»En un habitad donde reinaba la tiranía, la venganza y el odio. La pequeña lechuza Izuku, junto a su familia soñaban con qué los guardianes que tanto hablaban, vinieran a su rescate lo más rápido posible, pero este sueño tonto se fue desvaneciendo p...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Gracia-as.—Solo apoyo su cabeza en su pecho para sentir la calidez de su abrazó.
—No hace falta que agradezcas, solo que si necesitas hablar, yo voy a estar para escucharte...Será mejor que descanses un poco, ya que todavía estás algo lastimado.—Poniendo su ala en su espalda, dando una pequeña sonrisita, para darle ánimos.
—De-nki, y-o.—Seguia llorando sin parar por la amabilidad del rubioso.
—ya, ya, tranquilo.—Dando pequeñas palmadas en su espalda.
Izuku al sentirse tan cómodo, poco a poco sus ojos fueron cerrándose, para caer dormido en sus brazos.
—Pff, este niño, será mejor encontrar a alguien que me ayude a cargarlo.—observo para todos lados haber si encontraba a alguien, hasta que se topo con sero.—¡Oye, sero, ayúdame con este niño!—
—¿Qué? Bueno, está bien.—Cambia de posición para aterrizar en aquel árbol para poder sujetarlo de un lado.—Pero, dime...¿Quién es? Tengo mucha curiosidad.—
—Luego de dejarlo, te contaré con más detalles.—
Después de un rato de volar, lo dejaron en un nido bastante amplió, ya que sus alas eran bastante grandes,entonces optaron por esa opción. Para saber que ese era su nuevo nido, Denki con sus garras tallo una enorme cruz.
—¡Vamos te contaré en el camino!—Se fueron volando mientras conversaban.
Izuku sólo se acomodo tranquilamente ya que por fin podía sentirse bien sin tener que pasar frío y calor.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Su padre solo pensaba si su hijo se encontraba bien, o si había encontrado a los guardianes. Muchas cosas se le venían a la cabeza al mismo tiempo.