Capítulo 1

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— Norman... Norman... — la castaña solo susurraba aquello desde el momento en que la habían encerrado en aquel lugar, recibía diariamente pruebas similares a las que recibía en Gracefield pero con más dificultad cada vez que las completaba aunque seguía teniendo calificaciones perfectas de manera continua bajo la única esperanza de que el albino estaba bien y que la buscaría.

Pero con el paso del tiempo sus esperanzas se apagaban al igual que en brillo que alguna vez había existido en sus ojos, lo único que le quedaba era sobrevivir, intentar seguir siendo útil para que no la desechen como hacían con aquellos que no servían. No le permitían hacer demasiado, solamente salia de aquella pequeña habitación para un control rutinario cada semana, pronto su mente comenzó a rechazar la idea de morir...

En una de las tantas salidas de su habitación la alarma del lugar comenzó a sonar, no sabia que significaba aquello sin embargo noto una oportunidad en el pánico que estaba pasando aquel lugar, tomo una de las jeringas clavándola en el ojo de el demonio que sostenía su brazo logrando que la suelten e intento comenzar a correr. Al salir a los pasillos logro ver como el resto de los sujetos de prueba se amontonaban en estos, estaba sucediendo de una vez por todas, iba a ser libre de aquellas torturas luego de tanto tiempo.

— Norman... — susurro la castaña moviéndose entre el resto aun con aquella jeringa en mano puesto que tenía cierto temor de que alguien buscara dañarla de nuevo, aquel nombre que hace tanto que no había pasado por su mente volvió como un torbellino casi obligándola a buscar a el albino quien no veía desde hace tiempo, ¿Se vería igual? ¿Seguiría vivo? ¿Cuanto tiempo había pasado desde que los encerraron allí?

Ni siquiera sabia como lucía ella misma en esos momentos, a medida que avanzaba entre las personas aquellos pesimistas pensamientos dominaban su cabeza de nuevo o al menos así fue hasta que creyó verlo... Aunque dudo por unos momentos, aquel chico estaba al frente de todos, tenia las mismas características que su mejor amigo pero de alguna forma se veía muy diferente a él.

— ¡Norman! — exclamó aquel nombre logrando que el albino se volteara a verla, era él, luego de tanto tiempo sentía como si su corazón se llenara de alegría de nuevo. No estaba muerto, estaba tan cerca que incluso podía tocarlo, aquello no era un sueño... En el momento en que llego frente a él no podía creer lo que sucedía, no había muerto y ella también estaba viva.

—Rachel... Sabía que sobrevivirías. — con aquella voz suave el albino murmuro aquello logrando que los ojos de la chica se llenaran de lágrimas de alegría antes de comenzar a seguir al albino de nuevo, no le importaba nada más en aquel momento solo deseaba seguirlo incluso si eso la llevaba a una muerte segura, en esos momentos estaba dispuesta a sacrificar cada pedazo de su vida tan solo para mantenerse junto a él...

The queen of the board Donde viven las historias. Descúbrelo ahora