Chapter 4: Duetos

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Era una mañana fresca en la preparatoria Seúl, las nubes le habían tapado el paso al sol, sin embargo no hacía demasiado frío ni calor; la resolana calaba en los ojos y si estabas fuera seguramente sería buena idea usar unos lentes de sol.

Jean estaba sentado en las gradas con los codos recargados en la grada de atrás, usaba unos lentes oscuros con forma de aviador que usaba cuando era Jennie, traía una playera blanca ceñida al torso y unos pantalones de mezclilla.

No estaba fumando, simplemente veía el campo de football, no había considerado unirse a ellos, ser un Jock… eso impresionaría a Lisa? Sabía cómo jugar americano, ser porrista había tenido sus ventajas… sin embargo… se sentía más atraído a unirse al equipo de Basketball.

Escuchó unos pasos a su lado, volteó el rostro y vio a Kai y Jisoo, luego se volvió al campo de nuevo. San se sentó a su izquierda y Kai a su derecha, dejándolo en medio.

-Hey chicos-. No los recibió con entusiasmo, su voz sonaba más bien como la de un robot.

-Necesitamos hablar Jen.-.Jean sabía por el tono de voz de Jisoo. que eso era una orden más bien.

-Acerca de…?-.

-La canción de ayer-.

-Perdona si me acerqué de más a Rosé, pero era parte del número-.

-No hablo de esa-.

-ah vaya… qué hay pues de la otra canción?-.

-En serio te sientes así?-. Preguntó Kai; él no volteó a verlos.

-Fue claro, no? Además no hay que olvidar que es por eso que estoy así, porque Jennie Kim se perdió quién sabe dónde-.

-No sabíamos…-.

-Chicos, tranquilos… es normal, nunca me he sentido del todo bien conmigo misma, pero al menos antes tenía las ganas y el orgullo para hacer las cosas, aunque fuera pisar el mundo y exprimirlo…-.

-Sabes que estamos aquí para ti, verdad?-.Jean sonrió un poco.

-Lo sé Kai-.

Se quedaron un rato en silencio, viendo al equipo de americano entrenar. Escuchaban el silbato de la coach Bestie y sus gritos de macho por todo el campo.

-Creen que Bestie haya pedido un deseo también y sea un hombre encerrado en el cuerpo de una mujer?-. Preguntó Jisoo en son de broma, Jean y Kai rieron.

-Pues qué mala pata por quien se lo cumplió, porque parece hombre con pechos… al menos le ha dado un corazón de oro y un alma super sensible, es un ser humano increíble-.

-Seh, es una buena bestia-. Contestó Kai.

-Creen que si entro al equipo de baloncesto tenga mayor oportunidad de que Lisa se fije en mi?-.

-Yo creo que eso pasaría si te metes al de football-. Dijo Jisoo con seguridad, se alisó la falda de los Cheerios y continuó –Además sería como darle en todo el ego a Wang-.

-Síp, peor que una patada en las bolas-. Apoyó Puck.

-Mhm, me preguntó cómo es eso de que te peguen en las bolas-.

En seguida sintió un dolor agudo y se sofocó, casi creyó desmayarse, se llevó las manos a la entrepierna y se echó para adelante dejándose caer en la grada que estaba más abajo; cuando por fin pudo hablar…

-Deja que pueda pararme y te reventaré los testículos de una patada Kai! No sé qué es peor, si esto o parir-. Se quedó en posición fetal hasta que Jisoo y Kai dejaron de reír, luego se acercaron a Jean y él le levantó las piernas hasta el pecho como hacían cuando tenían accidentes en el campo sin usar su uniforme (por ende sin concha que los cubriera).

Cuidado con lo que que Deseas Jennie Kim Donde viven las historias. Descúbrelo ahora