11. ¿Puedes Ser Mío?

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BamBam caminaba algo decaído, al fin había arreglado las cosas con él Beta, pero aun así se sentía mal, seguía queriendo de otra forma al Beta, pero verlo hablar de forma distante hizo que supiera que no tenía ni una oportunidad, miro hacia abajo aguantando las lágrimas y sintiéndose como un idiota, hubiera preferido seguir sin saber nada. 

¿BamBam?— escucho aquella voz poco conocida, pero supuso quién era por el apodo con el que fue nombrado— ¿Qué tienes? ¿Por qué lloras?— sintió como unos brazos lo rodeaban haciendo que este se soltara a llorar más, necesitaba aquel abrazo, pero no quería que Minghao lo viera así, ni nadie, pero en ese momento aquel abrazo lo hizo sentirse lleno. 

¿Mark? ¿Qué haces aquí?— su voz salió amortiguada, pero entendible para el mayor. Los dos simplemente se quedaron así durante un tiempo hasta que BamBam se sintió seguro en hablar. Hablaron durante unos minutos y Mark seguía acariciando la espalda del menor para no hacerlo sentir peor. Quería cuidarlo y su instinto hacia que naciera aún más su sentido protector...

No entendía como era posible que a BamBam le afectaba tanto una pelea de muchos años atrás. Se sentía celoso de no ser él quien ocasionará las emociones del menor. Gruño sin darse cuenta haciendo que BamBam se alejara un poco. Los dos se miraron al final perdiéndose en la vista del otro y el Omega se sintió algo miedoso. Era tan hermoso que sintió que podía enamorarse, podría superar el desamor que Youngjae le trajo. Tal vez ese Alfa era todo lo que necesitaba. Podría jurar que si fuera un animal estaría moviendo la cola felicidad al encontrar a su pareja, a aquella pareja que había estado empeñado en esconder. Aferrándose a un Beta que ya ni siquiera lo veía.

No quería separarse del Omega. Había algo que le decía que ese sería su amor.  No entendía que, pero quería confiar Que BamBam era el indicado.

Eres un bebé—  Mark beso la frente del menor—  ¿Puedes ser mío?— todo lo dijo sin pensar, su lado salvaje había sido quien tomó la iniciativa y término siguiendo a sus instintos. Vio como BamBam se sonrojaba a tal grado de parecer un tomate, lo alejo antes de volver a abrazarlo con cuidado sin querer escuchar un no por respuesta. No lo soportaría porque estaba seguro de que ese niño era su pareja destinada. Una estupidez para un adulto pensar de ese modo, las parejas destinadas solo eran leyendas antiguas, pero ahí estaba, suspirando por alguien que apenas y conocía.

No quiero ser tuyo...— BamBam miro hacia abajo— no si tu no eres mio— sonrió antes de besar a Mark quien estaba sorprendido. Eso había sido demasiado fácil...

Ahora eres mío y yo soy tuyo— lo lleno de besos haciendo que olvidará a aquel Beta, ahora sólo estaba permitido que él fuera quien la robara el aliento, ahora sólo él podría besarlo... Serían suyos...

Pero nadie sabía que a lo lejos un Beta había sido capas de ver la escena y se sorprendió a si mismo gruñendo queriendo ir y reclamar a ese Omega, pero supo que estaba siendo egoísta. Él estaba cayendo por otro Beta y solo quería mantener a BamBam con él por un capricho aún cuando él le había dejado en claro que sólo eran amigos y que en el pasado humillo. Había roto todo lazo amoroso, que se pudiera tener, con su mejor amigo de hace años y ahora que lo veía perdido quería recuperarlo.
Es cierto ese dicho "No valoras lo que tienes hasta que lo pierdes" Nunca valoró a aquel pequeño Omega que lo seguía como ejemplo y ahora que jamás volvería a rogarle o buscarlo estaba extrañandolo. Pero así funciona la vida...

Hey— Jackson le golpeó el hombro haciendo que se diera cuenta de donde estaba— de repente dejaste de reir— se escucho preocupado y Youngjae simplemente formó una sonrisa, esa sonrisa que engaña...

