Edurne y el chico de su pasado.

Capitulo I "Reencuentro"

Estaba en casa con mi novio estábamos en el patio de atrás.

—Edurne quisieras salir se me ocurre un lugar antes de ir a la gala para distraernos un poco.
—Dijo mientras me abrazaba de la cintura.

—Está bien.—Después le di un beso.

Entramos a la casa y nos cambiamos para salir. Yo ya estaba lista lo estaba esperando sentada en la sala cuando unos minutos después lo escuche bajar las escaleras. Nos dirigimos al auto Dahak manejo.

Vi un carro que nos seguía no me pareció raro de seguro eran fotógrafos y periodistas en busca de información.
Llegamos a un aparcamiento dejamos el auto en ese lugar, pero el carro que nos seguí no entro así que supuse que se dirigía a otra parte.

Dahak me llevo a un parque que estaba cerca del aparcamiento y hay avía una floristería y me dijo que si quería una flor le dije que si compramos unas eran muy bonitas.

Alcance a ver una persona que vestía elegante me quede extrañada porque no avía ningún evento cerca además iba con guardaespaldas.

No le preste mucha atención Dahak y yo seguíamos caminando en el parque y lo volví a ver me estaba mirando, mas no le puse mucha atención pensé que podría llegar a ser un periodista intentando pasar desapercibido.

—Edurne creo que será mejor que regresemos tenemos que cambiarnos para ir a la gala.

—Si tienes razón ya son las 7:28.—Nos dimos un beso en ese momento vi que la misma persona se me quedó viendo y le susurro algo en el oído a su guardaespaldas, se levantó de la banca y se marchó.

Dahak y yo regresamos al aparcamiento y volvimos a casa. Nos cambiamos y nos fuimos a la gala cuando estábamos llegando al sitio, había un auto negro polarizado del cual se estaba bajando la misma persona que estaba en el parque.

El carro avanzo para que en el que veníamos pudiera avanzar, él se quedó parado esperando al ras de la entrada, el carro que veníamos avanzó. Él se acercó y abrió la puerta.

—¿Me permite ayudarle?

—Gracias.

—Es un placer.

Mientras tanto yo ya estaba parada en la alfombra y Dahak nunca llegaba dijo que iría a dejar algo en el carro, pero ya no volvió y ya iba hacer la apertura. Él se me acercó.

—¿Se siente mal? la veo alterada si gusta mis guardaespaldas la pueden llevar a su casa.—Le dije mientras los señalaba.

—No, gracias lo que pasa es que mi novio no aparece y ya empezara la gala.

—Así que el Sr. Benítez le Planto.

—¿Por qué dice eso, usted como lo sabe? y ¿Quién es?, ¿por qué nos ha estado persiguiendo?

—En cuanto a su primera pregunta mis guardaespaldas lo vieron salir con una mujer agarrados de la mano.
Su segunda pregunta tendrá que esperar para saberlo.
Y la tercera no los he estado persiguiendo la he perseguido a usted que es muy distinto.

—Y ¿sabe quién era la mujer?

—No, lo lamento.

—Y dígame ¿dónde está su acompañante? (Algo en el me parecía conocido, tenía la sensación como si lo conociera de años).

—No tengo acompañante y al parecer usted tampoco.—Le dije con un tanto de picardía.

—¿Y usted que sugiere?—Le mencioné sabiendo adonde quería llegar, pero quería ver su reacción.