Capitulo 2 Pandilla nueva

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Katia pasó por delante de una tienda de golosinas. Tenía hambre. Mucha. Entró y se encontró con un grupo de chicos (y chica) que discutian.

-Oli, hay que comprar esa enorme caja de Haribo para la guarida- dijo un chico rubio algo regordete y con una gorra roja en la cabeza-.

-¡Si claro Frank, y cuando tengas la oportunidad te comeras todas y no nos dejaras nada!- argumento otro de los chicos, pero este màs moreno de piel, con gafas de sol oscuras y menos rellenito que el niño anterior-.

-Venga chicos, no os peleis por esa estupidez- dijo María, una chica alta y flaca, con el pelo largo liso y marrón claro-.

-Chi-chicos d-dejar p-aso a e-lla -tartamudeo Peter, un chico con el pelo anaranjado y un casco en la cabeza-.

Todos se hecharon a un lado y la dejaron paso. Por el camino cogio una bolsa pequeña de ositos de goma de varios colores y la puso en el mostrador donde la dependienta le dijo:

-Es un euro, y por favor jovencita dile a estos muchachos que salgan de mi tienda.

-Hala, ya haveis oído, todos fuera de la tienda de esta amable señora- ordenó Katia con algo de brusquedad-.

-Vamonos, aqui ya no somos bienvenidos- obligo Olivv el que parecia ser el jefe de la pandilla, tenia un gorro negro en la cabeza donde un trozo de flequillo le sobresalia, una camiseta azul oscura que aunque era de manga larga la tenía remangada hasta el codo.

Todos salieron y se apoyaron al escaparate. La pandilla suspiró.

Katia que ya estaba dando media vuelta escucho la decepción de aquellos chicos.
"No te des la vuelta, no te des la vuelta" pero hizo lo que mas temía en ese momento, se dio la vuelta, corrió hasta la tienda y salió de ella con una caja enorme de Haribo.

Se la tiro a Frank que estaba con la cabeza baja hasta que vio las gominolas.

- ¡Gracias!- exclamo sorprendido-.

Katia sonrió y se dio la vuelta.

- ¿O-oye, qui-quieres se-ser nuestra ami-miga?- volvio a tartamuedear Peter-.

-¿Por qué iba yo a necesitar estar en vuestro grupo?- Katia levanto una ceja-.

- Por que eres nueva, y necesitas amigos para empezar en este pueblo- respondio rapidamente Kai; un chico paralitico que iba en silla de ruedas-.

- Pero aún así no ibas a poder entrar, por que hay que hacer una prueba y tu solo eres una princesita de ciudad- replico Hannes-.

-¿Perdon?, bien, ya que no me ves capaz de hacer una estupidez, ¿por que no probais?, haber si consigo que te tragues tus palabras, pero si lo consigo, me dejaries ser de vuestro grupo ¿okey?.

- Bien, quedamos en la vieja mina en las afueras del pueblo al artardecer. E intenta no ir vestida como si fueras a un centro comercial- le dijo el chico desafiante-.

- Trato hecho, supongo que luego nos vemos- y se marcho-

-¿Por que la queremos en el grupo?- pregunto confuso Jorgo-.

-Exacto, resulta que yo soy quien decide quien se va o quien se queda, ¿te has olvidado de eso Hannes?- pregunto Olivv-.

- Bueno, cuantos más mejor ¿no?- defendio María a Hannes-.

-Vamos María, no por que Hannes y tu seais novios significa que siempre estes de acuerdo con el- chincho Frank-.

-Además Oli, la chica es guapa.

-¿Y eso que Kai?

-Pues que no te ha parado de mirar.

-Seguro- vacilo Olivv-.

-¡OLIVV SE HA HECHADO NOVIA!- gritaron al unisono Frank y Jorgo-.

-Callaos ya- les empujo el jefe- venga vamos a darnos prisa que hay que preparar la prueba.

Por ahora hasta aqui, espero que se os este haciendo interesante, me haríais un gran favor si comentaseis sobre la historia. Gracias por leer.

Los Cocodrilos: el asesinato Donde viven las historias. Descúbrelo ahora