❮Solo un iluso❯ Fell!Poth

Capítulo 16

Hoy era el día.

Antes de ir al aeropuerto fue a su casa para despedirse.

Sus hermanos de alguna manera no querían que se fuera, mas él se encargó hacerles saber que esto iba a pasar en cualquier momento, no podía estar para cuidarlos para siempre. Aunque él mismo sabía lo que es querer huir de esta casa, de sus padres.

—Qué te vaya bien, Lotus —Recibió un abrazo de parte de su madre, podía sentir lo frío que era con su acción y palabras.

—Está bien.

Nunca tuvo una buena relación con el de bufanda roja, recordaba mucho los golpes, los gritos y su mirada furiosa hacia él.

Con el tiempo se fue acostumbrando y era más fácil mantener su amistad con Rurik cuando eran pequeños.

—No les vayas a hacer daño a Raven o a Shino —Le susurró al mayor antes de separarse.

Tomó sus maletas y salió por fin de su "hogar".

También pasó por aquella casa donde vivió los momentos más bonitos y a la horribles de su vida.

La observó por última vez y suspiró antes de pedir a un taxi y subir a éste.

...

Hoy era el día.

Y sabía que todo estaba arruinado.

No podía hacer absolutamente nada, ni hablando con Lotus podría arreglar lo que ha hecho estos meses.

Ha cometido un error tras otro.

Por eso los que ha conocido se han ido, dejándolo atrás, ahora está sumido en la profunda y oscura soledad que el mismo se la ha ganado.

Lotus era el único que se había quedado estos años con él, Lotus creía que podía ser alguien mejor, Lotus fue el que le tendió la mano cuando lo necesitaba...

Al final terminó lástimandolo y no podía retroceder el tiempo para cambiar eso.

Con lo que le quedaba de fuerzas se dirigió al aeropuerto.

...

Mucha gente caminaba sin parar de un lado para otro.

Y él aunque no sabía dónde iba, solo tenía algo en su mente.

Era...

—¡Lotus!

El mencionado se quedó estático al escuchar la voz del menor y volteó hacia donde estaba el de gorra.

En unos segundos, ellos se encontraban delante del otro.

—Vaya... —Miró al más alto sorprendido— ¿Cómo me encontraste?

—No te hagas el idiota ahora —Le enseñó el mensaje que le había mandado el contrario, ahí estaba escrito el día en el cual se iría además de la hora y el lugar.

—No creía que ibas a venir —Soltó una risa leve— Veo que estás más calmado desde ese día en el hospital.

—Me lo ocultaste... ¿Por cuánto tiempo?

—Casi tres meses —Desvió la mirada.

—¿En serio cómo lo ocultaste?

—Para mi suerte no era muy notable, tonto.

Pronto Lotus escuchó por el altavoz que su avión ya saldría.

—Me tengo que ir —Se alejó del contrario.

—¿No puedo hacer nada para detenerte, verdad?

—Ya tomé mi decisión, Rurik.

—Lo sé, solo...

—Quizás nos volvamos a ver dentro de unos años y ya no seamos los mismos de ahora, o simplemente nos olvidaremos de esto... —Se volteó dando la espalda al menor— Adiós.

Esta vez había perdido a Lotus para siempre.

Aún cuando el avión ya se había despegado, él siguió mirando hacia el cielo.

—¿Me pregunto qué hare sin ti, Lotus? —Nunca lo habría admitido antes pero lo necesitaba tanto, las lágrimas que caían sin control lo demostraban.

Ya es tarde.