~Secret~(❤️Creek❤️)

#4

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--Craig Tucker...

--Me gusta tú nombre, es muy lindo...-- halagó Tweek con un leve sonrojo en sus mejillas, mientras tomaba la copa de Craig y continúaba bebiendo la verdad era que tomaba por los nervios, con cada sorbo dado al alcohol sentía su cuerpo más tranquilo y hablaba con más facilidad.

--Gracias, tú nombre es muy único, nunca lo había escuchado...-- agradeció el azabache con una mirada perdida y observando aquellos ojos levemente cerrados... Parecía estar ya ebrio...

El blondo continuó tomando y hablando más cosas con el azabache, mientras los minutos pasaban y ya llevaban platicando más de media hora. Claro que pararon las palabras y prosiguieron a ciertos toques leves y miradas. Cada vez que Tweek se reía tontamente por los efectos del alcohol y apoyaba su frente con la de Craig, éste no podía evitar mirar aquellos labios tan suaves y deseosos... Ademas de esos ojos...

--S-sabes, m-me agradaste mucho, e-eres tan caballeroso y me g-gustó hablarte.. me cuesta un poco hablar con otras personas-- confesó Tweek en un suspiro y deslizando con delicadeza sus manos por el abrigo de Craig, observaba con detalle los hombros de éste, hasta deslizar sus dedos por la clavícula, y para finalizar con un abrazo en su cuello, acercando ligeramente sus labios con los del contrario, rozando con delicadeza las puntas de su narices.

--T-tú también... Me agradaste mucho...-- respondió el azabache avergonzado en un suspiro y observando detalladamente los movimientos tan lujuriosos del rubio; cada vez que aquellos labios estaban a centímetros de los suyos no podía evitar en acercarse de una maldita vez y por fin besarlos, pero el rubio tenía cierto juego sucio ya que cada vez que Craig se acercaba lo suficiente, Tweek reía con dulzura y se apartaba de inmediato, casi jugando con el azabache. Después de un rato de juegos así, Tweek tapó por completo los labios de Craig y lo miraba directo a los ojos.

--P-podriamos ir a un lugar m-más privado...-- pidió el blondo, con pena yaque había mucha gente a su alrededor aunque el lugar era oscuro y casi no se veían, Igualmente le daba mucha pena. Craig observó de reojo a Clyde y éste estaba completamente dormido en los asientos de la mesa, por suerte eran muy cómodos y grandes. Terminó accediendo y Tweek de inmediato tomó su mano, mientras camino unos cuantos pasos hasta llegar a un pequeño cuarto.

--U-uh...yo estoy un poco nervioso...-- Confesó el blondo al abrir la puerta y volteando su mirada para ver a Craig, quien le sonrió con dulzura y acariciando su mejilla tranquilizó.

--No te preocupes, yo... Creo... Uhm... Podríamos parar si quieres, de hecho creo que sí deberíamos-- dijo no muy convencido, no negaría que también estaba ciertamente nervioso, viendo como el rubio se encogia de hombros, mientras volvía a deslizar sus manos por sus hombros hasta llegar a su cuello y lo atraía en un abrazo, mirándolo atentamente, Craig enserio quería almenos besarlo...-- ¿Podría... Besarte?...

--Adelante-- permitió Tweek con una sonrisa dulce y atrayendo ligeramente los labios del contrario, Craig no dudó ni dos segundos cuando deslizó sus manos por la cintura del blondo, atrayendolo en un abrazo para finalizar con un beso lento y profundo en los labios agenos. Tweek simplemente se dejaba llevar por aquel beso, mientras aplicaba movimientos suaves y un poco rápidos a la vez, el beso se subía más de tono y los suspiros en ambos no tardaron en aparecer, además de sentir como sus cuerpos subían la temperatura.

--Uhmg, C-Craig...-- uno que otro suspiro gustoso se escapaba de los labios del rubio, mientras eran silenciados de inmediato por los cálidos besos del contrario, las manos del azabache se deslizaban por debajo de la camisa del blondo, acariciaba su piel con suavidad y deseo de sentirlo más, además de escucharlo, le encantaba la manera en la que decía su nombre... Una mano por parte del azabache se deslizaba en las piernas del contrario hasta no evitar más y subirla a su cintura, Tweek de inmediato entrelazó sus piernas a la cintura de Craig. Éste no tardó en dirigirse hasta la cama entre besos y jadeos para después sentarse y dejar a Tweek sentado en sus piernas, mientras continúaban profundizandose en aquel beso tan satisfactorio para ambos, el azabache continuó bajando los besos por el cuello del blondo, dando pequeñas lamidas y mordidas a la vez. Era realmente genial...