Dios no puede ser pensaba mientras manejaba rumbo al hospital luego de los ensayos diarios, y si era verdad lo que ocurrió? Pero no, no, no puede ser el doctor dijo que no puede ser pero y si escuchó nuestros pedidos analizaba.
S: amor paso por ti? es fin de semana, tal vez luego de salir del hospital podemos ir a algún lugar por allí –dijo entusiasmada imaginando lo bien que lo pasarían-
T: no amor, ve tú, luego te llamaré para encontrarnos, tengo algo de trabajo aún –dijo excusándose del otro lado del teléfono-
S: ok amor, te veo allá, adiós –le dijo arrancando el auto-
R: hey –dijo sonriente- Britt cómo estás, mira que aunque vivimos en la misma casa ya casi ni te veo –le dijo dándole un pequeño abrazo-
B: si ya ves que los ensayos son muy intensos y terminamos muy tarde
J: hola Britt, gracias por los chocolatitos –dijo dándole un abrazo de agradecimiento-
B: me alegro mucho que te haya gustado –le dijo tomándolo en sus brazos y levantándolo-
R: lo consientes mucho Britt, luego se va a estropear sus dientes con tantos dulces –le dijo en tono de regaño-
B: déjame Rach, yo seré su tía consentidora –dijo riendo-
S: hola, hola –dijo entrando con unas flores en sus manos-
J: hola tía San
R: hola San, hasta que te dejas ver
S: he tenido varios casos complicados –dijo excusando su ausencia durante esos días, no es que no fuera a ver a Quinn al hospital sino que lo hacía en horarios que la castaña no estaba, Rachel necesitaba sentirse sola para saber que Jim dependía sólo de ella-
B: hola –dijo con una pequeña sonrisilla de lado-
S: hola Britt
J: tía San, Britt también será mi tía
S: por mi? –dijo automáticamente-
R: qué?
S: digo que por mi es genial, de seguro te consentirá mucho
R: bueno? –dijo contestando el teléfono-
D: Rach, los necesitamos para la prueba de vestuario
R: tiene que ser ahora?
D: así es, vengan ya –ordenó-
S: y ahora que ocurrió?
R: tenemos que irnos, volvemos luego –dijo tomando su bolsa-
S: pero por qué?
R: es la prueba de vestuario –dijo sacando las llaves del auto- vámonos Jim
J: ehhh la prueba de vestuario –dijo bajando de los brazos de la rubia-
R: adiós chicas –dijo saliendo de la habitación en compañía del pequeño-
Para Santana y Brittany era una situación incómoda, las cosas ya no eran cómo antes, cada una tenía su propia coraza así que únicamente hablaba su cabeza y ya no se decían las cosas que salían del corazón.
S: qué vestuario? –fue la única excusa que encontró la latina para iniciar una conversación con la rubia-
B: no lo sabías? –dijo sentándose-
S: no, de qué me perdí?
B: ella y Jim están en la obra de la bella y la bestia, ella es la protagonista y el pequeño es
Chip la tacita
S: ooww en serio? –dijo asombrada- Jim será la tacita que baila, el hijo de la tetera? –dijo recordando las tantas veces que vio aquella película con la rubia que siempre fue una fanática de los películas de Disney-
B: así es San, los dos están muy entusiasmados, tu idea ha funcionado muy bien
Luego de aquello un silencio incómodo se formó, la rubia parecía querer salir huyendo de allí, la latina quería que se quedé allí un rato más pero necesitaba palabras más sutiles que un “quédate aquí conmigo”, luego de buscarlas tanto en su cabeza fueron únicamente palabras torpes las que salieron de su boca.
S: y cómo estás? –dijo cruzada de brazos tratando de mostrar seguridad-
B: bien, algo ocupada con los ensayos de la academia, tenemos nuevas competencias
S: va deja de ensayar mucho Britt y de torturar a las niñas también, todo irá bien
B: no San, tenemos que ensayar
S: pero Britt si lo sabes hacer todo bien, bailar es lo tuyo –dijo sonriéndole-
B: bueno San, eres mi trébol de buena suerte así que si tú dices que todo saldrá bien pues creeré en ti, y tú como vas?
S: bien, ya sabes –dijo rodando sus ojos- algunos casos difíciles, una que otra amenaza de muerte y algunos insultos, otros agradecimientos pero bueno en general bien
B: ten cuidado San, a veces las amenazas no son sólo eso, cuídate mucho –le dijo algo preocupada-
S: no pasa nada Britt, son sólo palabras, además sabes que nadie podrá sacar del campo de batalla a Santana López –dijo orgullosa-
B: eres tan –dijo mordiéndose la lengua para evitar completar la frase-
S: tan qué? –preguntó curiosa-
B: nada olvídalo
S: y cómo van las cosas con el grandulón? Digo con Tom –dijo para molestarla-
B: genial, Tom es genial
S: es tu novio verdad?
B: ya hablamos de eso San
S: sólo quiero saberlo y ya
B: está bien San te lo diré –dijo tomando aire- Tom no es mi novio, para estar bien, para ser
feliz no es necesario estar con alguien, así que olvida esa tonta idea
S: osea que tú y el nada
B: así es Santana pero estoy muy bien, soy muy feliz, es otro tipo de felicidad
S: ok
B: y tú novia?
S: está trabajando –dijo con naturalidad-
B: en cama de quién? –dijo casi en susurros-
S: cómo?
B: digo que por qué? Es decir que raro que aún trabaje hasta estas horas
S: es un nuevo proyecto, es por eso –dijo muy segura de sus palabras-
B: entiendo –dijo siendo interrumpida por el sonido de su celular- bueno San, tengo que irme –dijo acercándose para despedirse-
S: cuídate, nos vemos
La rubia se marchó con un montón de palabras atravesadas en su garganta, quería decirle tantas cosas a la morena pero entendía que a veces el silencio es el idioma perfecto.
L: hola Tiff –saludaba una desgastada chica de ojos verdes- sabía que regresarías pronto
T: se puede saber por qué demonios lo hiciste? –le gritó-
ESTÁS LEYENDO
Los años pasan, la gente cambia
Fiksi PenggemarBrittany regresa luego de 6 años a la vida de Santana, pero ahora la morena es feliz con alguien más. Los años pasan y la gente cambia, sólo las cosas verdaderas por más que pasen siglos permanecen en el mismo lugar, será que a pesar de todo el tiem...