Las calles de New York se encontraban cubiertas de nieve, personas iban y venían por las aceras encontrando los adornos y regalos perfectos para navidad.
El pequeño ojiazul veía desde la ventana de su departamento, se encontraba en su habitación favorita: el estudio; pequeños vasos con pinceles aquí y allá, cajas con colores, acuarelas y pinturas, era su espacio, el lugar en el que se sentía felizEl timbre fue tocado con insistencia y Louis se levantó para abrir, sabía quién era y en efecto del otro lado de la puerta de encontraba Nicholas su apuesto prometido, se lanzó a sus brazos llenando su rostros de besos, Nic le correspondió con un dulce beso en los labios, tomándolo por la cintura para apartarlo y entrar al departamento
-¿Que tal tu día?- pregunto Nic al tiempo que dejaba el portafolio en la mesa de noche y comenzaba a sacar papeles -espero estés emocionado por el viaje-
Nicholas a diferencia de Louis era una persona de negocios, su vida giraba en torno a las finanzas, tenía un ritmo de vida apresurado y pocas veces disfrutaba de los pequeño momentos de la vida.
-si, estoy emocionado- dijo el ojiazul al tiempo que se sentaba a su lado - he pasado el día pintando las calles nevadas, son preciosas sabes, es difícil crear reflejos en la nieve y obtener la textura pero, vale tanto la pena- contaba el pequeño con emoción- ¿Quieres ver cómo ha quedado?- pero Nic no parecía estarle prestando atención- Nic, Nic-
-si, si cariño maravilloso- el rubio mantenía su mirada en el teléfono, con el ceño fruncido, Louis solo suspiro y se dirigió a la cocina por una taza de café y otra de chocolate
•••
17 de dic.Esa mañana el ojiazul había tenido que levantarse temprano y prepararse para el viaje en menos de dos horas, pues el día anterior no lo había hecho ya que había pasado el día haciendo un cuadro para su futura suegra. Estaba a una hora de tomar el vuelo que le llevaría a Holmes Chapel, Londres, donde conocería finalmente a la familia de su prometido.
-Louis, anda que se nos hará tarde, te dije que no llevarás tanto equipaje puedo comprarte lo que sea allá- dijo Nic al tiempo que metía las maletas al taxi y se adentraba en este
- llevo un pequeño caballete y pinturas, me encantaría compartir un poco de mi pasatiempo con tu madre-
-me temo cariño que mi madre tiene un concepto distinto de arte-
-¿Crees que les agrade?- oh aquella pregunta había estado torturandole toda la mañana
-claro...- el molesto sonido del teléfono una vez más -espera un momento- dijo al momento que atendía -¿Que?...si entiendo...¿Cuánto tiempo?...imposible...da igual lo haré yo mismo-
El ojiazul escuchaba atentamente la conversación, pues presentía que algo no tan bueno significaba
-¿Que sucede?- pregunto apenas colgó
-me temo que tendrás que viajar solo, ha surgido un imprevisto en la empresa y tengo que resolverlo, dame tu telefono- Louis lo hizo y rápidamente el rubio tecleo algo -bien, ahí está la dirección, toma el vuelo, nos veremos allá-
Sin mas pidió al chófer que parara y bajo, dejando con la palabra a un sumamente nervioso Louis
•••
Llegó al aeropuerto, hizo los trámites correspondientes y se dispuso a abordar, como era de esperarse el asiento a su lado se encontraba vacío puesto que Nic no estaría, claro que esté no tardó en ser ocupado por un apresurado rizado que parecía haber estado corriendo.
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One Shots // Larry Stylinson
RomanceHistorias cortas sobre el romance Larry Stylinson...disfruten