Noche Nevada

Parte 1

El tiempo pasaba en Cloud Recesses donde los constantes entrenamientos y cacerías nocturnas se practicaban a diario y para cualquier situación, después de lo sucedido con la Secta Wen y Jin, el Lider Lan Qiren junto con sus sobrinos decidieron que para evitar que los sorprendieran con la guardia baja estarían mejor preparados esta vez. Mientras tanto la paz y la tranquilidad en Gusu era perceptible, las flores recibían el calor del sol, los arboles danzaban al compás del refrescante viento y desde sus ramas una que otra hoja caía dando a indicar que el invierno se aproximaba, aunque en este caso llego más pronto de lo esperado.

A pocos días, copos de nieve caían delicadamente cubriendo por completo el lugar, los discípulos sabían bien el que hacer en esta época fría. Más sin embargo, algo estaba fuera de lo normal y para el líder Lan era una premonición.

-mmm.- pensó a si mismo antes de tomar un sorbo de su te.

Justo entonces entro a la habitación el mayor de su sobrino. Lan XiChen, se detuvo un momento para hacer una reverencia.

-Tío, ¿Sucede algo?

-Los vientos son diferentes.- aguardo unos segundos observando el clima desde la ventana. El sol anunciaba su retirada y tal como dijo, el aire soplaba de manera violenta.

-Es verdad.- Concordó el primer jade.- Incluso se puede notar que cae más nieve de lo normal.

-Cancela la cacería de esta noche y diles a todos que permanezcan dentro de casa hasta el amanecer.- se levantó de su asiento caminando hacia la salida.- debemos repartir mantas y leña cuanto antes.

-Este invierno es mucho más intenso, ¿Debemos preocuparnos?- lo seguía desde atrás.

-No es para tanto, pero es mejor que nadie salga a menos que quieran congelarse.

Faltaban unas cuantas horas para el toque de queda, la mayoría de los habitantes del lugar ya se encontraban en sus respectivas habitaciones con frazadas extras y madera, los jóvenes pupilos iban de un lado a otro repartiendo los materiales y entre ellos estaba el joven HanGuang-Jun.

-¡Lan Zhan!

El joven Patriarca corrió hacia él, hace unos minutos se estaba preparando para darles una nueva enseñanza de combate a Lan SiZhui y a los otros chicos, pero repentinamente se pospuso para después. Fue entonces que buscaba por todas partes a su ojijade para saber el motivo.

-¡Lan Zhan! ¿Qué sucede?

-Una tormenta, habrá demasiada nieve y viento gélido.- se aproximó a tomar mantas y entregárselas a su ojigris.- Iré ver a A-Yuan, mientras ve a nuestra habitación. Espera ahí.

-Pero...

-No vayas a salir.

Asintió su pareja caminando hacia el cuarto del jade, mientras que este se dio la vuelta confiado en que le hiciera caso. De todos modos, a donde podría ir en estas circunstancias.

La noche cayó y justo a tiempo entro el jade a su habitación, las ventanas estaban cerradas pero se podía escuchar el rugido del aire azotando sin cesar. Supuso que Wei wing se había metido en la cama ya que se notaba un bulto oculto. Antes de querer llamarlo, Lan WangJi fue a calentar un poco de té para él y para el joven de túnicas negras tenía preparado un jarrón de sonrisa del emperador, deposito las bebidas en la mesita de centro y se acercó a despertar a su travieso compañero, no obstante fue cuando noto algo fuera de lo normal. Levanto la sabana encontrándose con varias almohadas fingiendo ser alguien dormido. Esto por un lado desconcertó al jade y por el otro comenzaba alarmarse, preguntándose, donde se podría encontrar su pareja. Guardando la calma se decía a si mismo que este se había ofrecido en ayudar a repartir materiales, es probable que esté a punto de llegar. A gusto con esa idea fue a sentarse a esperarlo mientras tomaba su té caliente.