2. Olor Amargo

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Mierda...— musito molesto mientras caminaba hacia donde se supondría que debía estar.

Estaba molesto, había visto algo que no quería, su pobre corazón había dejado de latir al ver esas estúpidas imagines que seguían repitiéndose una y otra vez.

¡Jinyoung por favor!— una voz chillo a las espaldas de este quien seguía caminando como si no escuchara aquella voz— no fue mi intención... Me provocó y.... Y— no tenía una explicación válida, lo sabía, pero seguía persiguiendo a su novio.

No te acerques— grito antes de comenzar a correr, no se sentía dolido, claro que no... No lloraría por una chica hueca que anteriormente había querido. Pero ya no la necesitaba, no era necesario llorar por una chica estúpida y aún así una pequeña lágrima recorrió su mejilla.

Todas esas imagines seguían en su cabeza, todavía escuchaba los gemidos de aquella omega la cual era su novia. Estaba harto, muchos le habían dicho que esa tipa sólo buscaba atención y dinero y al terminar su cometido se iba. Pero él... No había creído nada de esas cosas, la defendió como pudo y muchos de sus amigos respetaron su decisión pero muchos otros no... Y lo peor de todo es que por culpa de su ceguera no había podido acabar con el proyecto que debía entregar al día siguiente. Proyecto que había pospuesto para pasar tiempo con su caprichosa y odiosa novia. Ella se detuvo cansada sin poder seguirle el paso.

Voy a llegar tarde— vio la hora de su reloj y gruño al darse cuenta de la hora— Dios como no me di cuenta... Soy un idiota— se enterró las garras en su brazo sacándose sangre, pero así no gritaba, así nadie se daría cuenta de que estaba dolido por la partida de su novia. Así todos pensarían que era porque se había lastimado en el brazo. Por qué cuando un Alfa o un Omega tenían emociones demasiado fuertes, el olor era de acuerdo a sus emociones.

¿Park? ¿Qué sucedió?— su compañero de trabajo lo miro llegar lleno de sangre en su brazo. El Omega se preocupó por la salud de su compañero y casi llama a la ambulancia. Siempre que lo veía lastimado lo llamaba por su apellido, era como una costumbre que se formó en ellos desde hace bastante tiempo. Jinyoung en ese momento vio a su novia gimiendo por los otros chicos. Por un momento pensó que era el celo, pero supo que no fue así.

Era el único Omega que conocía aparte de su novia. Aparte de que era él único Omega que trabajaba en esa empresa. Por lo tanto aveces pensaba que todos los Omegas eran iguales. Se sintió asqueado, pensar que todos los Omegas eran así le daba náuseas. Sin embargo sabía o quería pensar que no todos eran así.

No es nada Im— miro al Omega, no quería gritarle que se alejara porque no era la culpa de este lo que había sucedido hace rato y debía saber que no todos los Omega eran así. Pero su mente seguía en aquella escena de su novia, y pensar que este Omega era así hacia hervir aún más su sangre. No podía imaginar a Im siendo follado por Alfas nada más porque si. No podía aceptarlo, ni siquiera aunque esté estuviera en celo.

¡No es nada! Te estas desangrado... No me interesa lo que digas— tiro de él y se lo llevó a su oficina donde saco un pequeño botiquín. Sin poder quejarse o insultarlo ya estaba sentado viendo como su compañero sonreía con tranquilidad— no va a doler tranquilo.. Seré cuidadoso— susurro al ver como su compañero se tensaba al sentir su toque.

Ajam, tu cuidadoso, no me hagas reír. Eres el Omega más desastroso que he conocido en toda mi vida— se río olvidando un momento de todas esas imágenes.

Ush y tu eres Mmm un Alfa que he conocido— no supo que decir, pero sonrió al recordar quien tenía el poder ahí y como si nada vertio el alcohol en la herida haciendo que Jinyoung gruñera del dolor— entonces yo gano— sonrió con malicia y Jinyoung no tuvo más remedio que aceptar su derrota.

NO QUIERO SER TUYODonde viven las historias. Descúbrelo ahora