Poción de amor (Charlastor)

Noche inolvidable

Después de acompañar a Angel a buscar a su mascota, Charlie de inmediato miró la hora: Las 10:15

--Aún estoy a tiempo...--Dice Charlie.

--¿A tiempo para qué?--Dice Angel dudoso con Fast Nuggets en sus brazos.

--¡Oh, para nada!--Dice Charlie nerviosa.-- A tiempo para dormir, no me gusta acostarme muy tarde.

--Puff... Que aburrida.--Dice Angel.-- Algún día debes gozar más de los "placeres" de la vida, como yo.

Charlie frunció el seño algo enojada, sabe a qué se refería Angel. No está realmente enojada ya que está de buen humor, pero quería verse impotente ante Angel.

--Te quitaré todas esas mierdas porno que tienes en tu cuarto si vuelves a decir eso.--Regaña Charlie, para su goce Angel se asustó.

--¡¡No, todo menos mis juguetes!!--Exclama Angel mientras que su mascota se confundía por la acción de su dueño.

Charlie mandó a Angel a su cuarto (aunque obedeció de mala gana) y ella de inmediato empezó a dirigirse al teatro del hotel. Trataba de no llamar la atención aunque todos a esa hora ya estaban acostados. Bueno, Alastor le ha dicho que fuera sola y encima en secreto, eso hacía el estrés un poco más alto.

Cuando llegó al teatro, se aseguró de que nadie la estaba viendo y abrió la puerta con cuidado. Miró alrededor y no vio nada más que las sillas habituales y el escenario como siempre sin Alastor en el lugar que acordó. Sin embargo, Charlie sabía que a él le gustaba ser impredecible, por lo que aparecería en cualquier momento.

--Que curioso...--Dice Charlie sonriendo.-- Eres un tramposo Al...

--¿Porqué soy tramposo querida?.--Dice aquella voz inconfundible detrás de Charlie, ella se volteó y vio a Alastor con una sonrisa burlona.-- Yo no he echo trampa que yo recuerde...

--Claro que sí...--Dice Charlie imitando su sonrisa burlona.-- Me dices que llegue a tal hora y resulta que eres tú el que llega tarde.

--Corrección, aparezco de mi escondite pequeña.--Dice Alastor.-- Después de todo tengo trucos bajo la manga.

--¿Cómo que escondite?.--Dice Charlie interesada.-- ¿Porqué te escondes? No te morderé Al.

--Ya lo sé, pero como te he dicho antes...--Dice Alastor mientras se acercaba peligrosamente a ella, sin embargo no se alejó.-- Quiero sorprenderte...

Lo último lo dijo casi en un susurro y en un tono más coqueto, Charlie se sonrojó por esa cercanía y por el tono que usó Alastor. Si antes le parecía incómodo y extraño que él actuase de esa forma, ahora le parece agradable y hasta sexy... Rayos, piensa demasiado.

--Se-Será mejor que me digas a porqué me citaste aquí Al...--Dice Charlie recobrando la maldita compostura y control de sí misma, alejándose de Alastor.

--Es verdad.--Dice Alastor.-- ¿Qué tal si me acompañas hasta el escenario Charlie?.--Termina de decir mientras ofrece su brazo para que ella lo tomase y lo acompañara.

Charlie dudó un poco antes de tomar su brazo, Alastor sonrío con ternura y empezó a caminar hasta el escenario. Fue un paseo corto, pero satisfactorio para Charlie. Al subir completamente al escenario, pudo notar una mesa con un mantel rojo y dos sillas ¿Desde cuándo estaba eso ahí?

--¿Y ésto?.--Pregunta Charlie mirando a Alastor, pero éste no le respondió, sólo se acercó a una silla y le ofreció a Charlie sentarse en esa silla. En silencio, ella se sentó y Alastor la acomodó cerca de la mesa con cuidado y caballerosamente.

--Y ahora, el toque.--Dijo Alastor dejando confundida a Charlie, pero ella se sorprendió cuando él al chasquear sus dedos apareció un plato de Gumbo frente a ella, unas velas encendidas para darle un toque elegante y una música de Jazz que le daba un toque especial.