Capítulo 94: Estar Enamorado.

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Ese día en Tweek Bross Coffee, los gerentes tenían una conversación con uno de sus empleados sobre su próximo día libre.

-¿Entonces? -.

-Ya lo sabes Clyde, los Tweak les dejan los fines de semana de diciembre, libres – dijo Craig, cruzado de brazos con su típico semblante serio.

-Pero mi día libre cae en fin de semana -.

-L-Lo sabemos, pero no te preocupes por eso – habló Tweek, quien estaba al lado de su novio – tu día libre s-se cambiará para otro día -.

-¿Enserio? – el castaño se sorprendió un poco – oigan, no es necesario, ya tengo el fin de semana, no me importaría no tomar el día -.

Lo cierto era, que Clyde no quería causarles complicaciones a sus amigos.

-Está bien, Clyde – Tweek habló sereno y sin dificultades, como pocas veces lo hacía durante sus horas de trabajo – e-es tu día de descanso -.

-Además McCormick también tomará el suyo – hablo Craig.

-Gracias chicos – Clyde les sonrió, agradecido de que ambos fueran tan amables con él. Bien sabía que en otra época del año, Craig no dudaría en hacerlo ir a trabajar.

Sin embargo, estaban en "esa" época del año, la época donde todos sus amigos se volvían más comprensivos y trataban de distraerlo y no dejarlo solo.

Clyde pensó que en verdad tenía muy buenos amigos.

-Por cierto, Clyde ¿Ya hablaste con Token? – Craig preguntó tranquilo, sin intensiones de que su pregunta sugiriera otra cosa, pero por la reacción del castaño, se dio cuenta que no fue tan neutral como pensó.

-¿C-Con Token? – las mejillas de Clyde se sonrojaron levemente y desvió la mirada rápidamente – p-pues no -.

Craig y Tweek compartieron una rápida mirada, una cómplice.

-¿N-No vas a llamarlo? -.

-¡S-Sí! ¡Claro que sí! – respondió de inmediato – e-es sólo que no quiero molestarlo... ¿Q-Qué tal si lo llamo cuando está ocupado? -.

-Ponle un mensaje entonces – solucionó el de cabello negro.

-¡B-Buena idea! ¡Quizás deba hacerlo! – Clyde hablaba nervioso y en un tono más alto del necesario - ¡Sí! ¡Lo haré! -.

La pareja volvió a mirarse pero esta vez sin disimularlo, lo hicieron con toda la intensión de que el otro los viera y funcionó.

Clyde se sonrojó un poco más al notar que sus amigos parecían estar sospechando.

-¡B-Bueno! ¡Gracias por todo chicos! ¡Es hora de volver al trabajo! – y así, se levantó de la silla y salió rápidamente de la oficina.

Cuando el castaño salió, la pareja sonrió un poco, pues les aliviaba verlo actuar diferente al chico desanimado y triste que había sido en los últimos días.

Aunque bien sabían que pronto volverían a verlo de esa forma.

Como Donovan pidió hablar con los gerentes y uno de los empleados estaba en su día libre, fue necesario que Butters saliera a ayudar a Kenny, quien se quedó con todo el paquete de atender a los clientes del momento.

-¡Clyde rollito de canela! ¡Que bueno que ya estás aquí! – Kenny celebró cuando lo vio salir de la oficina de los jefes. En ese momento se encontraba camino a la cocina a recoger una orden.

Lo Que Elegí - South ParkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora