If you say so, Harry. {Stylinson OS}

If you say so, Harry.

(Leer con Ifyousay so, Lea Michele)

Llegué a la casa que tenía en Doncaster, pasaría unos días ahí con mi familia, mejor dicho, el último.

Antes de encerrarme en mi habitación, me aseguré que sea el día en el que mamá se llevaba a las niñas a comprar su ropa.

Caminé observando cada rincón del lugar donde alguna vez había estado con Harry compartiendo besos frente a la familia, sin temor al rechazo.

 Al fin estaba listo para darme por vencido, luego de perder al gran amor de mi vida, por ser un completo idiota.

El temor me ganó, el temor se llevó mi felicidad, la de todos, y la que más me importaba; la de Harry.

Las palabras de la gente lograron quitarme al amor de mi vida, y eso ya no se puede reparar porque el ya no es mío, Harry ya le pertenece a otro hombre.

Otro hombre que lo ayudo a compartir públicamente su homosexualidad, y su compromiso fren te a todos.

Miré la habitación que tantas veces había compartido con Harry, cada gemido, cada beso, cada sonrisa se la llevaba esta habitación.

Saqué la caja con las notas que tenía para todos, para mi familia y  para los chicos. Pero no eran todas cartas, había un vídeo de despedida para alguien muy especial.

Aquellas cartas habían sido escritas, re-escritas, borradas, manchadas por lágrimas, hace tiempo. 

Abrí el armario que tenía antes de entrar a TXF, y saqué la navaja que mi padre(enrealidad, padrastro) me había obsequeado, pero no para esto, el creía que con esta navaja me afeitaría aunque sea una vez, pero no.

Lo extrañaría, el fue el único padre que tuve, y que se hizó cargo de mi sin siquiera ser su hijo, extrañaría sus consejos, y la manera en la que transmitía felicidad a la familia.

Finalmente me corté por última vez en mi vida, y cerré los ojos con fuerza, sonreí al recordar todos los lindos momentos de la banda y lo egoísta que sería por esta decisión.

Caminé con mi muñeca bañada en sangre hasta mi cama, y me arrodillé ante la ventana estaba arriba de esta, observando cada nube del cielo, dejando caer mil lágrimas, que se secarían enseguida.

Miré a mi habitación y me reflejé a mi mismo cantando con mi familia en la esquina de la habitación, el día de mi cumpleaños número 16.

Sonreí apenado y observé el cuadro que tenía una foto mía, pero no estaba solo, me estaba besando con Harry.

Lo agarré al mismo tiempo que agarré las pastillas que escondí por tantos años bajo mi cama.

Las coloqué en mi boca y ayudé a digerir con un vaso de agua, finalmente sonreí abrazando la foto. 

Cerré los ojos por última vez, y susurré ''Te amo, Hazza'' antes de caer en un profundo sueño que me llevaría a quién sabe donde.

—Louis, la cena esta lista.—Escuché, pero no podía moverme.—Louis...—Tampoco podía hablar.