𝘓𝘖𝘝𝘌 𝘊𝘖𝘓𝘖𝘙𝘚 ➳ liu yangyang «¡! rewriting !¡»

00: Liu Yangyang

Había algo de él que me hacía no querer quitar la mirada de su persona.

Quizás era su sonrisa tan resplandeciente mientras Donghyuck y Renjun le contaban algo que parecia realmente gracioso.

Su mirada tan llena de luz y felicidad mientras el resplandor del sol lo rodeaba desde la ventana del aula.

Su risa tan estruendosa y los golpes a su mesa, acompañado de sus amigos, parecían divertirse a lo grande realmente.

O tal vez era el hecho de que estuvo copiando mis respuestas en el examen.

Si, definitivamente es eso.

ㅡMíralo, tan tranquilo y quitado de la pena después de haberme copiado todo el examen. Oish, mocoso desvergonzado. ㅡ siseo estrujando una hoja recién arrancada de mi cuaderno entre mis manos.

Jaemin suspira al tiempo que pasa su dedo pulgar por mi entrecejo, sobando aquella zona.

ㅡSe te harán arrugas más rápido. Además, ¿qué importa? ¿acaso tú nunca copiaste? ㅡ se recuesta sobre la mesa, adormilado.

Na Jaemin, quince años, el hijo mayor de 5 hermanos en la familia Na. Es mi mejor amigo desde el jardín de niños, realmente la personificación de la pereza, durmiendo en todas partes mientras pueda, a decir verdad, no sé cómo se ha mantenido en el cuadro de honor desde hace 4 años.

ㅡ¿Luzco como alguien que copie en un examen? ¡Por supuesto que no! ㅡ exclame ofendida ㅡ En todo caso, ese mocoso y yo no somos amigos, si hubiese sido Seungmin, Hyunjin o incluso Jeongin, claro que les dejo copiar aunque sea diez incisos, ¡no todo el examen! ㅡ lanzo la, ahora, bola de papel a su rostro y se queja mientras se endereza para volver a acostarse, pero ahora sobre mi regazo.

Tomo mi examen entre mis manos sintiendo mi sangre hervir al escuchar aquellas risas al fondo del aula.

A+1 ¡Sobresaliente!

Esta escrito con un color rojo en la orilla de la hoja.

Estaría feliz por ello de no ser porque Liu Yangyang seguramente también tenía un sobresaliente.

Y entonces, después de pensarlo mucho, decidí hacer lo que Jaemin me dijo, no darle importancia.

Tal vez solo era cosa de una vez, tal vez no pudo estudiar pero necesitaba una calificación aprobatoria, tal vez, tal vez, tal vez...

¡Pero no!

¡Siguió haciéndolo hasta que la temporada de exámenes terminó!

¡Y ni siquiera daba las gracias o me halagaba por mis brillantes calificaciones!
De un momento a otro, las calificaciones de Liu Yangyang habían pasado de 45/100 a 90/100.

¡Y nadie lo entendía! ¡Nadie entendía que había estado copiando mis respuestas en cualquier examen!

¡Lo volvieron sub-delegado de nuestra clase! ¡Ganaba puntos extras en exámenes sorpresas! ¡Se había vuelto un cerebrito impostor!

Y él vivía en su regocijo por ello, agradeciendo halagos, aceptando puntos, siendo sub-delegado.

Pero gracias a la obra divina y justo como la canción de Taylor Swift, a todos les llega su Karma y el suyo fue cuando a todos los delegados y sub-delegados de cuarto año en adelante nos tocó hacer tutorías de nuestro campo a los primeros años.

En este caso, la materia que mejor se me daba eran las matemáticas, ¿adivinan a quién 'también'?

Exacto.

Liu Yangyang.