Namjoon no puede creer lo que ven sus ojos. ¿Será posible que sus amigos sean tan irresponsables como para haber derribado los drones de seguridad de Jimin para acabar metiéndose por una alcantarilla?
--La madre que... --blasfema, Namjoon, bajando la escalerilla con cuidado de tropezarse.
El túnel está oscuro pero las voces de Yoongi, Jimin y Taehyung se escuchan sin dificultad.
--Ni siquiera son discretos...
Camina a cierta distancia de sus amigos porque necesita entender qué está pasando y cómo es posible que le hayan ocultado algo así. Porque por la confianza que demuestran al avanzar por el túnel, Namjoon no duda de que no es lo primera vez que lo hacen. Excepto Yoongi. Él camina de puntillas aferrado a la pared y Namjoon pondría la mano en el fuego al afirmar que está quejándose de lo oscuro que está todo.
Por muy inquieto que esté Namjoon, para nada espera que al poco esté observando como sus amigos cambien de atuendo, vistiéndose con ropas que conoce muy bien.
Recamados. Blondas. Lazos.
Namjoon aprieta los labios.
Gafas, máscaras y gorros de lana para ocultar el color de su cabello.
--Voy a acabar con todos ellos... --musita.
Pero no tiene tiempo que perder y la ropa sobrante no es suficiente para él, así que simplemente se desliza entre la penumbra inquieto por saber a donde le va a llevar todo esto.
Cuando el final del túnel aparece, el trío se detiene y Namjoon puede escuchar su conversación.
-- No, Yoonie hyung, no puedes salir ahí afuera caminando de ese modo --observa Taehyung.
--¿De qué modo?
Taehyung hace una mala imitación del swag del otro que consigue que Jimin ahogue una carcajada.
-- No sé caminar de otra manera -- se queja Yoongi.
Tae se le acerca, presiona su espalda obligándole a ponerla recta, le sacude los hombros y alza su barbilla.
--Así está mejor. Sacando pecho. Se supone que tienes que ser elegante.
--Me pides demasiado... --incide Yoongi, reparando en el gesto preocupado del otro--. Oye, si no te han pillado a ti en todos estos meses no me van a pillar a mí por un día.
Le da un golpecito cariñoso en la barbilla y le invita a pasar delante de él.Namjoon maldice cuando finalmente se encuentra al otro lado y comprueba por sí mismo que se encuentra en la Vaporera.
De nuevo.
Porque no es la primera vez que Namjoon pisa el otro lado. De hecho, lo conoce muy bien. No se apresura cuando los otros se pierden en la distancia. Simplemente extrae su móvil y se conecta a la red secundaria, la que usan los hackers, y marca el dispositivo de Taehyung con su ubicación de manera que ya no pueda ocultarle dónde está. No puede ir tras ellos de inmediato porque sabe que tal y como va vestido no debe pasearse por las calles. Se cubre la cabeza con la capucha y entierra las manos en la chaqueta enfilando un conocido camino.
--Maldita sea...
La nostalgia le sobreviene cuando atraviesa el parque en el que jugaba de pequeño y se le encoge un poco el corazón al escuchar el sonido del mar. Pero no ha venido a la Vaporera a recrearse en recuerdos de la infancia, así que acelera el paso y antes de darse cuenta, se planta frente a una austera casa de madera rodeada de altos cipreses.
Toma una piedra del suelo y la lanza, impactando en el cristal de la ventana del primer piso. Le hacen falta dos piedras más para que una muchacha de gran sonrisa y flequillo recto se asome extrañada.
--¿Quién anda ahí? --pregunta conteniendo la voz.
--¿Jiyeon? ¿Prima? Soy yo.
--¿Namjoonie? --dice, fijando la vista--. Vamos, sube.
Namjoon no se demora y escala por la marquesina hasta la habitación de su prima que se echa en sus brazos y lo abraza con fuerza hasta dejarlo sin aliento.
--Pero ¿qué haces aquí? ¿Te han expulsado de la Universidad?
-- No, no es eso...
--Mira qué pintas llevas --ríe.
Namjoon se retira la capucha y el lila de su cabello aún consigue que Jiyeon ría más fuerte.
--¿A qué has venido? ¿Te han dado permiso?
-- Jiyeon... Oye, ya te estoy involucrando demasiado... No me hagas preguntas.
Jiyeon aprieta los labios, confundida.
--¿Puedes dejarme algo de ropa de tu padre?
La chica asiente, confundida y cuando regresa de la habitación de sus padres, que duermen a pierna suelta, le entrega una camisa, una levita y unas botas de media caña.
--¿Es por la tía? ¿Está peor?
-- No... No, Jiyeon, no te preocupes. Mi madre está mejor de su afección respiratoria desde que estamos en Ilsam -- dice, mientras se ata los cordones--. Es sólo que tengo que cumplir con algunos requisitos si no quiero que nos echen de vuelta.
--La tía no aguantaría de nuevo en esta atmósfera de humo.
--Lo sé --afirma el chico apretando los puños.
Sabe por qué está persiguiendo a sus amigos. Sabe por qué tiene que averiguar qué está pasando. Y sabe también que no tiene elección.
--Tú no me has visto, Jiyeon. Nunca he estado aquí. ¿De acuerdo?
La chica asiente, nerviosa, y dándole un último abrazo, lo deja marchar.

ESTÁS LEYENDO
Mentiré solo una vez más (BTS fanfic) /completa
FanfictionTaehyung no esperaba enamorarse de un chico que vive más allá del bosque, en la ciudad del humo, un lugar prohibido para la gente de su mundo. Si bien, Taehyung sabe mentir y es capaz de encubrir sus travesuras una y otra vez. Pero, ¿y si no fuera e...