La joven miro al más alto para que esté continuará con lo que tenía que decir, mientras tanto el buscaba la forma adecuada de sincerarse con ella ya que no sabía cómo hablar el tema.- verás... Tu madre no se encuentra nada bien desde que te fuiste o mejor dicho desde que te aleje de ella- Pensó que lo mejor sería ser sincero e ir directo al grano con el asunto.
- ¿a que te refieres con que no se encuentra nada bien?- a ella no le gustaba el rumbo de la conversación.
- ella está demasiado triste y ahora a dejado de lado su labor como diosa, a causa de esto el Reino humano perecerá ante un duro invierno-
Persefone se sintió culpable, pues ella desde que había encontrado su felicidad junto a él rey del inframundo, ni siquiera se molestó en pensar lo mal que se la estaba pasando su madre pues a pesar de que la extrañaba le era difícil regresar y abandonar el que ahora era su nuevo hogar.
El silencio de Persefone estaba haciendo realidad los miedos de el rey del inframundo, nunca se había sentido así de inseguro en toda su vida, pero después de todo desde la llegada de Persefone a su vida todo había sido diferente ya que el había experimentado sentimientos y sensaciones nuevas desde que ella llegó ahora el no era el mismo pues ahora conocía el sentimiento más puro y el que realmente no entendió asta sentirlo y ese era el amor.
Pues el en su pasado solitario no creía necesitar ninguna compañía en ese lugar lleno de muerte y desesperación, además de que ¿quien querría estar en un lugar como ese?, Otra razón para querer más a Persefone fue que ella aprendió a ser feliz en aquel lugar y hacerlo feliz a el ante sus ojos no había persona más perfecta para ser la reina del inframundo y también su reina.
-...- silencio por parte de la joven que en realidad no sabía que decir estaba triste se sentía culpable y a la vez tenia miedo pues sabía que era lo que le esperaba al mundo humano, viniendo a su mente aquel bosque donde pasó la mayo parte de su vida hasta ahora y en qué sucedería con todos los animales y las plantas además de los humanos aquellos seres que nunca conoció en persona ya que su madre no lo permitió.
De repente miro a Hades encontrándose con esa fría y dura mirada que solo se suavizaba con ella y vio el temor en los ojos del rey y entendió los pensamientos que rondaban su cabeza "y si me abandona" no quería hacer lo pero era necesario y claro que extrañaba a su madre y su antigua vida, no podía ignorar el dolor que sentía su madre por perderla.
Ella solo pensó una cosa y esa fue lanzarse a los brazos del más alto y abrazarlo con todas sus fuerzas ella solo quería aliviar su miedo de que ella se iría y lo olvidaría simplemente, pero también transmitirle lo que ambos sabían que debía de ocurrir.
-Tu y yo no podemos seguir juntos no si el Reino humano desaparece por nuestra culpa- dijo la joven con mucho pesar le costaba demasiado pronunciar esas palabras, pero aun por un momento se permitió ser egoísta y pensar en que realmente no le importaba nada mientras estuvieran juntos, pero la situación no podía ser ignorada por mas tiempo.
Ambos en un fuerte y duradero abrazo sabían lo que les esperaba su último día juntos...
Hades la miro y solo asintió la decisión estaba echa mucho antes de que ambos lo pensaran y Disfrutarían al máximo sus últimos momentos pues el suyo no era un amor pasajero si no un amor verdadero y leal. Ambos se separaron un poco del abrazo y se miraron por unos segundos para darse un profundo beso lleno de amor y en ese momento un canino gigantesco se hacerco a ellos como si supiera la situación y no pudo aguantar restregar una de sus tres cabezas el ellos y más específicamente en Persefone dando le a entender que también la extrañaría a lo cual la joven no logro aguantar más y solto las lágrimas que llevaba aguantando desde que comenzó el abrazo con Hades, lloro en silencio con la cabeza pegada al hombro del mayor y acariciando con una mano a cerbero que se mantenía a su lado.
Después de aquella escena Persefone y Hades estuvieron el resto del día juntos; mientras Hades estaba perdido en sus pensamientos y Persefone disfrutaba de su compañía se quedó dormida abrazada a el y recostada sobre su pecho, Hades se dio cuenta un poco después, pues su tranquilidad respiración la delató el decidió dejarla descansar mientras el atendía algunos asuntos.
Salió de la habitación dispuesto a ir aún mejor lugar para pensar realmente no tenía ningún asunto importante que debiera solucionar ya que no había grandes cosas que hacer en el inframundo más que ver el sufrimiento de los humanos así que Hades se dio el lujo de pensar en una cosa que le había venido a la mente.
Y al pasar por un gran pasillo en uno de los grabados de la paredes junto a las estatuas y una grandes columnas que decoraban el lugar se dio cuenta, ahí se encontraba en su solución.
Quien diría que una simple fruta para los humanos sería la semilla del inframundo que traería de vuelta a Persefone con el rey Hades.
Aquello que adornaba era el grabado de una granada y Sun pepitas brillaban como rubíes con un rojo intenso.
Hades la miro por un momento y camino perdiéndose en el largo pasillo y a su vez en la obscuridad que reinaba en este.
Mi Persefone tu eres y seras la única reina de mi corazón, el último susurró que se escuchó en aquel pasillo seguido por un silencio sepulcral.
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Hola :DSe que me tarde mucho y el capítulo no están largo, pero aquí está y espero les guste ^-^
Ya que este es el penúltimo capítulo.
Seeeeeee lo sé que la historia es muy corta pero no c me dan las historias largas.
Sin más bye
Nos vemos en el final de esta historia :v/
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entre la vida y la muerte.
Romansabasada en la leyenda de Deméter y las estaciones. El rey del Inframundo descubre sus sentimientos por la joven Perséfone, la joven relatará como fue su vida después de el raptó de Hades, y poco a poco descubriendo sentimientos hacia el rey del Infra...