*Narra ___*
Desperte gracias a que mi pequeño alcon blanco que se habia posado aun lado de mi almohada, se llamaba yin, me sente y me apoye en la cabezera de mi cama.
.-Hola amigo, ¿donde te habias metido eh?-.dije acariciando su pequeño lomo.-tuviste una mala noche, eso te pasa por volver tarde-.el me miro y salio volando por la ventana, me sente en la orilla de la cama y fui hacia el balcon, y mire la preciosa vista que tengo del reino, veia como niños jugaban, como los trabajadores hacian su trabajo, como algunos padres llevaban de la mano a sus hijos, y vi como una manada de lobas se hacercaba al reino, mi madre venia ahi, era la mas blanca, hermosa y grande de la manada, pero esta vez no fue asi...
Estaba cubierta de machas de sangre, cojeaba de la pata delantera izquierda, podia sentir como su respiracion estaba agitada, baje rapidamente y fui a avisarle a mi padre, lo busque por todos lados y no logre encontrarlos, no tube otra opcion en ir yo a ayudar a mi madre, me transforme y corri lo mas rapido de pude, toda la manada venia herida, pero la mas herida, era mi madre. La buscaba con la mirada pero no la encontraba, hasta que la vi atras de Leila, es amiga de mi madre.
.-¡LEILA!-. Grite y me miro.
.-¡____, AYUDAME!-.corri hacia donde estaban ellas y mi madre volvio a ser humana, con la ayuda de Leila, hizo que mi madre se subiera a mi lomo y yo me la llevara al castillo.
No sabia si correr o caminar, ya que ella se miraba tan debil que no se podria sostener del todo si corro, pero si voy caminando tardaria bastante en llegar al castillo y ya estaria muy grave, asi que se me ocurrio trotar.
Al llegar al castillo, lleve a mi madre hasta su habitacion, mi padre aun no llegaba, la deje en la cama, me trasforme en humana y la tape con las sabanas, necesitaba a mi padre ya que el podia hacer que las heridas de mi madre sanaran, yo aun no podia, mis poderes todavia no se desarrollaban, todavia era un "minarai" que es "aprendiz" en japones, fui a por el libro de hechizos y busque la pagina en donde decia como curar, la encontre y puse mis manos en las heridas, repetia las palabras que estaban escritas, era inutil, trataba y trataba pero aun así, era inutil. Suspire y volví a decir las palabras.
"Anata ga seijo ni modotte subete o shutoku shi,
Iyasare,
Kizu o nani ga okotta no ka shusei shi,
Subete hozon sa re,
Kako ni modotte".
Al terminar de decir esas palabras, salieron pequeños destellos, las heridas brillaban, al terminar de brillar, las heridas desaparecieron.
Me sorprendí, nunca pensé que llegaría a este nivel de experiencia a temprana edad, solo tenia 9 años, mis poderes aun no maduraban pero creo que lo que necesitaba era creer en mi misma.
.-Vamos mama...tienes que despertar-.le dije a mi madre, aun no abría los ojos.-¿mama?-.su respiración iba disminuyendo de ritmo.-¡MAMA!-.grite, ella aun no reaccionaba, oí como la puerta de entrada se cerraba, baje rápidamente y mire a mi padre.-¡Padre!, mi madre esta herida-.mi padre al escuchar eso, abrió sus ojos de par en par, corrió hacia la habitación donde estaba mi madre.-la cure, pero creo que no fue suficiente-.mi padre me miro sorprendido.
.-¿t-tu la curaste?-.pregunto nervioso.
.-si...desaparecieron, yo pensé que había mejorado y si, pero no despierta, ¿acaso hice algo mal?-. Pregunte con un tono de preocupación.
.-No...sal de la habitación, necesito...-.suspiro.-necesito hacer algo-.asentí y salí, fue a mi habitación y salí al balcón.
Me recargue en el barandal y mire hacia el cielo, miraba como las estrellas tintineaban algunas, otras solo brillaban. La luna estaba a punto de llenarse, casi era la hora de ir a la "montaña del aullo", ahí, todos los lobos íbamos a la punta de la montaña y aullábamos, era una tradición aullar a las almas pasadas.
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Elementos diferentes, sentimientos iguales (Willyrex y tu)
FantasyEl hielo y el fuego nunca estaran juntos, a excepcion de dos almas de diferentes elementos que destinaron a estar juntas...