En manos de mi sádico Hitman - R27 Omegaverse

Capitulo 18 °^°

Luego de ese día fatídico para la mansión Vongola, Tsuna entrenó con los arcobalenos día y noche para volverse aún más fuerte y demostrarle al Hitman que era totalmente serio en lo de casarse con él, no solo era un capricho de niño pequeño. 

Poco a poco el tiempo fue pasando y el pequeño que era como una cría de bestia adorable pero peligrosa se volvió una verdadera bestia, de ese tipo de bestia que te deja embelesado con su belleza a pesar de saber que incluso su mirada podría llegar a matarte si de casualidad bajas la guardia.

Reborn notaba estos cambios, tal vez lo notaba demasiado como para mantener su cordura, el niño ya había dejado de ser un niño y el sentimiento de apego que tenía en un principio fue creciendo a lo largo del tiempo, sentía una posesividad que su personalidad retorcida sólo acrecentaba, el niño cada vez se hacía notar más, estaba cada vez más hermoso y él podía asegurarlo, más de una vez se encontraba a sí mismo observando con una fascinación inimaginable en el. A este paso ese niño sería su perdición, o tal vez ya lo era en secreto.

Se encontraba tan perdido en sus pensamientos que no noto al chico que saltó a abrazarlo, casi le da un infarto, un asesino como él nunca debería bajar su guardia, definitivamente algo le estaba sucediendo, ya no era el mismo, y lo que más le extrañaba era el que en verdad no le molestara la posible causa de su futura muerte.

-  ~ Hello my darling ~ - Un adolescente de cabellos castaños salto en un abrazo al Hitman que se encontraba tan perdido en sus pensamientos.

- ¿No te encontrabas entrenando a está hora?- Mencionó mientras movía sus brazos alrededor de la cintura de este devolviendo el abrazo del chico el cual le mostró una bella sonrisa con un pequeño sonrojo decorando su rostro.

- Si, pero no podía aguantar las ganas de verte- Menciono mientras que apretaba un poco más el abrazo y ocultaba su rostro sonrojado en el pecho del sicario.

El Hitman por otra parte no sabía como reaccionar, ese chico en verdad lo traía loco, ¿Acaso no sabía lo que podían causar esas palabras?, O tal vez lo estaba haciendo al propósito para provocarlo. Sin importar cuál fuera la razón el punto era que en este momento solo se lo quería llevar de una vez por todas y cumplir sus fantasías más retorcidas, pero obviamente no podía... debía alejarse.

Suavemente fue soltando esa marcada cintura del chico y lo empujó suavemente en un intento de alejarlo, cosa que al parecer el castaño noto ya que se agarró con más fuerza y comenzó a soltar ese dulce olor que lo traía loco, en verdad debía alejarse, sino no sabía de lo que era capaz.

-Por favor no, no me alejes- dijo el chico con una voz un tanto angustiada la cual rompía el corazón del sicario, podría ser lo más cruel y retorcido, pero jamás sería capaz de ver al chico así y no sentir nada... menos aún cuando cualquier cosa relacionada al castaño ponía a su mundo de cabeza.

-Tsu, no te voy a dejar... pero ahora necesito alejarme, quedarme cerca puede ser peligroso- Mencionó mientras intentaba alejarlo con una mano y taparse la nariz con la otra, si seguía cerca del chico y ese delicioso aroma su alpha solo se descontrolaba, y no sabía que podría pasar, no quisiera hacerle daño al chico.

-No me importa, Reborn te quiero... sabes que te quiero hace mucho tiempo, por favor deja de alejarme de tí, no lograrás nada, te aseguro que serás mío- El chico comenzó a liberar más de ese delicioso aroma, pero ahora tenía una sensación más picante como demostrando celos y territorialismo, era algo que no se esperaba en definitiva.

El hitman dirigió su mirada al chico notando así que los ojos del chico se habían vuelto naranjas y se notaba que su fuerza había aumentado no permitiéndole liberarse, al menos no por las buenas, en definitiva no planeaba soltarlo.

Mierda, empezaba a desesperarse, ya no sabía cuanto más podría controlar a su alpha interno, se iba a volver loco, necesitaba escapar, tenía que salir cuanto antes, no quería hacerle daño al chico, todavía no era el momento, se mente corría a mil por hora, no creía aguantar un minuto más, ya había empezado a sudar, y su visión se había comenzado a volver borrosa. En un pensamiento rápido tomó su arma y disparó al suelo, causando que el chico se sorprendiera y aflojara un poco su agarre, al menos lo suficiente para que él pudiera escapar de los brazos de este, con la agilidad y elegancia típica suya escapó del chico una vez más.

-Maldición se escapó de nuevo, pero no lograras correr por mucho, te lo dije antes y te lo repito... Vas a ser mío- Un enfadado Tsunayoshi se marchó de la sala en la que se encontraba, estaba cansado de que el Hitman se reprimiera pensando que era un niño, él no era ningún niño, Ya era un omega desarrollado el cual conocía a su alpha y quería que este lo marcara de una vez por todas, no iba a tolerar por mucho a esos omegas y mujeres que se comían con la mirada al sicario, claramente no lograban más que esto solo porqué sino este los desmembraba vivos... que hermosa visión, tal vez tanto tiempo con el sicario y Varia le había hecho mal a su cabeza, en fin, eso no importaba si por fin lograba descansar de todas esas preocupaciones que le causaba el Hitman del que se enamoró desde el momento en el que lo vio... ese que lo salvó del infierno en el que vivía, ese que le dio un futuro con personas que lo quieren.

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Bueno hasta ahí llega el capítulo por ahora, es muy corto por que se me perdió toda la información de los capítulos que tenía hechos inclusive los que ya están publicados.

Espero que les haya gustado y mil gracias por las lecturas, votos y comentarios.

Bye~   >w<

Nadii1827