JAYDEN Y MIA: UNA BELLA HISTORIA DE AMOR

Capítulo XVI

Narra Jayden

Luego que Mia se fuera me costó levantarme por los fuertes golpes que me dió, lo único que pude escuchar fue a Lili gritando por como Lauren la sacaba a la fuerza, Antonio y mi papá me fueron a ayudar a levantar, luego nos fuimos a la sala de juntas donde luego de curarme la nariz y darme una bolsa con hielo para ponermela en los pantalones, tuve que explicar que fue lo que ocurrió y por qué decidí hacerlo, claro, no me libré del sermón de mis padres.

-Santo Dios Jayden, no puedo creer que hicieras algo tan estúpido __ dijo mi mamá sin verme.

-Tu mamá tiene la razón hijo, ¿Por qué decidiste armar semejante mentira ante esa pobre muchacha, le rompiste el corazón, y además nos mentiste a nosotros.

-Es que solo quería encontrar a una mujer que me amara por quien soy y no por mi dinero.

-¿Entonces por qué dijiste todo eso sobre ella allí abajo? __ dijeron mis papás al unísono.

Tras explicar nuevamente todo mi "chistesito", después de unas horas dijeron que lo mejor sería que me alejara de la empresa por unos días y así pensara en lo que hice, como si fuera un maldito adolescente. Después quise irme a buscar a Mia para resolver el enorme problema que causé, Lauren me detuvo un momento solo para darme otro endemoniado sermón, obviamente la dejé hablando sola ya que no estoy de tan buen humor para hablar.
Decidí ir al departamento para hablar con ella. Me sorprendí al ver algo de mi ropa en un árbol y algo en el suelo, fue cuando decidí correr al departamento, pero cuando traté de abrir, el seguro estaba puesto, toqué varias veces ya que pensé que era lo más educado y más en estas circunstancias, pero al no recibir respuesta decidí abrir con mi llave ya que la había sacado del basurero y justo cuando estaba por meterla en la cerradura...

-Increíble que tenga el descaro de venir hasta acá señor Shiba.

Emily...

-No estoy de humor Emily.

-Ella no te va a abrir, así que deja de intentar.

-¿Tú qué sabes?,  mejor déjame en paz.

-Lo sé porque ella se fue.

-No importa, la esperaré, ¿Cuándo regresa?

-Nunca, es más, me dijo que te diera esto.

Me entregó la cajita con los aretes que le regalé el día de su graduación, el llavero que fabricó y una nota que me dispuse a leer.

Para ti:

Si no puse un nombre es porque ya no sé como llamarte, y además creo que ya no importa.
Cuando te escuché decir todo eso de mí y ver como te deshacías del llavero que te regalé, fue lo peor que me pudiste haber hecho, ya no quiero tener nada que me recuerde a ti. No me busques ni me esperes, nunca volveré a Panorama City.
Te odio y espero nunca más volverte a ver.

-Se lo advertí a Mia varias veces, sabía que tú no eras de fiar.

-¿Te dijo a donde se fue?

-No, y si me lo hubiera dicho no te lo diría, es más, ten lo que le regalaste a Serena, no queremos ni necesitamos nada que provenga de alguien como tú.

-Emily por favor... Sé que me equivoqué, pero quiero recuperar a Mia, tal vez le mentí sobre toda mi vida y quien soy, pero no sobre mis sentimientos.

-Lo siento, pero no sé nada, y por favor vete.

-Está bien, pero si hablas con ella, dile que... que estoy muy arrepentido.