El diario de una inconstante.

Menos nudos.

Y así amanecí hoy, tal vez tenga muchas dudas en mi corazón pero he decidido avanzar, me detuve tantas veces tratando de buscarle respuesta, donde simplemente necesitaba que todo fluyera.

Haces años atrás, cuando tenia 13 años, mis amigos mencionaba muchas veces lo delgada que era (es la fecha y aun sigo siendo delgada) pero lo mas delgado que tenia era mi identidad, se sentía los huesos, dolía cuando alguien se acercaba a mirar y querer palpar mis desgaste. Hoy en una vieja publicación me fijaba que sentía que era una vergüenza para la sociedad, si me preguntan ¿Qué tan delgado y desgastado esta mi identidad?, sinceramente diría que está fortalecida, tal vez físicamente no cambié, pero por dentro me siento viva y fuerte, porque decidí tomar los nutrientes de Dios, dejé que él me plantara en una tierra fértil, me encontraba en un huerto tan marchito, tan descuidado, un huerco que no deseaba ayuda del maestro.

Así se repitió la historia, satanás sabía que su viejo juego de desgastar mi identidad tan feroz, no le iba a resultar así que decide conocerme, conocer esa parte débil y está en el amar a Dios, me golpeó con el pensamiento mas abrupto que jamás había tenido, el sentirme insuficiente e inestable en sus caminos. Fui tan consciente de todo sus movimientos, le hice caso a su llamado.

Pero hoy despierto y digo, poseo menos nudos.