Luego de la visita al palacio, cuando yami volvió a la mansión fue abordada por miles de preguntas de sus tías y su hermana, las cuales la marearon y sin decir nada huyo de allí encerrándose en su habitación hasta la hora de la cena.
Miro atenta la luna mientras balanceaba sus pies. Estaba sentada al borde del techo, como siempre, ella salió al balcón de su cuarto y se subio al techo a mirar las estrellas.
-"la princesa es alguien agradable y divertida pero...todo el tiempo me miraba con desconfianza como si no quisiera encariñarse conmigo o algo así".
Suspiro y abrazo sus piernas sintiendo el viento peinar su largo cabello.
Una sonrisa surgió de sus labios y soltó una risa de emoción.
Por lo menos iba a poder comenzar a practicar sin esconderse.
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-NO!.
Hizo un puchero mirando a su tía zenim mientras el duque solo suspiro esperaba esa reacción de su esposa.
-madre, sé que yami es una niña pero en serio ella tiene potencial para el esgrima -kiel miro con súplica a su madre igual que yami.
Zenim trató de negarse a esa mirada de cachorro que le estaban dando esos dos.
Miro a su segunda sobrina y suspiro al ver la determinación en sus ojos.
-...bien, pero!, deberás seguir estudiando y comportarte como una dama a pesar de que sepas luchar -miro con las manos en sus caderas a la peli marrón que asintió con alegría.
-sí lo prometo!, gracias! -abrazo a su tía que nego con la cabeza y acarició su cabello con suavidad.
No podía hacer nada contra esa sonrisa brillante y despreocupada.
En la siguiente semana Jamileth entrenó junto a su primo siendo vistos por los duques. Que estaban impresionados por la destreza de su sobrina con la espada. Si bien le faltaba práctica tenía fuerza y agilidad para ello.
Zenit estaba contenta de que su hermana pudiera hacer lo que quería pero también estaba preocupada de que salga lastimada.
Aunque yami siempre salía lastimada por andar corriendo o trepando árboles o peleándose con otros niños del pueblo.-ten -miro curiosa la carta que le entrego su tío, el cual tenía una sonrisa de orgullo -es una carta de la princesa.
-de Atthy? -ladeo la cabeza curiosa y agarró la carta.
El duque estaba más que satisfecho con los resultados, si bien la princesa no la volvió a llamar para ir al palacio le envió una carta demostrando que estaba interesada en formar una amistad con su sobrina.
La menor leyó la carta con una sonrisa alegre y miro entusiasmada a su tío.
-la princesa me contó que tiene una mascota y que probó nuevos dulces, además me contó que dentro de poco podré ir a verla así podemos comer algunos dulces y y....
-calma Jamileth, respira -miro divertido la emoción de la menor por contarle todo sobre su nueva amiga.
-querido es obvio que este así, es su primer amiga -la duquesa entró a la oficina del duque mirando con ternura la emoción de su sobrina.
-le contaré a kiel y zenit! -con la carta en manos salió corriendo alegre de la oficina.
Al quedar solos los duques se miraron con alegría.
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Espada maldita.
أدب الهواةNinguno se esperó que el comodín del ex emperador venga con un pequeño acompañante. Jamileth Jasmine, hermana menor de Jeanette Margarita. Muchas sorpresas vendrán con la llegada de la pequeña Jamileth, entre ellas la aparición de un extraño poder q...