy cuenta que Sebastian no parece ser un mal padre– Confesó a lo que sonreí porque era cierto.– Pero en cuanto a el y a Mckenzie aún no me lo creo.– Agregó.