Mentiré solo una vez más (BTS fanfic) /completa

Me pones nervioso

Seokjin observa a Taehyung, que sentado al otro lado de la mesa, mueve sus piernas con nerviosismo. Sabe a la perfección lo que vio. No tiene ninguna duda de que Taehyung no pertenece a este lado del país, que está ocultando su auténtica identidad, pero lo que no sabe es por qué. Tae se pasa la mano por la barbilla, absorto en sus propias preocupaciones, con los ojos bien abiertos, como si temiera ser atacado en cualquier momento. No puede transmitirle sus preocupaciones a Jimin, que ríe a carcajadas mientras juega con el resto a encestar en un vaso con una moneda. Es un juego estúpido, pero Tae sabe que es muy popular entre los chicos de la Vaporera, sobre todo como ceremonia de bienvenida a alguien nuevo.
--No, no, de eso nada --ríe Hoseok, cubriéndose la cara con una mano mientras con la otra señala un vaso repleto de un licor dulzón--, tienes que beberlo antes de que te llegue el turno de lanzar de nuevo.
--Aaaaah, maldición --blasfema Jimin sin dejar de reír--, soy realmente malo en este juego. ¿Es que queréis emborracharme?
--Las normas son las normas. El que acierta, elige quien bebe --dice Jungkook.
--¡¡Pero tú siempre aciertas!!
--Solo tienes que decirme dónde te he visto antes y dejaré de elegirte a ti como perdedor. Además, emborrachar a Hobi es mucho más divertido, ¿verdad, Tae?
Taehyung sacude la cabeza al verse mencionado e interviene como puede.
--Es sólo que Jimin tiene unas facciones muy comunes --ya ni siquiera titubea al mentir. Le preocupa bastante más la forma en la que Seokjin parpadea una y otra vez intercalando descaradas miradas entre Jimin y él.
Jimin se bebe el vaso de un trago y coge la moneda dispuesto a vengarse de Jungkook. Pero falla, y Hoseok y él estallan en risas una vez más.
Entonces, Seokjin se levanta y camina hacia donde está Taehyung sin ningún tipo de titubeo. Le da una palmada en los hombros, instándolo a que se mueva un poco dejándole un hueco en el sofá aterciopelado, justo a su lado, y se sienta sin ni siquiera fingir que lo que pretende es empezar una conversación con él.
Lo mira fijamente sin decir nada, repasando cada centímetro de su rostro, su afilada mandíbula, esas comisuras de los labios inclinadas ligeramente hacia abajo y sus ojos de Fénix, con restos de sombra color melocotón. Cuando Taehyung se siente observado, le devuelve la mirada y con su inherente descaro, se pellizca los labios y juguetea con los dedos hasta que consigue que Seokjin se ruborice y sonría, cortando el contacto visual.
--De acuerdo, Kim Taehyung, ¿cuál es tu excusa?
--No sé de qué me estás hablando.
--Oh, venga ya, no te hagas el despistado. Sabes muy bien de lo que hablo.
--¿Te refieres a mi repentina marcha de ayer noche? --Jin asiente, curioso--. Recordé que tenía cosas que hacer en la mañana y que debía irme cuanto antes.
--¿Sin despedirte de tus amigos? --hace una pausa esperando por la reacción del otro--. A mí me dio la sensación de que estabas huyendo.
Taehyung traga saliva y arruga los labios, pensando en cómo salir de la situación.
--Es que me pones nervioso, ¿es eso lo que querías oír? --sugiere, tratando de desviar la atención del otro; y por una vez no está mintiendo.
Taehyung sabe que su giro ha funcionado en el momento en el que las mejillas de Seokjin se pintan de arrebol, ríe por su atrevimiento y se tapa la cara con el cuello de la camisa.
--¿Hoy no trabajas? --pregunta Taehyung dispuesto a continuar con el coqueteo todo lo que haga falta hasta que el otro deje de hacer preguntas incómodas.
--Es mi día de fiesta.
--Entonces podemos pasar toda la noche juntos...
--Considerando que no vas a volver a salir huyendo, ¿verdad?
Alguien golpea el hombro de Taehyung que tiene los ojos clavados en Jin, y le anima a lanzar la moneda. Pero Taehyung no juega su turno, sino que alcanza la primera copa que encuentra a su alcance y la bebe de un tirón sin desprender la mirada de su interlocutor.
Mentir va a ser más difícil esta vez