¤Ojos en el universo¤

Luna....¿me escuchas?

Puedes creer lo que quieras de la luna, pero yo siempre he pensado que es la única amiga que me sigue en las noches,podría decir que es mi acompañante nocturna, dando su luz a mi habitación, es mas ni foco necesito para alumbrar mi cama...con mi gran luz natural vivo feliz.

Había comenzado por una noche trágica cuando la conocí, yo derramaba lágrimas y pegaba gritos a más no poder, el panico, miedo, paranoia, enojo y decepción me habían invadido por completo...

La luna solo se quedaba mirándome...no sabía ella lo que me pasaba pero,seguía alumbrando.

Yo solo pensaba en que había hecho, me di cuenta de mi culpa y poco a poco su luz me iba tranquilizando, tal pareciera que ella me comprendió después de unos minutos y al ataque fue a rescatarme, secar las sobras de mis llantos y callar mis gritos paranoicos.

Tal vez por eso decidí que tenía que tener una luz a mi guía, tal vez también alguna vez quisiera haber sido una luz guía; no, no solo una ilusión de que lo soy, si no, serlo de verdad, que alguien al verme al instante le arregle sus tristezas con tan solo..."Brillar".Asi es que como mi amiga la Luna es una luz guia para varias personas y entre ellas yo.

En fin...la noche en que conocí mi luz guía, me sentía como le persona mas tonta y cruel del universo, es decir, yo lo cause, cause obtener solo recuerdos y vacíos, el que se acelere mi corazón al solo verla, el solo quedarme como tarado mirando y mirando su pelo color castaño, sus ojos....sus ojos eran simplemente café, pero solo con una mirada quedabas mas que muerto. Y sobre todo lo que extrañaria más, serían sus besos mentirosos al igual que sus palabras y promesas; eran mentira pero al menos sabían hacerme sentir bien y seguro de que estaría siempre conmigo...Maldita la hora en que llego esa pregunta a conclusión sobre mi mente,pero no podía quedarme sin saber que sabía lo que decía ella o por lo menos lo que estaba haciendo.

Todo lo que me congojaba lo guardaba para mi, por el temor de que pasara lo que sucedió, esa noche descubrí quien tal vez me escucharia y no necesito decir su nombre, ya lo he dicho demasiadas veces; y aquella chica que no sabia que hacer conmigo, tampoco la mencionare, pues ella seguramente no sabe lo que paso aquella noche en que la luna me escuchó perder el control por primera vez por un amor.