My best friend Rocky

Cap 23

Si termine riendo, pero luego lloré descontroladamente.

—No me voy a mover de aquí Franks. —Dijo tras la puerta.

—Es mejor que te vayas. —Solloce.

—Hola debes ser Ross. —Se escuchó la voz de mi madre. Carajo.

—Así es un gusto señora Franks.

—¿Está Keyla?

—Si, pero no me quiere ver.

—Sigue molesta, pero aquí entre nos, ella sigue estando loca por ti.

—Eso me alivia.

—Keyla abre la puerta. —Tocó mi mamá.

—Solo te dejaré pasar a ti, a él jamás.

—Vamos, lo extrañas, solo habla con él y ya.

—5 minutos Ross Lynch. —Abrí la puerta.

—Los dejo, tu padre no tarda en pasar para ir a comer. —Dijo mi mamá, para luego entrar y cerrar la puerta.

—Te escucho Lynch. —Dije seca.

—Solo quiero recuperarte, recuperarlas.

—¿Por qué huyes?

—Soy un cobarde inmaduro.

—Sigues siendo.

—Bueno lo era, hasta que me decidí por ti, por ustedes...

—Aún no puedo Ross, perdón.

—¿Nos podemos ver esta noche a la orilla del mar?

—No prometo nada, adiós. —Cerré la puerta.

—Hija no te puedes hacer tanto la difícil, se nota que esta luchando por ti, buscarte hasta acá...

—Solo estamos en Florida, ni que me haya ido a la luna.

—Solo toma en cuenta lo que te digo, se va a cansar es el padre de la niña, tendras qué seguirlo viendo por ella.

—Ok, te haré caso, esta noche... Es que no. Seis meses dejarme así y de repente aparece pidiendo una oportunidad no es justo.

—No todo debe ser justo en esta vida, cariño tú lo amas, y lo extrañas aun más.

—Tomaré una ducha, tengo que pensar.

—Ok.

El agua caliente recorría mi piel y lo único que quería era quedarme ahí...

____/_________

—Pensé que no vendrías... —Dijo Ross.

—Pues aquí estoy. —Dije.

—Esto es para ti. —Me entrego una rosa roja.

—Gracias.

—¿Y bien que haz pensado?

—Impresioname.

–No sé como comenzar un discurso romántico... y aunque me encanten las películas de este género soy un tonto. Supongo esto sucede como magia y simplemente las palabras salen como ahora. Bien, soy un estúpido, imbécil, inmaduro y cobarde, lo acepto tengo demasiados defectos y son los peores... Y no sé porque reaccione así cuando me diste la noticia porque todo este tiempo repase la escena millones de veces y fue genial poner mis manos en tu vientre sabiendo que tendríamos un bebé fue genial, pero es que me dio miedo a lo que pasaría después, vamos tus papás ni siquiera me conocen bien, mi familia... Sé que ahora todos estan encantados, quien no lo estaría con la llegada de una princesa, nuestra princesa. —Lágrimas comenzaron a salir de sus ojos y de los míos también. —Y esto no solo es por la bebé también es por ti, me importas demasiado, desde el primer momento qué te vi, supe que serias alguien especial, desde nuestro primer beso me encantaste más. Siempre quise una chica con la que pudiera encontrar confianza y felicidad total contigo eso y mas encontré, Keyla eres la chica perfecta serás la mamá perfecta, eres todo para mí, no soy ni valgo nada sin ti. Mírame soy un asco, me emborrache todo este tiempo hasta que un día mi tío llego a hacerme entrar en razón, aún no podía ir contigo hasta encontrar valor suficiente y ahora estoy aquí frente al mar con la chica perfecta, con la madre de mi hija, con la persona que amo. Keyla te he extrañado como no tienes idea. Te amo Keyla Franks. —Ya no podía seguir y lloré. Lo abracé.

—Yo también te amo y extraño. —Solloce.

—Te amo Keyla.

—Ya deja de hablar y bésame. —Le tome las mejillas y lo besé. Sus labios sabían delicioso, su labios eran delgados y suaves, ya lo había olvidado.

—Gracias, por esta oportunidad, ya no lo echaré a perder.

—Confío en que no lo harás.

—Al parecer tú ya me perdonaste pero hay alguien que no. —Se arrodillo.

—¿Qué estas haciendo?

—Hola princesa, mi princesa... Nena yo soy papá y perdón por no estar este tiempo contigo pero soy un tonto, cuando estés grande entenderás. Aunque tú no me conozcas bien yo de ti sé todo, el tío Ryland es una buena persona. Sé que eres una loquilla con él y me pongo celoso por ello, y el tío Riker y Rocky también. Te amo princesa y quiero estar contigo, quiero verte nacer y crecer, sabes que papá y mamá siempre van a estar para ti, te vamos a regañar y consentir cuando sea necesario. Ya quiero verte, quiero cargarte y darte muchos besitos amor. ¿Perdonarías a papá que es un tonto? —Me toco y beso mi vientre, la bebé se movió.

—Al parecer lo conseguiste Lynch ella te perdono, le encata su papá y lastimarle las costillas a su mamá.

—Te amo Keyla gracias por todo.

—Te amo Ross. —Lo besé.