¿Agente Giotto acepta esta misión de rescate?

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vongolaprimo20 dedicado a su persona por darle un gran apoyo a mi pequeña obra.💖💖¡Espero que le guste!
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Puede que para muchos esto sea complicado... pero no tenemos de otra.

Si no quieres morir, te aconsejo alejarte de esta oscuridad y este silencio que nos estan consumiendo.

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-¿Qué es lo que tenemos asta el momento Elena?.

-Me temo que no mucho... lo poco de información que conseguimos... es prácticamente inservible.

-Yo decido si es inservible o no esa información. Ahora dime que consiguieron.

-Ah... bien. ¿Recuerdas al Noveno Vongola?.

-Si...

-Bien, resulta que el Noveno a mandado a un Hitman, para que entrenará a su nuevo susesor, para ser más específicos a mandado a Reborn.

-El viejo mando a Reborn... Dios, pobre Décimo...-susurró tan bajito el de cabellos dorados que su compañera no lo escucho.

-También, nuestros informantes no han dicho que el Décimo ya tiene familia, no sabemos cuántos miembros son... pero no es nada, no comparado con lo otro.

-¿Lo otro?

-Ahh si... el Noveno y Reborn nos han informado, que en múltiples ocasiones han atentado contra la vida de él Décimo Vongola.

-¡¿Qué, cuando planeaban decírmelo?!-bramo enfadado por tal barbaridad, soltando feromonas que alteraron a Elena.

-Giotto... sabes que no está permitido dar esta información, en especial a ti que le tienes un gran apego a los Vongola.-decido hablar, ya que su amigo se estaba desquitando con Elena, quien sólo cumplía con su deber.

-¡Tú no te metas G!.

-Vez.. por eso el Noveno no te dice nada, princesita-molesto Xanxus, logrando enfadar aún más, de lo que ya estaba a Giotto.

Antes de que se supieran a pelear una bebé peli-morada entró por la puerta, dejando a todos atónitos. Ya que si uno de esos bebés estaba hay, significaba dos cosas, hay problemas o... el Noveno los necesita. Aunque en esta situación es más probable que sean ambas.

-¿Qué haces aquí bebé Viper?-Pregunto curioso Giotto, olvidando así su enojo.

-¿Cuántas veces te tengo que decir que no me llames así Primo Vongola?.

-¿Primo Vongola?...-susurraron todos los subordinados incluyendo a Basil quien a estado callado asta el momento. Observaron todos a Viper asombrados por sus palabras.

-Tsh... bien, ahora. ¿Qué haces aquí?, ¿Qué a pasado?.

Ambos iniciaron una conversación olvidándose del resto de personas presentos, sin embargo en un punto de la conversación, Viper exigió que todos a excepción de Giotto salieran de al alcoba.

Y así fue como ambos pasaron toda la tarde conversando en la privacidad de la oficina de Giotto. Cabe decir que no fueron espiado por ningún subordinado ya que la alcova donde se encontraban era polarizada.