Taehyung no esperaba enamorarse de un chico que vive más allá del bosque, en la ciudad del humo, un lugar prohibido para la gente de su mundo. Si bien, Taehyung sabe mentir y es capaz de encubrir sus travesuras una y otra vez.
Pero, ¿y si no fuera e...
--¡¡Taehyunie~!! ¡¡Taetae, abre!! --Jimin golpea insistentemente la puerta de la habitación de su amigo bien temprano en la mañana--. ¡Me dejaste tirado, traidor! --grita, en un tono agudo y risueño que denota que para nada está enfadado--. ¡Abre de una vez! Taehyung, sobresaltado por los golpes, cae de la cama haciéndose un lío con las sábanas. Se frota los ojos para quitarse las legañas, y se incorpora, arrastrando los pies hasta la puerta. --Jimin... ¿qué quieres? ¿No ves que es muy temprano? --dice con la voz ronca y embebida por el sueño--. Ni siquiera ha sonado el despertador... Pero Jimin no le está escuchando. Le aparta sin ningún tipo de cuidado para que le deje entrar y le llena la espalda de sonoras palmadas a modo de venganza. --¿Cómo te atreves a irte sin mí...? --Ah, sí, eso... Pero Jimin no tiene ocasión de escuchar la enésima excusa porque no tarda en darse cuenta de que la cama de su amigo está ocupada por otra persona, y Jimin sabe muy bien de quién se trata. --¿Seokjin? ¿En serio? Taehyung se apura a cerrar la puerta y de repente se siente más despierto que nunca. Había olvidado que el barman dormía en su cama y ahora ya es demasiado tarde. --Es una larga historia... Seokjin bosteza ampliamente y se despereza ante la atenta mirada de los otros dos. --¿Qué hora es? --pregunta, con la voz pastosa y el pelo revuelto--. Oh... ¿Jimin? Me gusta el color de tu pelo. --Gracias --responde con entusiasmo, y después se dirige a Taehyung--. Me cae bien. --Vale, uhm, a ver, Jimin, la cosa va así: no puedes decirle a nadie quién es Seokjin. -- Oh, vamos Taetae... ¿Es esta una relación encubierta? --¿Qué? Yo paso de esconder nada. No se me da bien --interviene Seokjin. -- No se trata de eso --se exaspera Taehyung--. Lo que no pueden saber es de donde proviene. --Por favor, Taehyung... Qué poca confianza tienes en mí. --Park Jimin, nos conocemos y sueles irte de la lengua con facilidad --le regaña--. Jimin le sonríe con picardía mientras le enseña la lengua--. Un momento... Tengo un mensaje de Joon hyung.
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Taehyung, haciendo caso a Namjoon, consulta las redes sociales de Yoongi, y se desliza por el feed desde la más reciente hasta la más antigua.
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Taehyung ya no quiere ver más... De repente, se le encoge el estómago y se siente mal. Piensa en los acontecimientos de los últimos días y en cómo su obsesión por escapar al otro lado ha conseguido que descuide todo lo que tiene en este. Yoongi es su mejor amigo, siempre ha estado ahí cuando lo ha necesitado y sin embargo, él se ha dedicado a mentirle una y otra vez. Y en estos momentos en los que es consciente de que algo le preocupa hasta el punto de no dejarle conciliar el sueño, Taehyung se siente como un idiota egoísta por no saber estar a su lado. Por un momento se le llenan los ojos de lágrimas pero las aparta antes incluso de que lleguen a brotar.
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