Pokemon V: La Batalla Contra la Elite

Capítulo XXXI

     Tuvimos que caminar durante horas para poder encontrar un refugio. Recién comienza a atardecer, así que todavía corremos peligro. Y al anochecer… ¿A quién quiero engañar? Correremos peligro a cada segundo, la oscuridad podría beneficiarlos a ellos y no a nosotros. Sólo es cuestión de tiempo y conociendo a la Elite… No habrá segundas oportunidades. No me sorprendería que nos atacaran por sorpresa en cualquier momento, que nos asesinen aquí para que no podamos defendernos.

     Perla está desconsolada. No pudimos hacer que dejara de gritar hasta que ella misma se quedó sin energías. Terminó por hacerse un ovillo, alejada de nosotros, y se dedicó a llorar en silencio. Es difícil ver lo mal que lo está pasando y saber que no podemos hacer nada por ella.

     —Sheryl.

     Otro destrozado más.

     Harrison también ha estado mal durante las últimas horas. En sus ojos hay un atisbo de lágrimas aunque no ha llorado de forma tan desconsolada como hizo Perla. Su hermana, Jamie, está herida de gravedad gracias al ataque de Flareon.

     — ¿Qué quieres?

     Toma asiento a un lado mío y suelta un pesado suspiro.

     —Intenté animar a Perla, pero no he podido hacer que deje de llorar —me dice—. No podemos continuar con esto si ella no está dispuesta a continuar.

     —Su madre ha muerto, debes comprenderla.

     — ¿Tienes una idea de lo mal que puede estar sintiéndose?

     —No… ¿Cómo puedo saberlo si jamás lo he sentido?

     Suelta otro suspiro.

     Esto nos dejará muy mal a todos.

     —Perla tenía razón, mi padre está con la Elite… ¿Crees que exista la posibilidad de que sea un error?

     —Yo lo vi, Harrison.

     — ¿Qué?

     —Cuando estábamos en el hotel, ese hombre se comunicó con Perla cuando ella salió de la habitación. Le dijo que debía salir, entregarse, o los asesinaría a todos dentro del hotel.

     — ¿Tú lo sabías? —Asiento y él añade levantando un poco la voz—: ¡Pudiste habérmelo dicho!

     — ¿De qué habría servido, Harrison? Te habrías comportado tal y como estás haciendo justo ahora, no habría salido nada bueno de eso.

     —Y preferiste guardar el secreto…

     —El plan era que ustedes se llevaran a Perla mientras yo aprovechaba el momento para deshacerme de tu padre.

     — ¿Qué?

     —Si no lo hacía, él habría terminado por convencer a Perla de entregarse. Sabemos que ella lo hubiera hecho al cabo de dos o tres amenazas. Me parece que ella considera que las vidas de todos nosotros son mucho más valiosas que la suya propia.

     —No tenía idea…

     —Intenté atacar a tu padre cuando lo vi.

     — ¿Lo hiciste?

     —No pude. Escuché una conversación que él tuvo con otra sabandija de la Elite, decían que los habían atrapado a ustedes y preferí seguirlos para llegar aquí. De no haberlo hecho, jamás los habría encontrado.