Capítulo I

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Haley

Era un sábado en la mañana, suena la alarma, abro los ojos un poco ya que la luz del sol entrando por la ventana pegando en mi rostro, apago la alarma y me levanto de la cama lentamente, me estiro un poco mientras me dirijo al baño para lavarme los dientes y el rostro.

Al finalizar voy a la cocina y abro el refrigerador, agarro un plato con dos rebanadas de pizza que quedó del día anterior. Las coloco en el microondas, saco la gaseosa del refrigerador y cierro la puerta de este. Voy a la sala y enciendo la tele, me devuelvo a la cocina y saco la pizza del microondas, agarro la gaseosa.

Me siento en el sofá y veo la tele mientras como una de las rebanadas y bebo gaseosa, están pasando una película. Esas películas que te dejan pensando sobre la vida. me pregunto cómo fue que llegue a estar en esta situación.

Cierto, fue ese "accidente" que causo la muerte de mis padres. Esto pasó hace dos semanas cuando estaba empezando la universidad.

Era el primer día de universidad, estaba en el salón con mi amiga de la infancia Charlotte, cuando de repente entra una señora bien vestida la cual me llamó, estaba algo preocupada, se le notaba en su voz, me levanto de la silla y salgo del salón con ella.

-Haley, no sé cómo decirte esto...-da un leve suspiro mirándome a los ojos- Tus padres fallecieron en un accidente.

Sin decir nada las lágrimas saldrían de mis ojos recorriendo mis mejillas cayendo al suelo. Luego de unos minutos entro al salón, me acerco a la silla donde estaba y agarro mi mochila. Veo a Charlotte con una sonrisa en mi rostro pensando en que no la volvería a ver.

- ¿A dónde vas?, ¿Qué pasó? - me mira preocupada-

Sin responderle me voy del salón, camino por los pasillos pensando en lo sucedido, en ¿Por qué ahora?, ¿Por qué se fueron?

Esas preguntas dominaban mi mente, no podía asimilar todo esto que estaba sucediendo, me había quedado sin padres, me había quedado solo. Salí de la universidad y me dirigí al apartamento donde vivía. Al llegar abro la puerta con una copia de las llaves que tenía. Entro y cierro lentamente la puerta.

Apoyado en ella miro mi alrededor, todo estaba en silencio y solitario, era algo triste. Llegaron recuerdos a mi mente cuando estaba en la escuela cuando llegaba y estaba mi mamá sentada en el sofá, haciendo aseo o cocinando, a mi Papá viendo televisión, en el computador o con mi mamá en el sofá.

Me di cuenta de cómo la vida te puede dar un giro de 180 grados, me dirigí hacia el sofá y me senté en el con la cabeza hacia arriba, sin darme cuenta las lágrimas estaban saliendo de nuevo, era algo que no podía evitar. Después de unos minutos doy un suspiro y escucho a alguien tocar la puerta, me levanto del sofá, me dirijo a la puerta y la abro un poco,  observo la persona la cual era Charlotte.

Charlotte

Estaba muy feliz ya que era nuestro primer día en la universidad y si, digo nosotros porque estoy con mi mejor amigo, mi amigo de infancia Haley, nos encontrábamos en el salón esperando al profesor, mientras tanto hablábamos de todo lo que íbamos hacer en la universidad y nuestras expectativas.

-Oye, ¿podemos visitar la cafetería apenas lleguemos? - le digo emocionada mientras caminamos a la universidad.

-Jajaja, como siempre comelona Charlotte- sonríe mientras me mira a los ojos.

Me encanta su sonrisa, es tan perfecta. Llegamos a la universidad y es muy grande, es mucha la emoción, que sin pensarlo dos veces lo agarro de la mano y corro adentro. Al entrar veo mi alrededor asombrada por lo grande que era, voy por los pasillos observando mis alrededores, llegamos a las canchas, había una de futbol, otra de tenis y una de futbol americano.

Están en muy buen estado, seguimos caminando y veo la cafetería adelante, camino más rápido junto a él sin soltar su mano, llegamos y enseguida veo la comida que había, los mecatos, gaseosas, jugos, chocolates, entre otras cosas.

Todo se ve muy delicioso, de repente siento su mano en mi hombro, giro mi cabeza 180 grados y lo veo con esa sonrisa, hago una cara de puchero.

-siempre tienes que hacer esa cara de puchero, te ves muy linda y siempre caigo, habrá un momento en el que no me hará efecto- Dice mientras saca su cartera y me compra una barra de chocolate.

-muchísimas gracias Charley- Así nos decimos desde hace años, ese es nuestro apodo, el cual es mi nombre combinado con el de él.

Fuimos a nuestro salón y nos sentamos en la parte de atrás del lado derecho. Comienzan las clases las cuales son muy entretenidas, claro es el principio y no sé cómo serán las clases después, pero se que serán divertidas e inolvidables porque estoy con Haley.

Luego de unas horas terminan las dos primeras horas y llegó, la hora del receso, nos quedamos en el salón hablando cuando de repente entra una señora preguntando por él. Confundida veo como se levanta y se va con la señora.

Luego de unos minutos veo que entra con los ojos aguados y con una sonrisa, pero esa sonrisa no era la misma de siempre, preocupada me levanto de la silla y lo miro.

- ¿a dónde vas?,¿Qué pasó? –

Sin decir nada veo cómo se va del salón, me levanto y me lo sigo sin decir nada, mientras camino veo a la señora de antes y decido acercarme y preguntarle qué había pasado, porque Haley estaba actuando así.

-hola, quería preguntarle ¿Qué fue lo que le pasó a Haley? –

-Hola, sus padres murieron en un accidente, estaban en el carro y un camión se les atravesó, me acaban de informar del hospital donde estaban atendiéndolos-

-No puede ser...- No sabía que pensar ni decir.

Suspiro salgo de la universidad, pensando a donde habrá ido, no creo que haya ido al hospital porque no sabe dónde queda, así que el único lugar es el apartamento, camino hacia el apartamento.

Al llegar me quedo enfrente de la puerta y toco dos veces esperando a que abra, escucho los pasos y lo veo, nunca lo había visto en ese estado.

Bueno aquí se acaba el primer capítulo, espero que les haya gustado. Esta es una experiencia única, es mi primera historia, espero me tengan paciencia con algún error ortográfico, los iré corrigiendo y por último quiero decir que los capítulos los subiré cada sábado, este será una excepción ya que no me aguanté las ganas de publicar el primer capítulo.

Amor RealDonde viven las historias. Descúbrelo ahora