The Professor's Wife [knj+ksj]

The Professor's Wife

Jungkook suspiró para sí mismo por enésima vez ese día, quitándose la correa del bolso en su hombro mientras se desplomaba en una cercana banca vacía. Colocando el bolso en el espacio vacío a su lado, miró alrededor, preguntándose dónde terminó esta vez.

El sol ya se había puesto, los últimos rayos tiñen el cielo con anaranjado y rosa, las luces de la calle se encendieron cuando el entorno se oscureció gradualmente. Parecía que terminó en la Universidad, justo a tiempo para que él alcanzara la última ola de estudiantes yendo a casa, con él yendo a la dirección opuesta y evitando con éxito a los guardias, los alrededores luciendo más familiares cada segundo.

Finalmente se sentó en la banca, Jungkook se inclinó hacia adelante, sus codos apoyados sobre sus rodillas, juntando sus palmas y presionando sus dedos índices en el puente de su nariz, exhalando otra respiración. Siempre era así. Siempre terminaba huyendo de su casa en el momento en que entraba en ella, escuchando las fuertes e indignadas discusiones diarias de sus padres sobre cualquier cosa posible.

Mordió la maldición que amenazaba con escapar de sus labios, en cambio sintió algo caliente y húmedo rebosar sus ojos. Rápidamente parpadeó, apretando sus orbes color marrón para cerrarlos mientras se daba palabras de aliento.

Llegaba a casa con la misma escena de todos los días. Ya debería estar acostumbrado. Llorar sobre eso de nuevo, no le ayudaría en nada.

No quería estar ahí con sus dos padres en casa si podía evitarlo, ya tuvo suficiente de sus peleas desde que las escuchaba de cuando era un niño.

Decidido a apartar sus tambaleantes emociones, Jungkook miró alrededor. Casi había oscurecido, la luz restante era suficiente para que él viera que ahora era la única persona alrededor. Pero ahora que había escapado con éxito otra vez, no tenía ningún lugar a donde ir. Usualmente sus hyungs estarían dispuestos a alojarlo el tiempo suficiente para que sus padres se dieran cuenta que aún no había llegado a casa y comenzaran a buscarlo frenéticamente. Pero ya estaba enfermo y cansado de su lástima, aunque sabía que era hecho por amabilidad. No necesitaban que interfiriera con su vida familiar.

Además, no quería gastar más dinero en un motel. Ya tenía una beca, y raramente tenía dinero para sus artículos escolares, mucho menos para una habitación. Por otra parte, esta no era la primera vez que tenía que dormir afuera en el frío, había escapado con suficiente frecuencia, que ya tenía preparados los artículos necesarios en su bolso.

Y, cuando Jungkook se instaló en la banca, preparándose para dormir, fervientemente deseó que no lloviera esta noche.

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Él solo tuvo que abrir su bocota.

Jungkook no había estado durmiendo por mucho tiempo, tal vez una o dos horas, antes de que la lluvia comenzara. Esta vez no detuvo la maldición que escapó de su boca mientras agarraba frenéticamente su bolso y buscaba el refugio más cercano. Su ropa ya estaba completamente empapada y su cabello negro azabache pegado a su fría piel. Finalmente se refugió mediante un pequeño toldo, comenzando a temblar, mirando fijamente a la densa lluvia que ahora caía sobre él. Alguien allá arriba realmente lo odiaba, pensó amargamente, sacudiendo repetidamente su bolso para apartar el agua. Afortunadamente era resistente al agua, pero eso no cambiaría el hecho de que él estaba mojado, con frío, y perfectamente miserable.

Estornudó, envolviendo sus brazos alrededor de sí mismo e intentaba no temblar demasiado.

—¿Jeon Jungkook? —escuchó su nombre siendo llamado y miró hacia arriba, entrecerrando los ojos bajo la lluvia. Jungkook parpadeo al ver un sedan negro desconocido, con las luces encendidas y los limpiaparabrisas moviéndose contra el vidrio frontal en un movimiento rítmico. Pero la voz le era familiar, profunda e interrogante, e hizo todo lo posible para determinar quién era el dueño de la voz.