¿Pueden Existir Dos Hilos Rojos Del Destino?

CAPÍTULO DIECIOCHO: TOMAS FALSAS

El sábado llego rápido y los invitados ya estaban listos para el evento.

Apura Naruto, tenemos que llegar a la casa de Sakura para dejar a Boruto ahí con Hanabi.— habló apurada.

Ya voy Hina, solo dejame poner mi cabello peinado... Maldición, mi cabello es indomable, no me deja peinarlo.— habló fastidiado.

Ay Naruto, tu cabello es lo que te hace único....— se interrumpió analizando la situación.— además creo que si te lo dejas así, las mujeres correrán hacia ti.— dijo espantada.

Ven, yo te peinare para que yo sola te vea hermoso.— dijo con enojo.

Caray Hina, como me encanta cuando te pones celosa.— dijo con una sonrisa zorruna.

A mi también me gusta cuando te pones celoso, recuerdas esa vez que el conserje se puso a coquetear conmigo pero yo ni caso le hacía.— dijo en entre risas.— hiciste un escándalo cuando me dio un beso en la mano.

Ay Hina, no me lo recuerdes, que vergüenza.— habló apenado

Bueno ya terminé.— sonrió al ver como quedó el peinado de Naruto.

Se ve bien, me gusta.— habló caminado hacia las llaves del carro, pero es luego siente que su cabello se desarregló de nuevo.

Sabes algo Naruto, estarás conmigo toda el evento.— amenazó.— incluso si quieres ir al baño.

Hina, ¿No confías en mi?.— dijo fingiendo indignado.

No es eso, solo que tienes un gran corazón que es fácil manipularte.— dijo rodeando el cuello de su esposo y besándolo.

¿Qué?.— levantó la voz.— ¿tan fácil soy?

Hinata rió fuerte.

No eres fácil Naruto, solo que eres muy noble y la gente se aprovecha, mira a Toneri, dizque ser tu amigo y te puso en coma.— dijo lo ultimo muy molesta.

Si tienes razón, ahora seré más precavido.— respondió.— no quiero que sufras por mi.

Por eso hay que desconfiar de la gente.— habló Hinata siendo abrazada por Naruto cual el asintió.

Vamos señora Uzumaki, nos espera una fiesta.— dijo Naruto tomando la mano de sus esposa.

Y partieron los tres, dejaron a Hanabi, Boruto y Shikadai en la casa de Sakura vigilada por la Hyuga menor.

Ya volvemos Hanabi, niños.— dijo Naruto muy feliz.

Adiós.— dijo Hanabi.

Buenos niños vamos adentro.

Ya Naruto y Hinata en camino, Hinata llama a Temari para decirle que Shikadai esta con Hanabi.

Listo Temari, nos vemos en 20 minutos.— acto seguido colgó.

Ya llegando al gran hotel dónde se realizará la "fiesta" bajan por una rampa hacia la cochera y se estaciona junto a los autos de sus amigos.

Hina.— habló Naruto.— ¿tu vestido no te ajusta tu abdomen?

No para nada, justo también pensé en eso cuando compré los vestidos.— respondió agarrando la mano del rubio.

Eso me tranquiliza, pero ahora que me fijo bien, estas demasiado hermosa incluso tu embarazo te hace resaltar más.— dijo con un poco de celos.— creo que te cuidaré más ahora.

Naruto, yo también te cuidaré de esas ofrecidas.— habló Hinata.

Además sabemos cuanto nos amamos.— dijeron al mismo tiempo.