Capítulo 7: La Tregua de Navidad... El Plan de San Diego; comienza la invasión.

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Capítulo 7: La Tregua de Navidad... El Plan de San Diego; comienza la invasión y la revancha.

18 de enero 1917

En el Palacio Nacional se estaba llevando a cabo una reunión extremadamente importante donde destacaban Josef, Enrique, Ángelo, Francisco I. Madero, Emiliano Zapata, Francisco Villa, Anastasia, Angélica entre otros más y también el Presidente Venustiano Carranza. Junto a ellos se encontraba Heinrich von Eckardt, el embajador del Imperio Alemán en México.

Angélica y Anastasia habían crecido y también cambiado mucho, pero su personalidad seguía intacta. Ambas se habían vuelto mucho más hermosas con unas medidas que muchas mujeres envidiarían y una de ellas era el vivo retrato de su madre. La otra lo seria de no ser por su cabello negro largo atado en una cola de caballo y sus ojos violetas.

Muchos generales, oficiales, comandantes y capitanes se preguntaban que sucedía y solo podían esperar a que el presidente hablara.

- Damas y caballeros, por favor quisiera pedirles un poco de su atención - dice Venustiano Carranza llamando la atención de todos - gracias. Por favor comandante Angélica.

- Si Señor Presidente - la albina da un paso al frente - damas y caballeros, la razón de porque están aquí es una muy importante, tanto como para los alemanes pero más para nosotros.

- ¿podría decirnos que es? - Pregunta una mujer con vestimenta formal pero a la vez militar.

- Por supuesto señorita general - dice Angélica - el 17 de enero, un mensaje llego desde la embajada alemana enviado desde Berlín el 16 de enero enviado al embajador alemán en Washington D.C de donde se envió al embajador de nuestro país.

- ¿De qué trata el mensaje? - pregunta Madero.

- Alemania... quiere formar una alianza con México contra Estados Unidos -.

Esa respuesta sorprende a todos en el lugar menos a quienes lo sabían siendo los tres hombres ahora más viejos y veteranos hombres del futuro que se mantenían jóvenes.

- ¿Cómo? - dice sin creer Zapata.

- El mensaje dice que el Imperio Alemán quiere mantener la neutralidad con Estados Unidos, además de... bueno, les leeré el telegrama - dice Angélica con la carta en mano para después carraspear un poco la voz.

"Nos proponemos comenzar el primero de febrero la guerra submarina, sin restricción. No obstante, nos esforzaremos para mantener la neutralidad de los Estados Unidos de América.

En caso de no tener éxito, proponemos a México una alianza sobre las siguientes bases: hacer juntos la guerra, declarar juntos la paz; aportaremos abundante ayuda financiera; y el entendimiento por nuestra parte de que México ha de reconquistar el territorio perdido en Nuevo México, Texas y Arizona. Los detalles del acuerdo quedan a su discreción [de Von Eckardt]. Queda usted encargado de informar al presidente [de México] de todo lo antedicho, de la forma más secreta posible, tan pronto como el estallido de la guerra con los Estados Unidos de América sea un hecho seguro. Debe además sugerirle que tome la iniciativa de invitar a Japón a adherirse de forma inmediata a este plan, ofreciéndose al mismo tiempo como mediador entre Japón y nosotros. Haga notar al presidente que el uso despiadado de nuestros submarinos ya hace previsible que Inglaterra se vea obligada a pedir la paz en los próximos meses."

Todos en la junta empezaron a murmurar y a debatir que hacer, mientras era visto todo por el embajador que aunque no lo demostrara estaba nervioso y también inseguro si México aceptase el tratado de alianza.

- Yo acepto la alianza - dice Josef.

Todos miran sorprendidos al veterano menos los que ya lo sabían, pensaban que no aceptaría por el poder que poseían los estadounidenses, pero era comprensible ya que no sabían el verdadero poderío de la fuerza militar nacional... de la fuerza de los Asesinos de las Sombras.

El viajero del tiempo, espacio y dimensionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora