Te Recordaré |Venganza Y Avaricia: Dos Cosas Que No Deben Juntarse| (LIBRO 1)

7. La Desaparecida

Coloqué mi mano en la mejilla que había sido brutalmente golpeada y la masajeé con delicadeza.

-Eres un puto imbécil-Escupió ella limpiando las lágrimas de sus mejillas nuevamente con brusquedad.

-A mi también me agrada volver a verte-Murmuré en un quejido con cierta ironía.

-Mira, Jackson. Justo ahora no te conviene hablarme con ironía-Amenazó-¿Se puede saber por que mierda no me respondes los mensajes ni las llamadas? ¡Joder, no entiendes que esto es algo grave!

-¿Qué es grave...?-Pregunté y luego sentí como empezaba a tensarme.

Ella murmura unas cosas que son inaudibles para mi, luego suspira y vuelve a centrar su atención en mi-Kristal esta desaparecida-Dice sin anestesia, yo la observé sin transmitir algún tipo de expresión, suspiró-Yo se que de un tiempo para acá las cosas no han ido muy bien entre ustedes, pero, eres la única persona en la que puedo confiar, y se que me ayudarás a encontrarla-Agrega, escuché como su voz se quiebra-¿Cierto?

-P-Por su puesto-Afirmé con la voz temblorosa y le di una leve sonrisa-Puedes contar conmigo—Me sentí terrible al decir eso, sabiendo que Kristal estaba...

Ella sonrió con tristeza y luego me abrazó con fuerza-No sabes cuanto la extraño...-Murmuró en un hilo de voz y entierró la cabeza en mi pecho para sollozar, mi estómago se revolvió con culpa, pero me limité a consolarla en silencio.

Kristal Derricks

Observé todo lo que ocurría desde mi puesto, y sinceramente no me importaba.

Tenía mejores cosas que hacer, como por ejemplo, seguir comiendo mi helado que ya estaba empezando a derretirse en mi mano, y el de Jackson ni se diga.

-Rayos...-Miré ambos helados una y otra vez, me pregunté como sabrá el de Jackson, una sonrisa malvada apareció y le di una mirada rápida, él esta muy concentrado consolando a aquella chica así que, no creo que le importe que le de una pequeña probada...

Luego de cometer aquel acto vandálico hice una mueca. Pues no me gusta tanto el sabor pero tengo que admitir que tan malo no esta.

Y cambiando de tema, esta ropa deportiva ya me estaba molestando, y se me estaba haciendo un poco incómodo comer lo poco que quedaba de mi helado, porque digamos que mi cabello esta empezando a desordenarse y mis manos están llenas de aquel dulce pegajoso.

-¿Será qué lo llamo y nos vamos?-Murmuré para mi misma, luego hice una mueca-¿Y si me voy sola y ya?-Pensé por un momento-Sí, eso haré.

Jackson Coleman

-¿Ya estás mas tranquila?-Le pregunté cuando dejó de abrazarme.

-Sí, ya me siento mejor-Afirmó dándome una sonrisa débil.

-Okey, eso me tranquiliza un poco-Suspiré- Ahora escúchame, deja de desvelarte y de andar por las calles deambulando, puede pasarte algo malo y no me lo perdonaría nunca. La buscaremos juntos, sí?-Ella soltó un "Vale" y yo asentí-¿Tu hermano sabe sobre esto?

-Casi...-Dice con nerviosismo y desvía la mirada. Tragué saliva, cuando pensé en responderle, volteé detrás mío por instinto.