¿Cómo pasó? ||Chiffon x Cream pie [¿Cancelada?]

Capitulo 3: No hay Cream Pie

Capitulo 3 de este fanfic, ya saben, muchas gracias por la paciencia en las actualizaciones que no son muchas (lamentablemente) pero yo lo actualizo cuando puedo, no se preocupen. Espero que disfrutes de la lectura.

Japón, un país lleno de guardias y policías por todos lados, teniendo diferentes métodos para promover la justicia en las diferentes zonas, principalmente enseñándole a los niños que deben seguir las reglas para así intentar minimizar la violencia y crimenes brutales que recorren secretamente en las calles, ya que Japón no es solo un país lleno de seguridad si no que a diferencia de los otros países, su otra cara es muy retorcida, siendo hogar de negocios del mercado negro tanto como japonés como mundial.

Venta de drogas, venta de armas, venta de personas, gente ofreciendo maldecir a quienes les haya hecho daño para hacerlos sufrir, porno infantil de niños reales, e incluso sicarios van ahí para ofrecer sus servicios de matanza. Sin dudas, otro mundo completamente diferente y más horrible de lo que uno puede soportar.

No solo el crimen está en las sombras, puede estar debajo de una fachada moderna, como en cierto edificio de una compañía para reptiles. ¿Que tiene ese edificio? Pues aparenta ser un lugar donde los cosméticos de belleza son creados de una forma normal y legal, solo cremas para las pieles cuando en realidad, hacen experimentos que llegan más allá de un simple cosmético de belleza. Usan específicamente mamiferos peludos, conocidos como "furries" (Aquí furries es racista) para buscar la fórmula que creara una droga que haría a quien la consumiera alguien invencible tanto físicamente como mentalmente, sin emociones ni empatía pero poderoso como la naturaleza

Este negocio oculto era financiado por la Yakuza, buscando la solución que hará que sus hombres sean fuertes e invencibles, también la venderían a políticos corruptos, gobiernos dictatorios, líderes capaces de hacer lo que sea solo por el poder y para hacer cosas beneficiosas para quienes puedan pagar una suma grande de dinero en todo el mundo aún que claro, hubieran hecho eso sí ya la hubieran encontrado

Solo pudieron lograrlo una vez pero no lo consiguieron repetir todavía, solo existe un espécimen que tiene esa deformación brutal en su ADN

Chiffon, Un empleado fiel de la empresa, poseía ese poder, ese cambio monecular en su sistema físico y neuronal. Debido a eso, a pasado toda su vida en este negocio, obligado a siempre elegir el trabajo más que su propia familia por lo tanto, nunca tuvo una vida normal y no sabe que como sería tenerla pero piensa solo en una cosa, sería muy aburrida. No solo cree eso por su empleo si no que también porque ya no estaba hecho para escoger eso, lo habían convertido en un mounstro.

Pero al menos se entretenía, controlar a los empleados en el laboratorio era una tarea sencilla y si no fuera por su gusto al acto de asesinar, sería un animal que busca de paz para disfrutar de algo pacífico apesar de estar modificado para ser una criatura para provocar discordia.

Todo típico en su trabajo, intentar que el furro sin estómago no escapara era bastante fácil, tomando en cuenta que de hecho el ajolote usaba sus habilidades mounstrosas así que tenía más ventaja.

De nuevo, otro intento de escape por parte del mismo animal. Corriendo lo mas veloz que podía en sus cuatro patas por los pasillos grises del lugar, solo corría sin mirar atrás, siempre adelante, esquivando con gran asaña a los guardias fornidos que intentaban detenerlo, muy rápido y sencillo, solo faltaba encontrar una salida y listo, mi libertad garantizada, su cruda pesadilla podría terminarse para siempre o eso pensaba la ingenua criatura. Un tentáculo rosado apareció de la nada y le agarró firmemente una de sus patas peludas, sintiendo un escalofrío recorrer por lo que quedaba de su cuerpo

—No— Dijo en susurro de miedo

—¡NO!— Gritó frustrado el mismo ser

Una puerta gris estaba en ante el, la salida de aquel infierno gris, estuvo tan cerca esa vez, no podía creer que había llegado tan lejos y ahora su esperanza de volver a casa era nula. Al sentir como ese tentáculo tan familiar quiera arrastrarlo hacia atrás, clavó sus garras en el duro y resbaloso suelo grisaceo pero fue en vano total, porque apesar de poner todas sus fuerzas en sus uñas, fue tragado por el tentáculo