30.

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Estaba totalmente inconciente, veía todo borroso y todo le daba vueltas.

Estaba semidesnuda frente a los ojos de Joel quien no dejaba de besarlos los pechos y el cuello.

Bajo por su abdomen lamiendolo y llenándolo de besos, mordisqueó un par de veces el arete que tiene en el ombligo, luego bajo su vista a su bragas negras, muriendo por arrancarsela con los dientes.

—¿Jo... Joel?— dijo ____ balbuceando intentando abrir los ojos pero era inútil veía todo borroso.

Joel subió nuevamente a su cuello mientras la mordía y lamía.

—Eres mía ____, solo mía no voy a compartirte con nadie—le dijo Joel mordiendole su oreja.

____ cerró sus ojos cayendo inconsciente, está vez no despertó. Su cabeza le daba muchas vueltas.

[...]

La luz del sol cayó en sus ojos, le dolía horrible la cabeza, aún con los ojos cerrados sentía que le dolía todo su cuerpo.

Los abrió lentamente, se tomó su tiempo, con su mano derecha acarició su frente, que dolor más grande.

Reacciono rápidamente cuando se dio cuenta que no estaba en su habitación y que estaba desnuda cubierta con una sábana blanca.

Se incorporo rápidamente en la cama, nerviosa, preocupada, sin entender nada. Entonces vio a Joel a su lado, durmiendo junto a ella, también se encontraba desnudo.

Oh por dios, ¿Que paso aquí? - pensó.

Joel fue abriendo los ojos despacio, ella parpadeó un par de veces tratando de asimilar toda esta confusión, no recordaba absolutamente nada.

—Buenos días amor— habló Joel totalmente relajado

—¿Que-que paso aquí?— pregunto asustada la castaña.

—¿Qué no es obvió?— preguntó Joel— hicimos el amor

No, no, no puta madre- pensó.

—No, no, no, no—dijo poniéndose de pie de la cama rápidamente cubriéndose con la sábana— imposible.

Joel negó con la cabeza.

—¿De que hablas? Si lo disfrutaste tanto como yo— ____ lo miro confundida.

—¡Puta madre, no puede ser!— observó a su alrededor.

Todas sus prendas estaban regadas por el suelo, rápidamente recogió su ropa.

—¡Cerdo, infeliz, mal nacido!, ¡¿Por qué me haces esto a mi?!

—¿Qué? Fuiste tú la que me busco y me pidió, me rogó que te cogiera.

—¡Cállate, yo no recuerdo nada de eso!

Rápidamente la jovén avergonzada y preocupada se encerró en el baño, comenzó a vestirse muy de prisa, se miro al espejo estaba despeinada y con el maquillaje corrido.

Tenía ganas de vomitar, de arrojarse a si misma, tenía asco de él y ella.

¿Qué pasó? Ella no recordaba nada.

¿Que hiciste?- se preguntaba interiormente.

Ella salió rápidamente del baño y vió a Joel poniéndose los pantalones, ¡Maldita sea!

Recogió sus zapatos del suelo y salió de prisa de la habitación, ni siquiera le dirigió la mirada.

Prácticamente bajo corriendo por las escaleras, poniéndose los tacones, vió en la sala algunas personas ebrias tiradas en el suelo o mesa, se espanto y salió corriendo de la casa.

novio obsesivo y agresivo. -Joel P.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora