Steve Harrington•Billy Hargrove ONE SHOTS

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N/A: EL PRIMER OS DEL 2020.

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• BILLY HARGROVE •

Mayormente estarías maldiciendo y llorando desde que tuviste la prueba de embarazo en tus manos pero de hecho te encontrabas en un momento lleno de calma ya que Jonathan tu mejor amigo estaba contigo haciéndote sentir como si estar embarazada fuera la mejor noticia del mundo.

Después tu expresión se tornó confusa porque Jonathan comenzó a carcajear con tanta fuerza que sostenía su estómago y pequeñas lágrimas se hacían presentes en sus ojos.

"¿Qué? ¿Por qué te ríes?"

Colocaste la prueba de embarazo en el borde de la cama y después le diste un golpe en el brazo a Jonathan.

"Es que-" Él no paraba de reír y hace el intento de recuperar aire. "Esto es alucinante ¡Malditamente maravilloso! Lo más genial que le ha pasado a este pueblo desde mi nacimiento"

Rodaste los ojos por el ego que se cargaba desde que la secundaria terminó y estaba esperando terminar en unos meses la universidad, misma a la que Nancy asistió junto con otros dos de sus amigos cercanos.

"Ni siquiera sé cómo describir esto, es... Perfecto" Dijo con una sonrisa. "Vamos, dilo. Billy Idiota Imbecil Maldito y Jodido Hargrove va a ser padre"

"Son muchas malas palabras" Hiciste una mueca. "Sé que no te agrada Billy, pero él es bueno y es el mejor novio desde secundaria"

Negó la cabeza contrariado por tu respuesta.

"Te obligó a salir con él, el mismo día que puso pie en el instituto"

"¿Acaso acepté?"

La mirada de Jonathan va hacia arriba, pensando.

"Casi-"

"Pero no" Lo interrumpes de inmediato. "Lo puse en su lugar"

"Como sea. Y justo después de eso ¡Bam! Tu perrito faldero apareció a la semana"

"Justo después de eso fue muy lindo, cariñoso y atento"

"Eso dices. Con los demás siguió siendo una mierda de persona"

"John..."

Se encoge de hombros y te da una sonrisa triste.

"Es Billy Hargrove, ya sabes que quiero decir con eso"

•••

"Hola amor"

Una sonrisa se extendió por tu cara y esperaste a sentir sus brazos rodeándote desde atrás. Reíste cuando lo viste hacerlo y sus manos se posaban en tu vientre.

Tu sonrisa se borró pero recargaste tu cabeza en su hombro.

"Hola, cielo"

"Me enamoro cada día más de tus motes cariñosos y cursis" Susurro en tu oído provocando ligeras cosquillas.

"Lo sé"