-H-hyung... d-deténgase por favor... -Jisung no estaba tan consciente de la situación pero, por alguna razón no quería que parará. Se sentía bien. -Ah~ hyung esto... e-esto se siente bien.
Jeno paró en seco. Estaba siendo literalmente una bestia. Cómo puede ser posible que este actuando de esta manera con sólo unos roces.
-Yo... y-yo lo siento pollito. -Se levantó e intentó ir al baño fallando por completo, aún no había luz. Terminó chocando con uno de los muebles. Al final se volvió a sentar en la cabecera de la cama pero esta vez se recargo en la pared mirando a la nada, literalmente.
-Hyung... -
-Jisung. -Lo interrumpió Jeno. -Pollito, sabes por qué dejé de hablarte. -Suspiró. -La última vez que te quedaste a dormir, ¿recuerdas tu confesión? Adivina qué, me dolió. Me dolió bastante, es más, hasta la fecha me sigue doliendo. Me gustas Jisung, ¡carajo! EN VERDAD ME GUSTAS... -Una lágrima empezó a caer por la mejilla del mayor. -Yo te he amado desde siempre. Intenté olvidarte, conocí a una persona en tu ausencia. Creí que sí te reemplazaba, te olvidaría. Pero las cosas no funcionan de esa manera, porque en verdad sólo lastime los sentimientos de la otra persona. Ilusioné a alguien Jisung, yo me siento mal por él pero, qué hay de mí... ¿acaso no merezco ser correspondido? -Su sollozo comenzó a escucharse. -Jisung entiendo que después de esto no quieres estar conmigo, lo entiendo bien. Soy un asco de persona...Con todo el trabajo del mundo, Jisung comenzo a buscar en la oscuridad a Jeno. Cuando lo encontró con sus palmas de sus manos, acarició su rosto y se sentó arriba de él. Estaban frente a frente.
-Hyung... -Le limpió una lágrima. -En realidad Donghyuck hyung no es la gran cosa, claro me gustaba pero sólo físicamente. No entiendo cómo pueden ser hermanos. -Lo abrazó y Jeno correspondió su abrazo. Acarició suavemente su espalda. -Creo que también me gusta hyung. -Aunque no se viera nada, sabían que se estaban viendo fijamente entre la oscuridad.
Jisung comenzó a buscar los labios de su hyung con las yemas de sus dedos, gracias a dios los encontró y no picó uno de sus ojos. Una vez que sus dedos estaban sobre los labios de su hyung, los deslizó de un lado hacia el otro. Agachó su rostro y lo besó. Cabe decir que Jeno estaba sorprendido que le tomó diez segundos en corresponder el beso.
Al principio el beso fue suave, se estaban expresando cuánto se habían extrañado y qué tanto cariño se tenían al otro. Tuvieron que separarse a causa de la falta de aire, al volver unir sus labios, el beso se convirtió en uno más carnal, más pasional, dando a entender que se deseaban el uno al otro.