Estoy bien, sólo me quede pensando— siguieron caminando sólo que decidió ir por otro lado para evadir a su antes mejor amigo. Ahora eran simples amigos.

Bien— Jackson sonrió antes comenzar a correr ocasionando que el Beta menor se quejara para luego seguirlo. Como odiaba correr, pero amaba correr al lado de Jackson. Poco a poco caía por un Beta. Lo peor de querer a alguien de a alguien igual a ti es que no se puede crear más vida. Y Los Alfas de alto rango estaban aterrados con las cosas distintas.

Algo prohíbo, la relación entre la jerarquía era complicado, las leyes eran absurdas y el instinto muy fuerte.

Los Betas eran olvidados en toda la reglas y aún así recibían malos tratos por los Alfas, por suerte no eran tan humillados como los Omega. Aparte de que para los Betas era fácil ponerse perfume y fingir ser de otra clase.

¡Enserio!— Jinyoung se sorprendió al ver como su amigo se quejaba de tener que visitar a su familia. Casi nunca hablaba de esta, y comenzaba a pensar que se había peleado o algo así, pensaba que los Omegas eran muy apegados a su familia, pero Jaebeom siempre lo sorprendía— ya entendí mamá... Si, y no estoy de loco— rodó los ojos algo irritado, su mamá lo había llamado para recordarle que hacia en esa ciudad. Maldijo por lo bajo el que su mamá siempre le reclamará lo mismo.

¿Qué sucede?— Jinyoung lo miro entre preocupado y sorprendido, jamás había visto a Jaebeom irritado y jamás lo había pensado ver de esa forma, era totalmente nuevo y extraño. Estaba conociendo las facetas de su compañero, dormir con él abría muchas puertas. Tal vez si seguía así terminaría cayendo por otro Omega, pero estaba seguro de que este jamás se haría sumiso por él, era alguien distinto, tranquilo, sin paciencia e irritable aunque en el trabajo se mostraba paciente y jamás gritaba. Era totalmente diferente, y ahora entendía que jamás llegaría a conocerlo por completo.

Tendré que irme— Jaebeom lo miro como pidiéndole disculpas— mi mamá esta preocupada... Dice que ha habido accidentes con Omegas y como sabrás yo soy uno— Estaba medio molesto por ser tratado como alguien débil. Él había demostrado ser más fuerte que algunos Alfas y pudo ser jefe en un área importante de su empresa y jamás dejó que alguien lo menospreciara, pero su familia siempre lo vio como alguien débil. Maldijo el ser un Omega, maldijo que viniera de una familia de Alfas, extrañaba a todos, si pero por algo se había alejado, vivir en otra ciudad no fue por nada. Su mamá le había marcado porque su celo estaba cerca y en las noticias salían bastantes cosas malas que sucedían a Omegas en celo.

Te acompaño, igual no me importa— se encogió de hombros, quería verse tranquilo, pero sinceramente estaba nervioso, no quería ir, pero tampoco quería quedarse y no hacer nada así que era la mejor oportunidad para conocer mejor a su compañero, aparte necesitaba mantenerse distraído para no recordar aquellas imágenes sobre su ex— y ni me digas que no, que ya te vi— tomó su chamarra y miro la hora, chasqueo la lengua ignorando la mirada molesta de su compañero. Le daba miedo verlo molesto, pero era un Alfa y no podía temer de un Omega.

Bien, sólo te digo que pensarán que eres mi pareja— salió de ahí dejando un poco sorprendido a Jinyoung, no lo había pensado y tenía razón, dudo unos momentos pero ya estaba decidido así que no se vio tan afectado por eso. Camino con elegancia hasta la salida donde Jaebeom esperaba, este simplemente era alguien extraño. 

Jinyoung pensó que tal vez no se escucharía tan mal su nombre segundo de "es mi pareja".



























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Holiwis, otra vez yo reportándome al trabajo... Bien espero que estén bien y que no estén enfermos. Ahora estoy aburrida... La cuarentena hizo que me aventara todos los animes que tenía planeado ver en un mes y apenas llevo una semana.

En fin eso es todo espero que les haya gustado y pues adius— se apagó la cámara

NO QUIERO SER TUYODonde viven las historias. Descúbrelo ahora