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Le dije a mi padre que había decidido irme directamente a la biblioteca al salir del establecimiento, necesitaba estar rodeada de libros un rato. Planeaba estar sola, pero en cuanto Hyunjin reconoció mi mochila, corrió hacia mí y continuamos el trayecto juntos, hablando de cómo nos había ido en el día.

—Observé tu dibujo. —dijo mientras miraba la calle para poder cruzar—. Me gustó. —tenía la costumbre de caminar con las manos en los bolsillos del pantalón, tranquilo, con aire despreocupado. Veía que muchas chicas en la escuela lo calificaban como uno de los chicos más lindos, todas en los pasillos lo observaban como si fuese el protagonista de algún drama. Él, Jungkook y otros chicos estaban en una gran lista titulada como "los chicos mas encantadores de la escuela". A los demás no los conocía, pero era bueno saber que ellos dos no eran presumidos, sino que actuaban tímidos ante aquellos halagos—. Te quedó muy lindo. Tienes... bastante talento. —sonrió.

—Gracias. —dije, observando el suelo.

Pasé con él muchas horas. Me leyó un libro que tenía en consideración y a ambos nos atrapó. Teníamos gustos muy parecidos en cuanto a la lectura. Era un tiempo bien aprovechado el que pasaba con él, juntos devorabamos decenas de novelas todas las semanas.

—¿Cómo te estas sintiendo en la escuela, Kath? —me preguntaba mientras observaba los lomos de los libros.

—Bien. —mentí.

—Te pregunto porque te vi salir llorando del salón ayer y me preocupé. —volteó a su costado, mirándome.

—No hace falta que te preoupes. —dije. Tomé un pequeño libro y leí su sinopsis.

—Bien, si no quieres que me interponga, no lo haré. —lo observé de reojo y continuó mirando los estantes—. Pero quiero que sepas que puedes contarme lo que sea. Además, hay una consejera escolar, puedes hablar con ella cuando quieras. Está a un lado de la oficina del director.

—Gracias por el dato. —ambos llevamos los libros que elegimos a una mesa y comenzamos a leer.

Llegué tarde a casa, no había caído en cuenta de que se avecinaba una gran tormenta, ni la hora en la que salimos de allí. Ojalá no hubiese pasado tan rápido el tiempo. Quería mantenerme de buen humor un poco mas de rato, pues apenas pisé el suelo gris claro de la estancia en casa, comenzaron a decaerse mis ánimos.

Ojalá tuviera el poder de quitarme los oídos cuando se me plazca. Mi padre me sermoneaba por tercera vez por el mismo tema, levantando la voz a cada momento. Mamá también estaba enfadada y llegaba a acotar cuando mi padre hacía silencio. Me sentía tonta, pues sabía perfectamente que lo hacían para protegerme, pero nunca se daban cuenta de lo que yo necesitaba o quería.

—Mantienes apagado tu teléfono, llegas a la hora que te apetece, vaya a saber uno dónde te metes, no quieres que te recoja... ¡cómo esperas que no nos preocupemos! ¿Es que a caso no te importa? ¿Y si te ocurre algo? —decía mi padre dando vueltas frente a mí—. Ya no me interesa si te vas luego de clases a donde tú dices que vas, te llevaré a la escuela y te recogeré yo mismo. Fin de la discusión.

Me encerré en mi cuarto acabada la pelea. Estaba cansada de que nunca me prestasen atención, les importe una mierda lo que se me cruza por la cabeza y nunca escuchen lo que digo. Muchas personas ven el llanto como desahogue, yo no. Me sentía débil y pequeña, aún necesitada de un "todo estará bien, ya verás", vulnerable, estúpida e inmadura. Lo peor es que cuando comienzo a llorar me cuesta dejar de hacerlo. Mi hermana me ha visto derramar lágrimas casi toda su vida y siempre ha intentado levantarme el ánimo de cualquier manera, colocando música, siendo comprensible, leyéndome, etcétera. Siempre dejaba que hiciera algo para mejorar mi ánimo, pero esa noche no dejé que entrara a mi cuarto.

Podía ver por la ventana cómo comenzaba a llover, el viento hacía que las ramas del árbol del patio golpearan en mi vidrio y las gotas entraran a mi cuarto. Cuando subí no encendí la luz, por lo que solo notaba lo poco que llegaban a alumbrar los relámpagos y rayos. Me había colocado al borde de mi cama para observar hacia fuera de mi ventana, mis gafas estaban a un costado y mi teléfono al otro. Decidí poner Shinee, para cambiarme el humor un poco. No salí a cenar, tampoco le di a mi familia las buenas noches, solo me quede ahí dentro.

Cuando estaba a punto de quedarme dormida recibí dos mensajes, uno de Jungkook, lo cual me extrañó, y uno de mi prima. Abrí primero la casilla de él.

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Jungkook
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Kath, disculpa que te hable
a esta hora, pero nuestro
encuentro de mañana sigue
en pie, ¿verdad?
23:00

Claro, ¿dónde nos veremos,
en la biblioteca?
23:01

Desearía, pero debo hacer
algunas cosas en casa, por
lo que debo quedarme.
¿Te molestaría venir?
23:01

No quiero importunar.
Además dijiste que debían
hacer cosas allí, molestaré.
23:01

Verás, es día de limpieza,
por eso debo quedarme en
casa, pero luego de almorzar
puedo desocuparme unas horas.
23:01
No molestaras, de hecho creo
que mis hyungs estarán felices
de verte otra vez.
23:02

Esta bien, dime a qué hora
crees que es conveniente que vaya.
23:02

...

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Había olvidado que debíamos estudiar matemáticas, tantos problemas en casa me tienen distraída.

Me envió la direccion y el horario y cambié de casilla. Los mensajes de ella no decían nada nuevo.

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Ronie
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Te extraño.
23:00

Yo igual, no tienes idea.
23:03

Es increíble que te hayas
ido sin avisar... ¿Es que ya
no piensas en mí?
23:03

Creeme que no he tenido
tiempo para nada, todo
fue muy rápido, pero no
te preocupes, ya habrá
algún momento para volver
a vernos.
23:03

Sí...
23:04

No tienes idea de la cantidad
de cosas que tengo que contarte,
todo lo que ha pasado...
23:04

Yo igual, me han ocurrido
muchas cosas también.
¿No crees poder darme un
pequeño adelanto?
23:04

Mmm...
23:04
Pues, mi salón apesta, mis
clases igual y sólo tengo dos amigos.
23:05

Uu~...
23:05
Ya, no digas mas. Te dejo
dormir, seguro por allá es
tarde. Descansa.
23:05

Gracias.
23:05

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Dejé el teléfono en mi mesa de noche, enchufado, y me quedé completamente dormida, pensando en cómo decirle a mis padres que debía irme a estudiar a la casa de un compañero, habiéndome castigado por estar fuera de mi hogar. Quizas sea buena idea hablar estos temas con algún especialista.

⩩ ♡̶ !𝐘𝐨𝐮. ─ 𝐽𝑢𝑛𝑔𝑘𝑜𝑜𝑘 ✔︎ ©𝐌𝐢𝐤𝐡𝐚𝐢𝐥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora