1

5 0 0
                                    

Para poder entender a una persona se necesita ser realmente comprensivo con las cosas que ella siente o dice, jamás se le debe burlar o mucho menos compararla con tus problemas y decirle que no es la única que sufre, todos sufrimos por alguna razón, claramente la dificultad del problema nunca será la misma, unos serán mas fuertes que otros...

Así es como lo perdí a el, decidió partir porque nadie incluso yo, se daba cuenta de la grave forma en que se encontraba... Nunca le preguntábamos como estaba o como había amanecido, creíamos que el estaba bien, aparentaba ser alguien muy feliz y alegre pero nunca fue así. El mandaba señales de ayuda en sus comentarios, en pláticas, en todo mandaba señales sin embargo nadie se dió cuenta o se alarmo porque no había sangre, todos pensábamos que estaba bien...

El nos daba consejos de siempre ayudarnos entre todos emocionalmente y físicamente, nos decía que no debíamos de burlarnos de una persona que decía sentirse mal mentalmente y lo tomábamos a la ligera, el murió por nuestra culpa, lo termino todo porque no veía apoyo de nadie...

El decía en las noches que se sentía solo incluso durmiendo abrazados, teniéndome a su lado el sentía ese gran vacío. Ni las largas horas que la pasábamos juntos lograban calmar ese tormento, ni las largas noches de pasión calmaban ese monstruo que traía por dentro de él, lo daría todo por tenerlo aquí una vez más, poder besar su hermosa cara y calmarle esa tristeza que lo hacia sufrir siempre...

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 27, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Dear Donde viven las historias. Descúbrelo ahora