School Love Search. [Jeon Jungkook y tú]

Capitulo 24.

~Narra ___~
¿Jungkook tenía un primero amor?
Claro que lo tenía.
Yo eso ya lo sabía. "Todos tenemos uno." No en realidad. Pero yo sabía que yo si tenía uno, y el sólo pensarlo calentaba mis mejillas y orejas.

Me paré del escritorio y comencé a caminar, Jungkook aún no sabía la verdad, todavía tenía que seguir mordiéndome la lengua, y las palabras de Jin resonaban en mi cabeza "Ellos sabrán, ellos llegarán a esa conclusión." Pero ¿por qué no apresurábamos el proceso? Fácil.

¡No podíamos! Las personas no pueden obligarse a amarse los unos a los otros, y tampoco pueden enamorarse de alguien que no recuerdan.

Tan pequeños como para saber que era el amor, pero tan maduros como el hecho de aceptarlo.

Al voltearme para poder seguir con el estudio, me di cuenta muy tarde de que había sido una mala idea, tal vez.

Jungkook estaba demasiado cerca, y no pude evitar tropezar con él, en menos de cinco segundos ya nos encontrábamos en la cama y besándonos, sólo sé que sus labios eran carnosos y dulces, eran adictivos, pero me paré de inmediato y me di cuenta de que Jungkook comenzaba a sangrar de la nariz. La adrenalina estaba en todo mi cuerpo, se repartía en diferentes maneras, ni siquiera me di cuenta que mi labio también sangraba debido al impacto recibido con los dientes de Jungkook.

~Narra Jungkook~

_____ pudo parar la sangre de mi nariz, y fue entonces cuando note la leve cortada que mis dientes posiblemente habían dejado marcada en el labio de ella. Se que era egoísta, pero sentía que de alguna manera estaba reclamando mis derechos sobre ____. Una parte de mí quería que cualquier tipo que la mirara en la calle, mirara su labio y rápidamente asumiera que la marca la había dejado su novio, en ese caso yo sería el novio, pero por otra parte, quería desaparecer esa marca que ahora nos unía en un momento, quería regresar el tiempo unos minutos y quedarme sentado en la silla en vez de pararme, quería eliminar rastros de que mis labios alguna vez tocaron los suyos, porque ahora que mis descarados labios habían probado los inocentes de ella, sabían el sabor y la textura y por alguna razón querían seguir probando más de ellos. Ahora era cuando me preocupaba que al aver probado sus labios una vez, quisiera volver a probarlos de nuevo.

Ni siquiera me atrevía a preguntarle por el dichoso beso. Y ella parecía ponerle más importancia a mi nariz aunque de vez en cuando su mirada chocaba con la mía y la movía para abajo observando mis labios.

-Mañana son los exámenes- pronunció mientras se lavaba las manos.
-Mmh, si- ____ volteó a verme y sonrió. De nuevo, podía decir que su sonrisa era las más hermosa que había visto, tenía algo que no tenían las demás, sinceridad.

-Recuerda que si quedas en uno de los primeros lugares te concederé un deseo- era verdad, se me había olvidado. Me puse a pensar en lo que pediría de deseo si ganaba. Antes de empezar a estudiar pedía acuarelas, carros, simplemente cosas materiales, y como me gustaría que las cosas fueran tan fáciles, y que pudiera pedirle que no se alejara nunca de mi lado, pero ese no era el caso.

-¿As pensado en qué pedirás si ganas?-mis ojos divagaron.
-No, no quiero salarme y que después no termine pasando los exámenes- ____ levanto las cejas en modo de sorpresa, al parecer ____ no era muy supersticiosa.

-Bien entonces, piénsalo y me dices mañana.- al final de cuentas si sabia lo que pediría, sólo que aún no quería pensarlo demasiado.

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Y el día por fin llegó. Pero por suertes de la vida, el estomago se me revolvía, me dolía la cabeza, y no había dormido nada, y no era porque estaba nervioso por el examen, en realidad era porque deliraba con los labios de ____ cada vez que serraba mis ojos, y cada vez que pensaba en mi deseo.