Epilogo

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Eran las 2 am y las fotos que le entregaron sobre la escena del crimen parecían tomadas de una película de terror, -¿cómo alguien puede cometer semejante monstruosidad?- se preguntó. Cuerpos mutilados muchos de ellos en estado de putrefacción avanzada, -¿mordidas?- Este tipo está realmente loco pensó el detective.

Miraba las fotos de camino hacia la sala de interrogación un caso como este no aparece a menudo,-¡va a ser una sensación!-, se emocionaba y se imaginaba saliendo en los diarios, dando reportajes de como fue el operativo ¿y porque no? terminar ¡como una eminencia en seguridad!

Entro a la sala de interrogatorios y camino directo hasta una mesa libre que había del otro lado del cuarto y sin mirar al acusado dijo, -te vas a comer unos cuantos años adentro pibe-, una técnica para asustar y empezar sintiendo que tenía ventaja, se dio vuelta para enfrentar al sujeto con su mirada amenazante y empezar a asustarlo con su discurso, -pero el sujeto tenía la mirada ida, no parecía estar en esta sala, es mas no parecía estar en este mundo!, estaba sentado abrazado a sus rodillas, las manos le temblaban mientras se movía hacia adelante y hacia atrás en un movimiento pendular murmurando algo que no podía escuchar, estaba sucio y con rastros de sangre en las manos y en el rostro, el olor a putrefacto era repugnante, lo miro detenidamente y se preguntó-¿Qué le pasa a este tipo?, la escena le provocó  escalofríos en la espalda

No parecía ser el monstruo capaz de hacer las cosas que vio en las fotos que le alcanzaron, por eso cambio de estrategia, ya no intentaría asustarlo y decidió tratarlo de manera cordial, por lo menos hasta que le dé una razón para dejar de hacerlo. No sería el primer acusado de asesinato en hacerse pasar por víctima.

Se paró y fue hasta la mesa donde estaba la cafetera para prepararse un café, sabía que sería largo el interrogatorio y necesitaría estar lo más despierto posible eran las 3 am.

Le ofreció un cortado pero el muchacho no escucho, Se acercó a él con el café en la mano y le toco el hombro para preguntarle si quería tomar uno, pero la reacción del joven cuando sintió la mano en su hombro fue estremecedora, salto de la silla y se fue rápido a un rincón de la habitación ahí se sentó cubriendo el cuerpo con sus piernas y aterrado gritaba.

-Nooooo noooo no por favor, basta por favor basta ya basta no quiero morir, no quiero morir, no quiero morir aquí ¡no así! Dios por favor ayúdame.

Los gritos alertaron a los policías que estaban fuera de la sala de interrogatorio y entraron para tratar de calmarlo pero cuando más se acercaban más se aterrorizaba. El sujeto grito hasta que se desmayó.

En un pequeño dialogo con el medico el detective le pregunto,

-¿Es posible que este fingiendo?

-No, su reacción fue verdadera este muchacho no tendría que estar aquí, su mente está en un estado de shock... muy alterada, ¿por qué cree que podría estar fingiendo? .

-Hay 10 personas muertas de las cuales 2  resultaron ser compañeros de trabajo suyos y ese joven es el único acusado, no sería la primera vez que un asesino alega demencia para no ser acusado.

-Mire detective no sé si el los mato, solo sé que el ataque de pánico que mostro fue real, de usted dependerá llegar a la verdad. Pero es muy posible que este ataque vuelva a surgir tiene recuerdos en su memoria reciente que lo afectaron mucho por lo que se ve, solo haga las preguntas correctas y obtendrá lo que está buscando.

El médico le dio la mano en forma de saludo y le deseo suerte para el interrogatorio, El detective aun confundido por el episodio se dirigió a la sala donde estaba el joven, entro se sentó frente a él y volvió a observar su mirada, saco el paquete de cigarrillos que tenía en el bolsillo del pantalón de su traje y lo puso sobre la mesa le incomodaba tenerlos encima, Al ver el paquete el muchacho reacciono y le dijo

-¿Me darías uno por favor?

Sorprendido ante el pedido el detective accedió

-No tenía pensado fumar, pero ya que voy a tener un compañero para hacerlo le entrego el cigarrilo y le sonrió

El joven sonrió, con las manos temblorosas tomo el cigarrillo prendido que el detective le estaba entregando.

-¿Ya estas más tranquilo? – Le pregunto el detective

-Si discúlpeme no lo pude evitar tengo imágenes en mi cabeza que me atormentan.

El joven rompe en llantos sobre la mesa, con su cabeza sobre sus brazos repite –Perdóname no pude hacer nada perdóname por favor.

- Tranquilo – le dijo el detective – ¿Cómo te llamas? – le pregunto

El joven alzo la cabeza, seco sus lágrimas y contesto

-Agustín, Agustín Ferreyra

-Agustín ¿sabes por qué estas aquí? Le pregunto el detective

- Si, si lo sé – le contesto el joven –

-Agustín se te acusa de matar a  10 personas dos de ellas fueron compañeros tuyos del trabajo, necesitamos saber qué es lo que paso. Le dijo el detective, el joven lo miro sorprendido no podía entender las palabras que estaba escuchando.

-No, yo no mate a mis compañeros... yo intente salvarlos de ellos, ellos nos perseguían, ellos nos querían matar, ellos, ellos nos hicieron cosas horribles ellos...- y volvió a romper en llantos.

Hicieron una pausa para que el joven pueda reponerse y el detective volvió a preguntar

 -Agustín, ¿necesito saber qué es lo que paso?, es todo muy extraño las heridas que tienen tus compañeros el estado de las otras personas que encontramos y tú eres el único que nos puede explicar que es lo que paso. Por favor te pido que me digas la verdad- Más tranquilo el joven miro al detective y contesto –Está bien detective le voy a contar que es lo que nos pasó- Hizo una pausa respiro profundo y volvió a hablar, -Todo lo que voy a contar es real, pero estoy seguro que nada de lo que cuente le va a parecer real, pero es la verdad y necesito que crea. Tres compañeros... - ¿Cómo tres?- interrumpió el detective, -Si, éramos cuatro contando conmigo uno de mis compañeros lo perdimos cuando escapábamos y no sé qué le paso- Los ojos se le llenan de lágrimas- Agustín, ¿de quién escapaban?, ¿porque estaban escapando? Pregunto el detective, Agustín agacho la cabeza y dijo –De ellos, ellos querían comernos, ellos nos perseguían para comernos... -Es la segunda vez que nombras a ellos, ¿Quiénes son ellos?- Pregunto el detective- -Ellos, ellos parecían personas pero... pero habían muchos que caminaban con el cuerpo podrido, otros se arrastraban si piernas- Las lágrimas aparecían otra vez Agustín tapo su cara con las manos pero siguió hablando,-Fue un infierno, fue un infierno lo que vivimos allí ellos nos perseguían por todos lados, ellos... -¡¿Quiénes son ellos?!, pregunto en voz alta el detective. – ¡No sé!, ¡no sé quiénes eran!, ¡Tampoco sé de donde salieron!, - Contesto alterado Agustín - Pero ellos..., ellos nos querían comer, ellos... - Quito la manos de su cara tenia lagrimas en los ojos, miro al detective y gritando dijo, - Detective ellos, ELLOS ERAN COMO ZOMBIES.

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⏰ Última actualización: Aug 10, 2016 ⏰

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