• Capítulo 74 • ~Especial~

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Capítulo especial: La historia de Kagami.

Parte uno.

Sarutobi Amaterasu.

Un hombre de la tercera edad apareció repentinamente en el kotatsu dónde estaba sentada esperando a Kagami. Supuse que era el abuelo que estaba buscando —Hola—. me dijo risueño.

Tenía la misma actitud que Kagami, de modo neutral respondí de la misma forma —Hola—.

—Oh—; se impresionó que recalcó la Oh desde el fondo de su garganta —¿tu eres la novia de Kagami?—

—¡Eh!— exclamé con una media sonrisa combinada con una mueca —No, no se equivoca solo soy...— ¿era una amiga? No, el y yo ni nos acercamos a ser amigos. Busqué las palabras adecuadas para decirle que solo me había invitado a comer —soy una simple invitada de su nieto—.

—Ya veo—. cruzó de brazos, movió la cabeza asintiendo con los ojos cerrados, algo me decía que no me creía.

Deje caer levemente mis párpados, este hombre solo está confundiendo las cosas, si un suspiro pesado para sacar todo el estrés acumulado.

—Abuelo—. entró Kagami a la sala saludando feliz a su familiar y tomó asiento a su lado.

—Kagami has regresado muy pronto a casa—. le dijo. Ahora que me doy cuenta, esos dos se parecen mucho en su físico y personalidad.

El hombre se susurró a Kagami que por suerte si escuché —¿Quién la chica que trajiste a casa?—

—Ella es Hanako, la chica que estoy cuidando. Hoy la he invitado a comer a casa—. contestó.

Si era sincera me sentía rara estando entre estos dos hombres, sentía que era la única sin sentido del humor.

El viejo se subió arriba del kotatsu recargando su estómago en la tabla, cada vez me se acercaba más y más. Con la vista me miró de arriba y abajo, y con la mano en su mentón empezó a inspeccionarme —Está algo flácida pero promete dar buenos bisnietos—.

Su comentario hizo que todo mi cuerpo se tensará y se tornará blanco decepcionada, miré mis brazos que estaban más delgados de lo normal y eso era porque no he hecho misiones y eso hizo que descuidara mi físico.

—¡Abuelo!— exclamó Kagami más rojo que un tomate reprochando a su abuelo por decir eso. En ese entonces no había escuchado la parte donde mencionó a los bisnietos.

Kagami sonrojado y nervioso, yo decepcionada conmigo misma y el abuelo de Kagami llorando de la risa por nuestras reacciones que eran pura comedia para él.

...

Al joven Uchiha no le gustaba como el ambiente se volvió vergonzoso para ambos, su abuelo parecía que pronto moriría de la risa, sabía que le diría algo gracioso pero no pasó por su cabeza que mencionaría a los bisnietos.

Para él era imposible que eso sucediera, por qué eran jóvenes ni siquiera se acercaban a la palabra amigos aún, pero eso no lo hacía algo imposible. Ignorando las risas de su abuelo recobró sus parar.

—Iré a la tienda a comprar algunas cosas que me faltan para la comida, recordé que no tengo para ofrecerte de comer Hanako, espero que no te moleste—. rascó su nunca avergonzado. Abrió la puerta corrediza de papel y antes de salir —Mientras sigan hablando entre ustedes—. cerró levemente para salir de casa a hacer las compras.

El silencio de un secreto | Uchiha MadaraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora